Caixabank sale del 'cerebro tecnológico' de la Junta andaluza tras las elecciones

Caixabank ha esprintado a final de año para cerrar una operación esperada desde hace años. El banco ha vendido el 5% que mantenía en Ayesa AT, la heredera de la antigua empresa pública Sadiel dedicada a crear la tecnología para el Gobierno andaluz y para Sevillana de Electricidad (hoy Endesa) desde hace más de tres décadas. Una participación no estratégica asumida de la extinta Banca Cívica que se ha vendido al socio mayoritario de Ayesa AT, la ingeniería Ayesa, que pasa a tener el 78% del cerebro tecnológico de la administración andaluza.

El 22% restante sigue en manos de la Junta regional, pese a que el gobierno en funciones de Susana Díaz y Ayesa manejaron un preacuerdo de venta hasta el último momento. Pero finalmente no fructificaron las negociaciones y la decisión sobre esa venta será evaluada por el nuevo Gobierno andaluz del popular Juanma Moreno. Ayesa habría abonado en torno a 1,5 millones por el 5% de Caixabank, lo que valora la filial en unos 30 millones de euros. La ambición de Ayesa, que no ha querido hacer comentarios, es alcanzar el cien por cien del capital para poder tener manos libres para acometer alguna operación corporativa (venta total o parcial). Y así impulsar y profesionalizar la compañía más grande del sector tecnológico andaluz.

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Óscar Giménez

Ayesa AT tiene 1.400 empleados y facturó 103 millones en 2017, la primera vez que superó los cien millones desde antes de la crisis. Creció un 10% gracias sobre todo al mercado nacional, que aportó 85 millones (desde 70 millones en 2016). Las ventas internacionales pasaron de 24 a 17 millones. Entre sus contratos destacan cuatro pilares básicos de la infraestructura tecnológica de la Junta de Andalucía.

Se trata, por orden de importancia económica y relevancia, Giro, el software de gestión económica y de pagos de toda la Junta. Ayesa se lo adjudicó en 2011 junto a Iecisa por 13 millones. A continuación está Séneca, el núcleo tecnológico del sistema educativo andaluz, que aporta unos 3 millones anuales en mantenimiento y desarrollo. Igualmente es Ayesa AT el gestor del programa de gestión de los recursos humanos de todas las consejerías de la Junta, Sirhus. Y, por último, también está detrás del sistema (Gerhonte) que gestiona el personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS), agencia pública adscrita a la consejería de Salud.

Evolución de la Indra andaluza

La salida de Caixabank es sólo un paso más en la transformación que ha vivido la empresa desde 2011. A final de 2015, Ayesa compró otro 5% que Endesa aún mantenía en el capital por 1,2 millones. Igualmente, la entrada de Enel en su capital llevó a que el proveedor andaluz dejara de ser estratégico. El mantenimiento de la carga de trabajo de Ayesa AT para Enel dentro y fuera de España es un asunto estratégico cara a los próximos años.

Cuando Ayesa entró en el capital, fruto en parte de la buena relación tradicional que ha mantenido el patrón fundador, José Luis Manzanares, con los distintos Gobiernos socialistas, compitió con Indra. El distinto color político en Sevilla y Madrid en ese año hizo inviable esa oferta. Pero los acercamientos de Indra hacia la empresa andaluza controlada por la familia Manzanares no han dejado de producirse desde entonces.