España dispara el envío de gas a Marruecos en plena crisis diplomática con Argelia

España está aumentando con fuerza el suministro de gas a Marruecos a través del gasoducto que une la península Ibérica con el país norteafricano a través de Tarifa (Cádiz). El pasado mes de noviembre, las exportaciones de gas desde territorio nacional al reino alauí se dispararon en casi 3,5 veces respecto de la media de los meses previos.

España envió el mes pasado 553 GWh de gas por el tubo Magreb-Europa, que desde junio funciona en sentido inverso a como solía hacerlo hasta finales de 2021, momento en que Argelia decidió cerrar el grifo a su vecino del Magreb. El abastecimiento de noviembre fue significativamente más alto que los 338 GWh que se enviaron en octubre y aún más respecto a junio (60 GWh), julio (172 GWh), agosto (119 GWh) y septiembre (123 GWh), según los datos recopilados por Enagás, gestor del sistema gasista español, y Cores.

Dicha provisión de gas desde España, crítica para el país liderado por Mohamed VI en un momento de crisis y en pleno enfrentamiento entre Argel y Rabat, llega después de que el Gobierno de Pedro Sánchez diera un giro histórico en su relación con Marruecos y pasara a apoyar sus tesis en lo respectivo a la soberanía del Sáhara Occidental. Dicho movimiento del Ejecutivo español provocó una airada respuesta por parte de Argel, que retiró a su embajador de Madrid y ha congelado en buena medida las relaciones comerciales con España.

De hecho, las exportaciones a Argelia desde España son las que más caen, junto con Rusia y China, en lo que va de 2022, según los datos publicados por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Diversas comunidades autónomas como Valencia o Castilla-La Mancha están tratando de recomponer lazos comerciales en un contexto de crisis diplomática que está afectando al tejido productivo de estas regiones.

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Desde junio, el gas que surte España a Marruecos a través del gasoducto que une ambos continentes por el estrecho de Gibraltar es comprado por el país norteafricano a un proveedor tercero, que descarga el combustible en las regasificadoras españolas y posteriormente bombea hacia el vecino del sur. Dicho proveedor no ha sido identificado, aunque el mercado cree que se trata de gas procedente de Qatar, con quien Marruecos tiene una relación de cooperación en materia energética cada vez más estrecha.

A finales de 2021, Rabat medió con Qatar para que el país donde hoy se celebra la semifinal del Mundial que enfrenta a Francia y Marruecos llevara gas hasta España y esta, posteriormente, lo transportara hasta su territorio, según publicó El Español citando fuentes del Ejecutivo marroquí. Marruecos utiliza buena parte de ese gas para producir electricidad en centrales térmicas de ciclo combinado.

La cuestión es altamente sensible para el Gobierno español, que ha insistido recurrentemente en que el gas que va de España a Marruecos no viene de Argelia, principal suministrador de este bien de primera necesidad en la península Ibérica. De hecho, Argel amenazó a España con romper el megacontrato de provisión de gas que gestiona Naturgy si su gas acababa en suelo marroquí. El Gobierno español siempre ha rechazado este extremo, aunque es imposible saber la trazabilidad exacta de dónde acaban las moléculas de gas que llegan a España.