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El hartazgo de Leo Messi y por qué dispara con bala contra sus detractores
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Carga contra la prensa argentina

El hartazgo de Leo Messi y por qué dispara con bala contra sus detractores

El capitán culé ya no se esconde y si algo le molesta, lo dice a través de sus redes sociales. El jugador salió este jueves por la noche a desmentir dos informaciones de un canal de televisión

Foto: Leo Messi, cabizbajo durante un partido con el Barça (EFE)
Leo Messi, cabizbajo durante un partido con el Barça (EFE)

Leo Messi, capitán del Barcelona, ha vuelto a utilizar las redes sociales para mostrar su disconformidad. Esta vez no para señalar a la junta directiva, envuelta en un auténtico cisma, ni a su controvertido secretario técnico, Eric Abidal, sino para cargar duramente contra la prensa argentina. Su cuenta de Instagram ya no recoge únicamente sus vivencias y sus 'spots' publicitarios, ahora también su enfado. A Messi no le sentaron bien una serie de informaciones publicadas por el canal TNT Sports y evidenció su malestar.

TNT aseguró que el de rosario tiene un acuerdo para recalar, junto a Thiago Alcántara, en el Inter el próximo curso. Además, desde el medio también especularon sobre si había sido el jugador el encargado de pagar la fianza de Ronaldinho para que este saliera de prisión. Ni corto ni perezoso, Messi catalogó las noticias de falsas. "Mentira número uno y mentira número dos", dijo en referencia a ambas. TNT Sports se valió de las recientes palabras de Massimo Moratti, presidente del conjunto italiano, para vislumbrarle un futuro lejos del Camp Nou: "No es un sueño prohibido que Messi venga al Inter (a cambio de Lautaro Martínez)". Al '10' la rumorología le causó indigestión.

Luego, los periodistas abrieron el melón de Ronaldinho y la posibilidad de que Leo se hubiera apiadado de él, poniendo sobre la mesa el importe de más de 1,5 millones de euros para que saliera de la cárcel de Paraguay. "¿La habrá pagado Messi? ¿Volverán a jugar juntos?", se preguntaban. "Mentira número dos", espetó el capitán culé, que añadió: "Lo que dijeron en este mismo medio sobre Newell’s (insinuaron su fichaje) hace una semanas también era falso. Menos mal que nadie les cree ya...". Messí está harto y cansado de estar constantemente en el ojo del huracán, más si todo lo que escucha y lee son tonterías sin fundamento alguno. Su carácter se ha vuelto arisco.

Un curso polémico

placeholder El doble desmentido de Messi en su cuenta de Instagram
El doble desmentido de Messi en su cuenta de Instagram

Y es que este último año Messi ya no se esconde, algo que siempre se le había reprochado durante su trayectoria deportiva en el Barça. Si algo le mosquea, da la cara. Hace poco sus palabras contra Eric Abidal levantaron ampollas en la entidad. El francés implicó al vestuario en el despido de Ernesto Valverde y el capitán no se mordió la lengua: "Que dé nombres o nos ensucia a todos. Los responsables de la planificación deportiva deben asumir responsabilidades". La semana pasada también utilizó sus redes para anunciar la rebaja salarial de los jugadores, disparando con bala a la junta por haber filtrado que los futbolistas no querian comprometerse con los recortes consecuencia de la crisis sanitaria abierta por el coronavirus. "No deja de sorprendernos que desde dentro del club hubiera quien tratara de ponernos bajo la lupa e intentara presionarnos para hacer algo que siempre tuvimos claro que haríamos", indicó el delantero.

Messi no está teniendo un curso placentero en Barcelona, la entidad tiene problemas en el césped y también en los despachos. La distancia entre jugadores y directivos es cada vez más evidente. Los supuestos encargos de la cúpula a la empresa I3 Ventures para intentar desprestigiarle le sentaron como una patada en el estómago y las últimas voces que le catalogan, también a sus compañeros, de persona poco comprometida con los intereses generales del club es la gota que ha colmado el vaso de su paciencia. Su cabreo anima a parte de la prensa a especular sobre su futuro, cosa que le inquieta. Messi quiere acabar su carrera en el Barça, pero también pide paz.

Leo Messi, capitán del Barcelona, ha vuelto a utilizar las redes sociales para mostrar su disconformidad. Esta vez no para señalar a la junta directiva, envuelta en un auténtico cisma, ni a su controvertido secretario técnico, Eric Abidal, sino para cargar duramente contra la prensa argentina. Su cuenta de Instagram ya no recoge únicamente sus vivencias y sus 'spots' publicitarios, ahora también su enfado. A Messi no le sentaron bien una serie de informaciones publicadas por el canal TNT Sports y evidenció su malestar.

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