Reunión secreta entre Florentino y Fainé en Mallorca para negociar la OPA sobre Abertis

Primera semana de agosto. Florentino Pérez acaba de presentar los resultados de ACS, en los que confirma su intención de lanzar una Oferta Pública de Adquisición (OPA) sobre Abertis que supere a la presentada por la italiana Atlantia. El presidente de la constructora anda de viaje entre Estados Unidos, donde su Real Madrid jugaba sus últimos partidos de pretemporada; Marbella, para alguna reunión privada con conocidos, y Mallorca, donde suele pasar parte de sus veranos. Allí, en la capital de las Islas Baleares, el septuagenario empresario se reunió con Isidro Fainé, presidente de Criteria Caixacorp y el hombre clave en el futuro de Abertis, su última gran obsesión para poner la guinda a su legado.

Según han confirmado fuentes próximas a las conversaciones, Florentino Pérez mantuvo una cita con el banquero catalán para conocer cuál era su posición en la OPA de Atlantia sobre la compañía de concesiones de autopistas. Fainé, como suele ser habitual en él, le respondió que no tenía una decisión tomada y que la oferta del grupo italiano no había contado con su connivencia. No obstante, le comentó que la estructura financiera del 'holding' transalpino le venía como anillo al dedo a Criteria, ya que le permitía seguir cobrando dividendos para mantener su actividad inversora y la de la Fundación la Caixa.

En cualquier caso, le indicó que estaba dispuesto a escuchar su alternativa y que, cuando la tuviera construida, estaría encantado de analizarla con detalle. Su respuesta fue, por tanto, "muy florentina”, describen fuentes conocedoras del encuentro entre Fainé y Florentino, en referencia a las postura neutra que tomaban los ricos comerciantes y banqueros de Florencia a la hora de decidirse por los negocios, como los Médicis. El presidente de ACS salió contento de su reunión con el también septuagenario, con el que ya fue socio de Abertis cuando la constructora llegó a tener un 25% del capital de la empresa de autopistas.

Fue en 2012, cuando los acreedores, especialmente UBS, le apretaron las tuercas a Florentino Pérez por su inversión fallida en Iberdrola

Una época de bonanza al principio y de espinas al final en la que Fainé tuvo que salir al rescate del empresario madrileño. Fue en 2012, cuando los acreedores, especialmente UBS, le apretaron las tuercas a Florentino Pérez por su inversión fallida en Iberdrola, para la que se endeudó en más de 10.000 millones. Cuando el agujero ya superaba los 5.000 millones, ACS se vio obligada a vender el 10% que aún mantenía en Abertis y que fue adquirido por la propia compañía catalana y por OHL a partes prácticamente iguales.

Aquello forjó una relación que se ha mantenido hasta la fecha y que les lleva a verse cada verano en Mallorca, según distintas fuentes. No obstante, matizan que la reunión de este año en la capital balear fue singular porque el tema de conversación fue el futuro de la concesionaria, operación que se ha convertido en cuestión política nacional ante la oposición frontal del Gobierno español a que Abertis acabe en manos italianas tras la mala experiencia de Endesa, propiedad de la también romana Enel.

Un asunto para endulzar a Rajoy

Florentino le hizo ver al banquero que la operación era buena para los dos porque, además de conseguir un retorno del 20%, serviría para edulcorar las relaciones con Moncloa, muy frías debido a que en distintos ministerios sentó mal que se enterasen por la prensa de las intenciones de Atlantia y que ACS haya interpuesto tres arbitrajes internacionales contra el Reino de España para reclamar 1.000 millones por la concesión ferroviaria del AVE a Francia, actualmente en quiebra. El ingeniero de Caminos y Puertos le hizo saber que contaba con el visto bueno de Mariano Rajoy, con el que había cenado días atrás en el palacio presidencial, como adelantó El Confidencial.

Para ACS, la posición de Criteria CaixaCorp es vital porque, si se sumara a su propuesta, se ahorraría unos 2.500 millones de euros

Pero Fainé, que mantiene sus propios frentes -futuro de Gas Natural, fusión con BPI en Portugal y su participación en Repsol-, no se comprometió a nada concreto que le supusiera tener las manos atadas para septiembre, cuando de verdad debe adoptar la decisión de subirse al caballo de la alternativa española o aceptar la oferta de la italiana.

Para ACS, la posición de Criteria CaixaCorp es vital porque, si se sumara a su propuesta, si aceptara canjear el 22,25% que tiene actualmente en Abertis por una participación en la sociedad de nueva creación, se ahorraría unos 2.500 millones de euros. Es el dinero que no tendría que buscar entre bancos y fondos de infraestructuras, lo que abarataría una operación que de por si le obliga a un esfuerzo de 16.000 millones de euros. Un apoyo financiero esencial para Florentino Pérez, que además pondría de manifiesto la necesaria relación entre las grandes empresas de Madrid y de Barcelona para preservar los intereses de España en un momento delicado por el pulso independentista de la Generalitat.