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Duro Felguera se salva de la quiebra y ultima un acuerdo estratégico con TSK
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los arrojo y los arias renuncian a sus derechos

Duro Felguera se salva de la quiebra y ultima un acuerdo estratégico con TSK

Las dos familias fundadoras de la ingenieria han renunciado a suscribir el 38% de la ampliación de capital, una condición suspensiva de la banca para rescatar a la empresa

Foto: El presidente de Duro Felguera, Acacio Rodríguez (3d), durante la reunión de la junta de accionistas
El presidente de Duro Felguera, Acacio Rodríguez (3d), durante la reunión de la junta de accionistas

Duro Felguera ya tiene el camino expedito para salvarse antes de que acabe el presente mes de julio. Según señalan fuentes financieras, Inversiones Somio e Inversiones Rio Magdalena, los dos principales accionistas de la ingenieria, con el 38% del capital, han renunciado a suscribir la parte proporcional de la ampliación de capital de 125,7 millones que debe sacar de la quiebra técnica a la compañía asturiana. Una condición que, paradójicamente, era 'sine qua non' para que la banca aprueba la quita sobre el 75% de la deuda financiera.

Las acciones de la compañía se disparan este miércoles otro 30% hasta los 0,23 euros el último día para acudir a la ampliación de capital, tras haber corrido un 900% desde que se inició el periodo de suscripción preferente el pasado 3 de julio.

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El plazo para que Inversiones Somio, propiedad del antiguo presidente, Angel Antonio del Valle, en representación de la familia Arrojo, fundador del grupo, e Inversiones Rio Magdalena, propiedad de los Arias, venció el pasado lunes. Y ninguno de los dos clanes hizo uso de su derecho de suscripción preferente. De haberlo hecho, de haber comprado alguna de las acciones de la ampliación de capital, la banca hubiera dado por roto el acuerdo de refinanciación, por la que le condona cerca de 270 millones de euros que la empresa lleva impagados desde hace más de un año.

Sin esa quita de la banca, Duro Felguera estaría condenada a presentar de forma inmediata concurso de acreedores, por lo que desde la compañía se considera todo un alivio que tanto los Arrojo como los Arias hayan renunciado a suscribir la ampliación. Al ser dueños del 27 y del 11% del capital del holding gijonés, Somio debería hacer desembolsado 33,93 millones y Rio Magdalena, 13,82 millones. En total, 47,75 millones, el 38% de la inyección de capital que hace las veces de rescate de la sociedad.

Foto: Junta general de accionistas de Duro Felguera (EFE)

Las dudas sobre las intenciones de los Arrojo han estado vigentes hasta última hora porque Somio llegó a anunciar un acuerdo con un inversor mexicano para quedarse con el 24% de Duro Felguera, a través de unas opciones de compra. Esas opciones, cuyo plazo se extendió en hasta dos ocasiones, nunca llegaron a ejercerse por parte de Pedroza Limited. Una firma radicada en Inglaterra, con apenas 3.000 libras esterlinas de capital, perteneciente a Mauricio Treviño Zambrano, empresario de origen mexicano perteneciente a la familia Zambrano, experto en operaciones internacionales.

Una vez superado este obstáculo, Duro Felguera tiene dos semanas más para conseguir levantar los 125,7 millones necesarios para completar la ampliación de capital. De momento, cuenta con unos 30 millones que como mucho van a aportar la estadounidense Metco, la qatarí ACEC y la también asturiana TSK.. La primera, socio industrial de la compañía, va a tomar un 10% de las acciones, mientras que ACEC se va a quedar con entre un 5 y un 10% y TSK, con un 2,5%.

Aunque el nuevo presidente, Acacio Rodríguez, ha asegurado que la ampliación de capital podría salir adelante sin que se suscribiese en su totalidad -con 100 milones serían suficiente, según su versión-, fuentes próximas a la colocación consideran que de no alcanzarse los 125,7 millones, la operación se daría por suspendida. De este dinero depende el futuro de una empresa con unos 2.000 trabajadores que este mes no han recibido la paga extra de julio por los problemas de liquidez del grupo.

Duro Felguera ya tiene el camino expedito para salvarse antes de que acabe el presente mes de julio. Según señalan fuentes financieras, Inversiones Somio e Inversiones Rio Magdalena, los dos principales accionistas de la ingenieria, con el 38% del capital, han renunciado a suscribir la parte proporcional de la ampliación de capital de 125,7 millones que debe sacar de la quiebra técnica a la compañía asturiana. Una condición que, paradójicamente, era 'sine qua non' para que la banca aprueba la quita sobre el 75% de la deuda financiera.

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