El insólito caso de Lucas Silva, el futbolista invisible del Real Madrid

Entre los problemas que tiene que resolver el Real Madrid para concretar su plantilla, además de la incógnita del futuro de Keylor Navas, está Lucas Silva. El futbolista brasileño ha decidido que es mejor dejar de ser invisible y hace un llamamiento para que alguien se acuerde de él. Tiene contrato con el club blanco, pese a que no figure en la página oficial ni pueda utilizar las instalaciones de la Ciudad Deportiva de Valdebedas. De hecho, no entrena con el equipo. Pero está en la capital de España, con un preparador personal y en contacto con los responsables de la planificación del club blanco y diferentes intermediarios. Pendiente de que le den alguna novedad que aclare su futuro y desbloquee la situación.

El brasileño tiene un año más de contrato y recurre a un medio de comunicación de su país, 'Esporte Interactivo', para dejarse ver. Son los últimos días del mercado de fichajes, que cierra el 2 de septiembre, y los nervios aparecen en un futbolista con el que el Real Madrid no ha sacado ningún rendimiento. Un fracaso de fichaje que, por unas cosas u otras, no ha servido a ninguno de los entrenadores desde que se lo ofrecieron a Carlo Ancelotti en invierno de 2015. Tampoco lo quisieron Benítez, Zidane, Lopetegui…

No es frecuente ver a un jugador del Real Madrid utilizar un medio de comunicación para hacer una llamada. Lucas Silva está en dificultades y el tiempo apremia. No entrena ni tampoco se le considera un integrante más de la plantilla del Real Madrid, pese a tener contrato, por "temas burocráticos". Según informa el diario ‘As’ están motivados por la ausencia de un permiso de trabajo. En cualquier caso, el brasileño ha tomado la determinación de convertirse en su propio representante y mostrarse al mundo. Estaba oculto. No se le ha visto en toda la pretemporada ni su nombre ha salido en la planificación del club. Su caso se daba por resuelto. Se creía que podría seguir en el Cruzeiro, el último equipo en el que ha estado cedido. No ha ha sido así y el chico aparece a menos de una semana del cierre de mercado para venderse.

Costó 13 millones de euros

El Real Madrid pagó por Lucas Silva 13 millones de euros en el mercado de invierno para reforzar la posición del centro del campo en la temporada 2014-15. No fue una petición de Ancelotti, por entonces entrenador, sino más bien uno de esos movimientos en los que el club centra su búsqueda en las posibles perlas brasileñas. Como es el caso ahora de Vinícius y Rodrygo. Con Lucas Silva no ha salido nada bien desde el principio. Ancelotti no le quería y su balance en el Real Madrid se resume en nueve partidos disputados (428 minutos). Muy pobre. Empezaron las cesiones: Olympique de Marsella, Sporting de Portugal (donde tuvo unos problemas de corazón) y Cruzeiro. En este último equipo ha jugado con regularidad, ha conseguido ser protagonista en la consecución de títulos… pero no se lo han quedado. La postura del Real Madrid es hacer negocio y pide un traspaso.

"Me encuentro en un momento delicado", reconoce Lucas Silva en estos días de entrenamientos con la soledad de un preparador y el peaje que puede pagar por no tener ritmo competitivo. Busca equipo en Europa, pide ayuda al Real Madrid y, mientras, se pone en forma. Está en el limbo. En una situación desfavorable para encontrar un equipo y que el Real Madrid facilite su salida. Lo ha hecho en otros casos que lo han pedido (Marcos Llorente, Ceballos, Kovacic...), pero lo de Lucas Silva es muy diferente porque en Europa se le ha perdido la pista. Si no acaba saliendo, el club tendría un jugador durante esta temporada sin poder entrenar con el resto de compañeros y al que hay que seguir pagando el sueldo.