Hispania abre la puerta a mejorar su opa sobre Realia ante la irrupción de Slim
La socimi está dispuesta a elevar su oferta si con eso se garantiza el éxito de la opa, aunque, en todo caso, este nuevo precio estaría por debajo de la cotización actual
Las espadas están en alto y nadie quiere dar la batalla por perdida. La guerra abierta por tener el control de Realia promete escribir una palpitante épica empresarial, cuyos protagonistas son primeros inversores internacionales. En un bando, Carlos Slim, la tercera fortuna del mundo, cuya primera gran decisión tras haberse convertido en el primer accionista de FCC ha sido suspender el proceso de venta abierto sobre el 36,8% que posee en la inmobiliaria. En el otro, George Soros, uno de los financieros más admirados del planeta, que tras ver cómo el mexicano le arrebató el desembarco en el grupo de infraestructuras ahora se enfrenta a que también eche por tierra sus planes para adquirir Realia.
A través de Hispania (ver cotización), socimi donde el magnate de origen húngaro es el principal accionista junto a Paulson, Soros ha lanzado una opa sobre Realia que espera recibir el visto bueno de la CNMV -Comisión Nacional del Mercado de Valores- en los próximos días, tras haber respondido a todos los requirimientos de información que el supervisor de los mercados ha llevado a cabo a lo largo del último mes, dentro del tradicional proceso de analizar el folleto de la oferta.
Ésta sitúa en 0,49 euros por acción el precio que está dispuesta a pagar Hispania, lo que supone valorar toda la compañía en 150 millones de euros, frente a los 250 millones que le otorga actualmente el mercado, después de que Realia cerrara el viernes en 0,81 euros (ver cotización), tras haberse disparado un 11,6% esa misma jornada, la primera tras conocerse oficialmente la decisión de Slim de mantener su participación en la inmobiliaria.
A pesar de que el mexicano ha puesto en jaque los planes de Hispania, la socimi ha decidido seguir adelante con su oferta e, incluso, según fuentes conocedoras, está abierta a elevar ligeramente el precio si con ello consigue sacar adelante sus planes de hacerse con Realia, operación que está condicionada a que la mayoría de los accionistas de la inmobiliaria acepten su oferta.
Aunque todavía no hay una cifra formal decidida, el margen de mejora de la socimi dista mucho de los niveles de cotización en que se mueve actualmente la dueña de una de las Torres KIO, que desde principios de año acumula una revaloriación de casi el 60%, al calor de la irrupción de Slim en FCC y el creciente convencimiento de que iba a entrar en liza en la batalla por la inmobiliaria.
En esta partida hay otros dos jugadores cuyas participaciones van a tener mucho que decir para ver de qué lado termina inclinándose la balanza: Bankia y Sareb. La primera posee el 24,9% de Realia, mientras que la segunda es dueña de un crédito participativo que puede ejecutar a partir de este mes de febrero y que le permitirá hacerse con hasta un 3% del capital.
Además, Bankia le traspasó los créditos fallidos con los que Prasa y Lualca llegaron a adquirir hasta un 10% de Realia, participaciones que el conocido como banco malo reconocía seguir teniendo a principios de diciembre.
Pero, desde entonces, el peso de estas dos inmobiliarias se ha reducido hasta el 2,9% en el caso de Lualca, y a cero en el de Prasa, movimientos sobre los que ahora Sareb prefiere guardar silencio y que se han comunicado a la CNMV fuera de los plazos que dicta la normativa, con el agravante de que esto ha ocurrido en un momento en que se sabía que había una opa en marcha, lo que deja en el tejado del regulador la responsabilidad de tomar cartas en el asunto.
Y es que, estas participaciones y el papel que esté jugando en ellas Sareb es clave, ya que Slim sólo necesita garantizarse que otro 13% del accionariado rechace la oferta de Hispania para echar por tierra los planes de Soros. Pero, en su contra, el mexicano tiene que tanto Bankia como la entidad ahora dirigida por Jaime Echegoyen están decididos, prácticamente obligados, a vender. Eso sí, al mejor postor y en procesos transparentes, ya que tienen detrás el dinero público.
Las espadas están en alto y nadie quiere dar la batalla por perdida. La guerra abierta por tener el control de Realia promete escribir una palpitante épica empresarial, cuyos protagonistas son primeros inversores internacionales. En un bando, Carlos Slim, la tercera fortuna del mundo, cuya primera gran decisión tras haberse convertido en el primer accionista de FCC ha sido suspender el proceso de venta abierto sobre el 36,8% que posee en la inmobiliaria. En el otro, George Soros, uno de los financieros más admirados del planeta, que tras ver cómo el mexicano le arrebató el desembarco en el grupo de infraestructuras ahora se enfrenta a que también eche por tierra sus planes para adquirir Realia.