Montero (Hacienda) rescata a un alto cargo de Andalucía para una empresa de la SEPI
El director general de Patrimonio de la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta desde 2014 dimitió del puesto la pasada semana para ser nombrado presidente de SEPI Desarrollo Empresarial
El Gobierno de Pedro Sánchez ha rescatado a un alto cargo de la Junta de Andalucía justo a tiempo de la llegada del Partido Popular al Palacio de San Telmo.
La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, máxima responsable de la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI) y exconsejera de Economía, Hacienda y Administración Pública en Andalucía, ha nombrado presidente de SEPI Desarrollo Empresarial (Sepides) a Antonio Miguel Cervera Guerrero.
Este dimitió como director general de Patrimonio de la Junta, un cargo adscrito al área de Economía y Hacienda que dirigió Montero hasta la llegada de Sánchez a la Moncloa, el pasado 15 de enero.
Cervera Guerrero fue nombrado para ese cargo el 21 de enero de 2014 precisamente por María Jesús Montero y bajo la presidencia de Susana Díaz, según figura en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía. Previamente, había sido secretario técnico de la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, donde también estuvo Montero como consejera autonómica hasta 2014.
Este alto cargo andaluz sustituye en Sepides a Rosa Mosulén, que llegó a la presidencia de Sepides bajo el mando del exdiputado del PP Ramón Aguirre en la SEPI. Previamente había sido colaboradora suya en Metro de Madrid y el Instituto de Crédito Oficial (ICO). El presidente de Sepides recibe una remuneración anual de más de 150.000 euros, según figura en la página web de esta empresa pública. Esto es casi el doble de lo que gana el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez. Tambien es casi el triple de lo que ganaba este alto mando andaluz en 2016 (54.308,06 euros), según detalla la Junta de Andalucía.
Esta no es la única contratación de una empresa pública vinculada a SEPI de un alto cargo del PSOE andaluz, que pasará a la oposición después de que Juan Manuel Moreno Bonilla haya logrado los apoyos suficientes para ser el primer presidente no socialista de Andalucía. Como adelantó El Confidencial, Pedro Sánchez ha colocado al exdiputado socialista Antonio Cueva como consejero de Indra, cuyo máximo accionista es el Estado.
La nueva presidenta de Navantia, Susana Sarriá, accedió al puesto tras desempeñar el cargo de subdirectora de Industrias, Energía y Minas del Gobierno andaluz.
Vinculado al socialismo andaluz también está el actual secretario de Estado de Energía, José Domínguez Abascal, que llegó a ser presidente de Abengoa tras la era de los Benjumea en la empresa, durante la crisis que estuvo a punto de llevar a la quiebra a la multinacional de ingeniería.
La llegada de Cervera Guerrero, miembro vinculado al PSOE, a una empresa pública es la última de una larga lista desde la llegada de Sánchez al Gobierno. Empresas como Red Eléctrica, Renfe, Adif, Navantia, Correos, Paradores o Aena son solo algunos ejemplos de trasvase de altos cargos puestos por este Gobierno en detrimento de los anteriormente elegidos por el PP de Mariano Rajoy.
Pese a ello, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, señaló este verano en el Congreso de los Diputados que no ha habido "enchufes" en los nombramientos para las empresas públicas.
El Gobierno de Pedro Sánchez ha rescatado a un alto cargo de la Junta de Andalucía justo a tiempo de la llegada del Partido Popular al Palacio de San Telmo.