Orange abre la puerta a "cualquier oportunidad" de consolidación del sector

Orange España ha cerrado el ejercicio fiscal con una nota positiva, pero eso no ha sido suficiente para superar los efectos de la pandemia. La compañía cerró el pasado año con unos ingresos de 4.951 millones de euros, un 5,9% menos que en 2019, pese a crecer en mercados tan relevantes como el de fibra óptica.

El grupo francés cerró el año con 19,94 millones de clientes en España, de los que 3,4 millones corresponden precisamente a ese vertical, que crece un 4,8% respecto al año anterior. El grueso de los usuarios pertenecen al negocio de telefónica móvil, que cuenta con 15,93 millones de clientes, mientras que hasta 725.000 hogares tienen contratada la televisión de Orange.

El primer ejecutivo de la compañía en España, Jean François Fallacher, preguntado por la consolidación del sector, ha afirmado que "ha habido, hay y habrá rumores al respecto", pero ha abierto la puerta a "cualquier oportunidad que se presente ante nosotros".

"Somos el segundo operador de España e invertimos 1.000 millones al año en el país, por lo que vigilamos de cerca todo lo que ocurre en el mercado. Creemos que hay demasiados actores en la industria, por lo que esa consolidación podría ser positiva para todos", explicaba en la rueda de prensa posterior a la presentación de resultados.

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En el último trimestre del año, que habitualmente es positivo para el sector debido a la campaña otoñal tras las vacaciones, Orange España ha sumado 38.000 altas netas convergentes, 90.000 altas netas en fibra y hasta 84.000 en el caso de los contratos móviles.

En cuanto a los ingresos, el golpe de la pandemia se ha dejado notar de forma importante. En el último trimestre del año la firma facturó 1.211 millones de euros, un 8% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior. Es especialmente relevante el descenso en servicios minoristas, que caen un 11% en dicho trimestre y un 7,6% en todo el 2020.

El director ejecutivo en España del grupo, Jean François Fallacher, ha explicado que ha sido especialmente relevante "la caída de un 40% del 'roaming', debido a que el turismo se ha hundido un 80% por culpa de la pandemia".

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Durante su intervención tras la presentación de resultados, Fallacher ha apuntado a "un mercado que está virando hacia el 'low cost" y considera que la compañía compite "en un escenario comercial que es muy agresivo". También ha confirmado que ya cuentan con 1,7 millones de clientes en tarifas ilimitadas.

El grupo francés ha abierto la puerta a un recorte que podría alcanzar los 1.000 millones de euros, pero no ha confirmado si esos ajustes se van a centrar en el personal o en otras áreas. Preguntado por esta circunstancia en particular, el primer ejecutivo en España no ha dado una respuesta definitiva y se ha limitado a asegurar que está "profundamente orgulloso del trabajo de la plantilla en España".

Filial de torres

Orange se ha sumado este miércoles a una de las tendencias más importantes del mercado. La operadora ha creado una filial para gestionar las torres de telecomunicaciones que tiene en cartera, y que se han convertido en uno de los activos más relevantes para la industria.

TOTEM, como ha sido bautizada, gestionará algo más de 15.500 emplazamientos, con 8.000 de ellas en España y el resto en Francia. Funcionará de forma independiente y contará con un equipo directivo independiente. Estará funcionando a pleno rendimiento para el final del año 2021.

"Hacer este negocio independiente abre la posibilidad al grupo de ampliar las operaciones en el futuro, de salir a bolsa, de encontrar un socio para el negocio, de llevar a cabo operaciones para nuevos emplazamientos... Este es un primer paso de esta filial", explicaba Fallacher.

Orange calcula que en 2020 la filial de torres podría haber aportado unos 500 millones de euros a la facturación del grupo, el 60% de ella en Francia.