La JUR eleva la recaudación exigida a los bancos: recolectará 7.500 millones en mayo

La Junta Única de Resolución (JUR) va a pedir una tercera ronda (de financiación), y vuelven a pagar los bancos. El organismo calienta ya los motores para poner en marcha en mayo la nueva recolecta anual de financiación para el Fondo Único de Resolución, el colchón con el que la eurozona espera evitar que los contribuyentes tengan que volver a poner dinero de sus bolsillos en caso de que un banco entre en bancarrota o tenga que ser saneado.

Entre el 30 y el 2 de mayo, la JUR comunicará al Banco de España y el resto de autoridades nacionales la cantidad que sus entidades deberán poner este año a la hucha común. Con una novedad: este año las aportaciones han sido “ligeramente aumentadas” respecto a los dos ejercicios anteriores, según ha anunciado hoy la directora gerente de la JUR, Elke König.

En total, los bancos de la eurozona deberán ingresar este año unos 7.500 millones de euros, según König, un aumento significativo frente 6.600 recolectados el año pasado. Los supervisores nacionales tendrán un mes para hacer la transferencia a la JUR, es decir, hasta finales de mayo.

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El motivo del aumento de la “tasa” exigida a las entidades financieras para que en caso de que una nueva crisis estalle se el sector el que arrime el hombro, y tratar de evitar en la medida de lo posible recurrir a dinero público para salvar bancos, es que los depósitos protegidos en la eurozona -aquellos de hasta 100.000 euros- han aumentado en un 3 % durante este ejercicio.

Una buena noticia, a ojos de König, que ve en esto un síntoma del vigor recobrado en la eurozona, pero que supone que es necesario contar con más dinero en la recámara ante posibles problemas para asegurar que el Fondo puede cubrir cualquier pérdida que una bancarrota o resolución pueda amenazar con infringir a los depósitos protegidos.

Brexit: Ojo a los bonos bajo regulación británica

Ante la incertidumbre que rodea las negociaciones del Brexit, la JUR ha advertido a los bancos de que se preparen “para cualquier resultado”, en palabras de König. “Estamos vigilando de cerca sus planes (ante el Brexit), no solo de organización, sino también de financiación”, ha explicado. En concreto, ha señalado al reto que supondrán los bonos emitidos por bancos de la eurozona bajo la regulación británica, que tras la salida de Reino Unido de la UE podrían no ser elegibles como MREL, el requisito mínimo de fondos propios y pasivos admisibles.

La JUR calcula que más de 100.000 millones en estos bonos, y señala que los bancos de países como Italia y Francia han sido emitido una gran cantidad de los mismos, aunque están muy repartidos. “Están muy extendidos en la Unión Bancaria (de la eurozona). No se puede decir que un banco en particular esté expuesto a este riesgo”, ha señalado Dominique Laboureix, miembro de la JUR.