La casa de los líos de Montse Tomé: cuando lo deportivo es empañado por extraños errores

La Selección española tiene un partido de trámite ante Suecia en la Liga de las Naciones (19:00h/La 1): El combinado nacional, a pesar de la derrota ante Italia del pasado viernes, consiguió la clasificación a la Final Four del torneo, precisamente después de que el combinado escandinavo perdiera ante Suiza. Pese al tropiezo, el conjunto entrenado por Montse Tomé jugará las semifinales en busca de un nuevo título, sin antes olvidarse de pelear por tres puntos más en la fase de grupos.

Sin embargo, el combinado nacional vuelve a encontrarse con un nuevo problema que va más allá del césped, algo que está siendo demasiado habitual en los últimos años. Las polémicas extradeportivas que rodean al conjunto nacional no terminan de desaparecer y, casi partido tras partido, continúan los extraños líos que afectan a la Selección. Ya no hablamos de las 15 amotinadas con Jorge Vilda o los escándalos de Luis Rubiales, sino fallos impropios de equipos de primer nivel.

El último sucedió el pasado viernes, precisamente en el partido frente a Italia. España saltó a la segunda parte con diez jugadoras, disputando tres minutos con una futbolista menos, un tiempo que aprovechó la azzurra para conseguir empatar y lograr cambiar la dinámica del partido. Hasta ese momento, el dominio español era absoluto, pero todo cambió con un extraño error que, todavía, no ha sido bien explicado. De hecho, se han dado varias versiones diferentes de lo acaecido.

"No sé realmente qué es lo que ha pasado, pero a nosotras nos han comentado los cambios al principio del descanso, antes de la charla. Ni vi los dos goles de Italia porque estaba en la ducha. Me estoy enterando ahora mismo de que estuvimos con una jugadora menos. Ha sido una cagada tremenda, pido perdón. Esto no se puede permitir en un partido de este nivel", explicaba Athenea del Castillo. Pero la seleccionadora, Montse Tomé, daba una versión muy diferente.

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Rubén Rodríguez

"En el descanso, hicimos el cambio de Athenea por Lucía. Pero cuando íbamos a saltar al césped, Aitana nos avisó de que no se encontraba bien, por lo que no nos dio tiempo a que pudiera calentar Esther. Por eso, iniciamos la segunda parte con una jugadora menos". Dos versiones muy distintas, de las que la propia Esther González también tenía su propio punto de vista: "No puedes dejar que el equipo empiece la segunda parte con diez jugadoras".

No es la primera vez

El problema es que esto no es la primera vez que sucede en las últimas semanas, con la Selección femenina como protagonista. El pasado 31 de octubre, hasta cuatro jugadoras que estaban convocadas ante Suiza no pudieron jugar por un extraño error. Sí aparecían en la hoja de la aplicación de UEFA, pero no en el acta del partido por lo que, para evitar una alineación indebida, Montse Tomé decidió no contar con ninguna de ellas.

Así, ni Irene Paredes, ni Ivana Andrés, ni Esther González, ni Mariona Caldentey pudieron jugar por un extraño fallo que las dejó sin minutos. Pero el problema con los nombres parece algo recurrente con el equipo femenino, pues ya sucedido algo similar en el Boletín Oficial del Estado (BOE) cuando se condecoró al equipo campeón del mundo con la Medalla de Oro al Mérito Deportivo, donde aparecían hasta cinco nombres mal escritos. En este caso, responsabilidad del CSD.

Puede parecer solo una anécdota o, incluso, sonar a broma, pero no es de recibo que el equipo campeón del mundo y uno de los mejores de nuestra historia, que puede marcar una época, sea noticia por situaciones tan estrambóticas como estas. De conformar mal las convocatorias para un partido, a no hacer cambios en pleno encuentro o fallos de comunicación en un galardón único. Un error tras otro que tienen difícil explicación. Y, desde luego, ninguna justificación.