El único problema del Manchester City no es el calendario: el dato que complica a Guardiola

El Manchester City puede presumir de ser uno de los grandes equipos de Europa en la actualidad. El equipo inglés, a base de talonario, ha conseguido hacer una plantilla muy completa, siendo temible línea por línea. Pep Guardiola, de manera magistral, ha sabido encontrar su equipo ideal en cada una de las posiciones, al que consiguió llevar a su cenit la pasada temporada, en la que logró el triplete y, sobre todo, el deseado título de campeón de la Champions League.

El pasado curso fue la mejor expresión del fútbol citizen, un proyecto que logró confirmarse como un equipo muy sólido en defensa, con un centro del campo capaz de dinamizar los partidos y, sobre todo, con un cazagoles como Erling Haaland que se convirtió en uno de los grandes responsables del éxito de su equipo. Pero, además, varias piezas encajaron a la perfección en el esquema de Guardiola para hacerlo un equipo muy compacto en todas sus líneas.

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Rubén Rodríguez

Sin embargo, esta temporada, el equipo del Etihad no termina de encontrar su mejor versión y, sobre todo, está teniendo muchas más dudas contra los combinados más duros. Es cierto que, si echamos un vistazo a los datos del City, es un equipo que ya ha levantado dos títulos —Supercopa de Europa y Mundial de Clubes— y que pelea por hacerse con otros tres: Premier, Champions y FA Cup. Pero hay ciertas sensaciones que confirman que el equipo no está en un momento brillante.

La primera clave está en el aspecto goleador. Las lesiones de Erling Haaland le han dejado fuera de juego durante más de dos meses y, aun así, ya lleva 29 goles... pero, eso sí, solo ha sido capaz de anotar 4 en los últimos 11 partidos que ha jugado. El noruego no vive su mejor momento, un hecho que no ha podido ser cubierto tal y como sí sucedió el pasado año. El pasado curso, siempre que Haaland o podía sumar, aparecía un nombre propio: Riyad Mahrez.

El delantero argelino, que este verano fichó por el Al-Ahli saudí, participó la pasada temporada en 28 goles. Cuando el partido se complicaba, aparecía para desatascar los encuentros con su calidad, algo que Pep echa mucho de menos esta temporada. Y los datos hablan muy claramente: Jack Grealish, Jeremy Doku, Matheus Nunes o Mateo Kovacic, que suelen ocupar su posición este curso, hasta la fecha, aportan 24 tantos entre todos ellos.

Pero, además, otra de las claves está en el medio del campo. La pérdida de llegada con la marcha de Ilkay Gündogan, la bajada de nivel de un John Stones que fue revolucionario el pasado año como mediocentro y la grave lesión de Kevin de Bruyne, que le hizo perderse la primera parte de la temporada, han provocado muchas dudas en una zona clave del equipo. Por ende, no se ha tenido tanto control como Guardiola deseaba y su equipo lo ha notado.

Todos estos factores deportivos desembocan en un dato que es la clave de todo: las dudas de City contra los grandes. Mientras que la pasada temporada el conjunto sky blue fue capaz de ganar 16 de 24 puntos posibles contra los primeros clasificados de la Premier, este año tan solo han sumado 4 puntos de 18 posibles —les faltan por jugar dos partidos—. Y, lo que es aún peor: no han sido capaces de ganar ninguno de estos seis partidos ya jugados.

La mejor lectura para el City es que, a pesar de los problemas, siguen siendo candidatos a ganar tres títulos más pero, para ello, deberán hacer frente a un calendario exigente. Así, en los próximos veinte días, jugarán tres partidos de Premier —Aston Villa, Crystal Palace y Luton—, los dos encuentros de los cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Real Madrid y las semifinales de la FA Cup ante el Chelsea. Pero los datos confirman que el calendario no es el mayor problema para Pep.