El Real Madrid, a 36 puntos del Barça y con el lastre de las denuncias al Tacón

Suele decirse que entre un demócrata y un dictador hay una sencilla diferencia: si el demócrata no tiene oposición, su deber es crearla, mientras que el sueño del dictador es eliminar toda oposición. La Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF), a la que pertenecen 13 de los 16 clubes de la Primera Iberdrola, pidió reunirse con la Federación Española de Fútbol (RFEF) para negociar cómo poner fin a la temporada, pero Luis Rubiales volvió a demostrar su talante dictatorial y no lo hizo. La ACFF, que cuenta con 70 miembros de las diferentes categorías del balompié femenino, aceptaba la idea de la RFEF de finiquitar las competiciones pese a las enormes pérdidas que ello conlleva, siempre y cuando su primera división no tuviera dos grupos como pretendía el caprichoso seleccionador nacional o más de 18 equipos, los que finalmente serán.

Y así, a golpe como quien dice de 'decretazo' como su amigo y padrino Pedro Sánchez, Rubiales pasó de la ACFF, de la que 'casualmente' no forman parte sus aliados Real Madrid, FC Barcelona y Athletic de Bilbao, y decidió que esas mujeres que, según él, van "en paños menores" ya no jueguen más al fútbol esta temporada. De esta forma, el CD Tacón, el equipo que la próxima campaña ya lucirá el escudo del Madrid y no uno de quita y pon como hizo hasta el 9-1 contra el Barça, acaba 10º de 16 la Primera Iberdrola, a 36 puntos del campeón, precisamente el equipo catalán, y solo 6 por encima de las plazas de unos descensos que no habrá. Normal por tanto que en Valdebebas estén trabajando en reforzarse con fichajes que a buen seguro lo harán y varios de ellos que le saldrán gratis por la incompetencia de algunos.

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Sin embargo, si algo debe ocupar y preocupar en el Real Madrid es el lastre que arrastra el CD Tacón con denuncias que aún siguen vivitas y coleando. La cosa viene de lejos y no parece que vaya a terminar pronto, por más que urja finiquitarlas para concluir la ansiada y chapucera absorción. Tal y como informamos en julio del año pasado, el CD Tacón no solo fue denunciado por impagos, sino también por fraude. Sus jugadoras tenían por contrato que estaban dadas de alta en la Seguridad Social cuando no era así. Según confirmaron varias fuentes, el director general del Real Madrid, José Ángel Sánchez, fue alertado desde la entrañas del fútbol femenino español de los problemas que arrastraba el club que había absorbido, pero 'JAS' respondió con un rotundo "el Madrid sabe lo que hace".

Por si fuera poco, las 14 futbolistas que inicialmente denunciaron al CD Tacón fueron amenazadas por sus dirigentes, además de engañadas por quien en teoría debía defenderlas: María José López, la abogada de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), quien en esos momentos ayudaba a que Real Madrid y RFEF tuvieran el equipo femenino que tanto deseaban para hacer frente a la ACFF, con la que paradójicamente tan buena relación tiene AFE ahora. Es lo que tiene moverse por intereses personales y no colectivos como "los inútiles de Aganzo and company" que dijo un ex de este sindicato, ahora en LaLiga.

María José López, con razón cada vez más detestada por las futbolistas, llegó a un acuerdo con el CD Tacón en contra de la voluntad de una de las denunciantes, a quien engañó al utilizar un acuerdo previamente firmado y no tuvo ningún reparo en usar para neutralizar su denuncia. Es más, ella misma llegó a un acuerdo con los dirigentes del CD Tacón sin que ni siquiera todas sus futbolistas hubieran cobrado lo que se les adeudaba y mientras recibían "continuas amenazas" para que retiraran las denuncias. Algo parecido a lo que está haciendo ahora la citada abogada de AFE con la polémica Lista de compensación del Convenio Colectivo impugnado por UGT:

Aquella carta de la vergüenza

Unos días después de la noticia de El Confidencial sobre las denuncias al CD Tacón, otra futbolista de este equipo se personó para poner la suya. Sin embargo, lejos de tomar medidas, y una vez que la Asamblea del Real Madrid aprobó su absorción, el mismo club envió con fecha 10 de diciembre una carta a sus jugadoras y ex jugadoras para llegar a un acuerdo. Es decir, que los responsables del futuro equipo femenino del Real Madrid no solo confirmaron las denuncias a la Inspección de Trabajo, sino que intentaron reducir una multa que, según los primeros cálculos, podría superar los 200.000 euros.

Pero hay más. En el mismo escrito se añadía que "con el fin de fijar exactamente los periodos y cantidades por los que se producirá la cotización a la Seguridad Social, así como de informar de los mismos a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y a la Tesorería General de la Seguridad Social, el Club y el/la Trabajador/Trabajadora proceden a suscribir el presente documento, que se regirá según lo previsto en las siguientes cláusulas...". Un chanchullo en toda regla en el que, además, al ser cantidades en bruto y no en neto, serían las futbolistas quienes tendrían que pagarse la Seguridad Social.

El propio CD Tacón anunciaba que procedería "a dar de alta al/a la Trabajador/Trabajadora en la Seguridad Social por los períodos anteriores en los que no se hubiera producido dicha alta y cotizar a la Seguridad Social por los períodos y cantidades antes descritos en los términos que determine la Inspección de Trabajo y Seguridad Social", y aseguraba que "una vez realizadas las altas y cotizaciones a la Seguridad Social, el/la Trabajador/Trabajadora se considerará totalmente liquidado/a, saldado/a y finiquitado/a (...) renunciando expresamente a cuantas acciones le pudieran corresponder, ante cualquier tipo de orden administrativo o judicial"

Por último, y en una exaltación de desfachatez, una quinta cláusula indicaba que "ambas Partes mantendrán el presente documento en la más estricta confidencialidad". Lógicamente, bastaban dos dedos de frente y un mínimo de dignidad para saber que este acuerdo no podía firmarse, pues sería, no solo reconocer un fraude, sino formar parte de él. Bueno, más que no podía, no debía, pues parece que poder se pudo, aunque no en todos los casos... De ahí que alguna denuncia al CD Tacón siga coleando y pueda costarle caro al flamante Real Madrid. Y es que, ya lo dice el refrán: árbol que empieza torcido, jamás su tronco endereza...