El empleo sorprende en verano con 209.000 trabajadores más y récord de ocupación
Se trata del mayor ritmo de creación de empleo en un tercer trimestre desde 2017 descontando los años de la pandemia. Un crecimiento que contrasta con los apenas 23.000 nuevos afiliados a la Seguridad Social
En medio de la desaceleración económica, la inflación y la incertidumbre geopolítica, el empleo sigue siendo el único indicador que da alegrías. El mercado español vivió un verano de intensa creación de empleo y creó algo más de 209.000 empleos. Se trata del mejor dato en un tercer trimestre desde el año 2017 si se excluyen los veranos de la pandemia, lo que refleja una inesperada aceleración del mercado laboral. El dato sorprende porque recoge una creación de empleo muy superior a la que marcaron los datos de afiliaciones. Los registros de la Seguridad Social muestran un aumento de la ocupación de menos de 23.000 personas, un avance de apenas el 0,17%, cinco veces menos que el crecimiento del 1% que muestra la EPA. Este dato aleja los temores de una inminente contracción económica en España. El INE publicará la primera estimación del PIB del tercer trimestre este mismo viernes.
Si se toman los datos desestacionalizados, la ocupación aumentó en un 0,75%, medio punto menos que en el segundo trimestre de este año pero medio punto más que hace un año. Por su parte, la tasa de paro se mantuvo estable como consecuencia del gran aumento de la población activa a lo largo del verano, como se apunta más adelante. Las horas trabajadas también registraron una aceleración a lo largo del verano. En concreto, el número de horas trabajadas fue un 2,4% superior al mismo trimestre del año anterior, lo que supone una aceleración de la tasa interanual desde el 1,8% del trimestre anterior. Además, es el mayor crecimiento de las horas trabajadas en tasa interanual desde el cuarto trimestre de 2022. Esto significa que la creación de empleo fue real: las empresas aumentaron sus plantillas para cubrir necesidades de mano de obra.
El verano siempre es un periodo de intensa creación de empleo gracias a la temporada alta turística y al refuerzo de sus plantillas que hacen las empresas para compensar a quienes se van de vacaciones. Sin embargo, el dato de este verano supera ampliamente el ritmo de los años previos a la pandemia. La creación de empleo media de los veranos desde 2014 hasta 2019 fue de 175.000 personas, casi 35.000 nuevos ocupados menos que este verano.
La mayor parte del empleo creado fue privado, con un aumento de 192.000 nuevos ocupados. Se trata del mayor aumento del empleo privado en España desde el verano de 2016 si se excluyen los años de la pandemia. El sector público, por el contrario, apenas creó 17.000 empleos, lo que significa uno de los veranos de menor dinamismo en las plantillas públicas de los últimos años.
Tres sectores acaparan el protagonismo de la creación de empleo durante el verano: sanidad, comercio e industria manufacturera, que incorporaron a 130.000, 91.000 y 87.000 trabajadores respectivamente. Pero lo más importante es que su ritmo de creación de empleo fue muy superior al de los años previos a la pandemia, con una diferencia de más de 45.000 empleos en cada uno de ellos. El dato de la industria manufacturera sorprende especialmente dado que varios indicadores de la actividad industrial llevan meses mostrando una contracción de la actividad, incluyendo el PMI manufacturero que suma hasta septiembre seis meses consecutivos en negativo.
Por el contrario, la educación, la hostelería y las actividades profesionales, científicas y técnicas, registraron los peores datos. En el caso de la educación, destruyó algo más de 160.000 empleos, una cifra poco habitual que demuestra que las empresas y las Administraciones Públicas siguen prescindiendo de los docentes en verano para no pagarles las vacaciones incluso a pesar de la reforma laboral. Por su parte, la hostelería sigue mostrando signos de agotamiento una vez que ha recuperado el flujo de turistas previo a la pandemia. En total, creó 47.000 empleos durante el verano, lo que es apenas la mitad de que era habitual antes de la pandemia.
Este incremento de la ocupación permite a España marcar un nuevo récord de empleo con algo más de 21,26 millones de trabajadores. Son 720.000 más que en el verano de 2022, lo que supone un crecimiento del 3,5%. De hecho, supone una aceleración en el ritmo interanual de creación de empleo, ya que el crecimiento llegó a frenarse por debajo del 2% al inicio del año y, con este último dato ha vuelto a acelerar por encima del 3%.
El dinamismo del mercado laboral ha animado a la incorporación de más personas que buscan un empleo, una buena parte de los cuales son extranjeros. La población activa aumentó en algo más de 300.000 personas, lo que supone el mayor crecimiento en un solo trimestre de la serie histórica si se descuentan los vaivenes de la pandemia.
La incorporación de población activa ha sido tan intensa que el mercado laboral no ha podido absorber a todas estas personas. La consecuencia es que el número de desempleados aumentó en algo más de 92.000 personas a lo largo del trimestre, elevando la cifra total hasta los 2,86 millones. La tasa de paro también se incrementó, hasta el entorno del 11,8%, pero se mantuvo por debajo del 12% por segundo trimestre consecutivo. En cualquier caso, este incremento del paro no se debe a un peor comportamiento del mercado laboral, sino a uno mejor, ya que aumentó la fuerza laboral disponible a un ritmo mayor al empleo.
Todos estos datos suponen un reto de comprensión para los expertos. El ritmo de creación de empleo es muy superior al de las afiliaciones, algunos de los sectores que más tiran llevan meses atravesando una situación complicada (como es la industria manufacturera) y la incorporación de población activa ha superado todas las expectativas. La última pieza para tener todas las piezas del puzzle la publicará este mismo viernes el INE: la contabilidad nacional. Será entonces el momento de ver si encajan.
En medio de la desaceleración económica, la inflación y la incertidumbre geopolítica, el empleo sigue siendo el único indicador que da alegrías. El mercado español vivió un verano de intensa creación de empleo y creó algo más de 209.000 empleos. Se trata del mejor dato en un tercer trimestre desde el año 2017 si se excluyen los veranos de la pandemia, lo que refleja una inesperada aceleración del mercado laboral. El dato sorprende porque recoge una creación de empleo muy superior a la que marcaron los datos de afiliaciones. Los registros de la Seguridad Social muestran un aumento de la ocupación de menos de 23.000 personas, un avance de apenas el 0,17%, cinco veces menos que el crecimiento del 1% que muestra la EPA. Este dato aleja los temores de una inminente contracción económica en España. El INE publicará la primera estimación del PIB del tercer trimestre este mismo viernes.
- La OCDE recomienda subir el IVA y bajar el IRPF a las rentas bajas y la tributación del capital J. Jorrín
- La tasa de empleo en la OCDE marca niveles récord con España cinco puntos por debajo de la media EFE
- El Gobierno fía la sostenibilidad de las pensiones al pleno empleo y a crecer un 2% anual Javier Jorrín