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Cesan al 'penúltimo' mohicano del PP al frente de una empresa pública
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ha logrado en su mandato sanear la compañía

Cesan al 'penúltimo' mohicano del PP al frente de una empresa pública

Alejandro Ballestero, exdiputado del Partido Popular y presidente desde 2013 de Sainsel Sistemas Navales (filial de Navantia e Indra), ha sido finiquitado este mismo miércoles

Foto: Foto de archivo de Alejandro Ballestero (d) firmando un contrato con el responsable de Airbus Defense, Domingo Ureña. (Sainsel)
Foto de archivo de Alejandro Ballestero (d) firmando un contrato con el responsable de Airbus Defense, Domingo Ureña. (Sainsel)

La purga de presidentes en empresas públicas no cesa. El último ejecutivo en caer ha sido Alejandro Ballestero de Diego, exdiputado popular y presidente desde 2013 de Sainsel Sistemas Navales, una filial propiedad de Navantia (51% del capital social) e Indra (49% restante).

Ballestero ha firmado su finiquito este mismo miércoles, según fuentes al tanto de la situación de la empresa. El cese se produce pese a que Sainsel, dedicada a la construcción y puesta en marcha de sistemas de navegación marítima, ha logrado sanearse bajo el mandato de Ballestero.

Las cuentas que presentó la compañía en el año de su llegada fueron negativas, con unas pérdidas de más de 113.000 euros, según consta en las cuentas depositadas en el Registro Mercantil. Un año antes, en 2012, Sainsel también incurrió en números rojos. Sin embargo, ya en 2014 se logró darle la vuelta a la situación y acabar con beneficios. Unos números que han ido creciendo hasta este 2018, cuando se prevé cerrar con más de 1.200.000 euros en ganancias.

Sainsel Sistemas Navales ha pasado de perder dinero en 2013 a terminar este 2018 con una expectativa de beneficio de 1,2 millones de euros

En cuanto a la facturación, esta se ha multiplicado por cinco en los últimos años, hasta llegar a los 11 millones de euros. Además, la cartera de pedidos, el aval de superviviencia de la empresa en el medio plazo, es nueve veces superior que cuando el ejecutivo recién cesado llegó a la compañía.

Además de contar como clientes con sus accionistas Navantia e Indra, Sainsel provee a la Armada Española y en los últimos años años ha conseguido firmar contratos con Airbus Military, Salvamento Marítimo, el Gobierno de Kenia, Australia y otras firmas del sector alemanas.

La situación es diametralmente opuesta a la de su matriz, Navantia, donde consolida sus resultados. La empresa que gestiona los astilleros cerró 2017 con casi 300 millones de euros de pérdidas. En 2016, también acabó con más de 300 millones en negativo. El Gobierno de Pedro Sánchez ha relevado a más de la mitad de su consejo de administración en los últimos meses, incluido el presidente.

Foto: La presidenta de Navantia, Susana Sarriá. (EFE)

Ambos dueños de la compañía, Navantia e Indra, que han preferido no hacer comentarios, todavía no han nombrado un sustituto para Alejandro Ballestero. Fuentes conocedoras de la compañía creen que todo apunta a que será alguien de la órbita del PSOE andaluz y próximo a la nueva presidenta de Navantia, Susana de Sarriá.

Hasta su llegada a Sainsel, Ballestero había sido diputado nacional del Partido Popular por Toledo de 1996 a 2011. Además, fue vicesecretario general del PP de Castilla-La Mancha de 2005 a 2008. Fue portavoz de la comisión de control de RTVE, portavoz adjunto de Interior y miembro de otras comisiones, como la de Política Social, Empleo y Reglamento. Fuera del ámbito político, imparte clases en el Instituto de Empresa (IE) como profesor del programa superior de Lobby y Advocacy y fue consejero de la empresa Zinkia Entertainment (Pocoyó) o Salesland, según hace constar en su perfil profesional de LinkedIn.

Este último cese de presidente a cargo de empresa pública se une a la larga lista de ejecutivos vinculados al PP que han sido sustituidos desde la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa por otros de la órbita del nuevo Gobierno socialista. Este es el caso de Aena, REE, Renfe, Adif, Correos, Paradores, RTVE, la agencia EFE, la propia Navantia, Tragsa o la SEPI, entre otras.

La purga de presidentes en empresas públicas no cesa. El último ejecutivo en caer ha sido Alejandro Ballestero de Diego, exdiputado popular y presidente desde 2013 de Sainsel Sistemas Navales, una filial propiedad de Navantia (51% del capital social) e Indra (49% restante).

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