David Villa, cada vez más 'descolgado' de Diego Costa, se está jugando el Mundial

El partido de Pamplona dejó sabor amargo en el Atlético. No sólo por la derrota, sino también por las formas y por quedar patente que a día de hoy, Simeone tiene un once titular bastante claro, y en el que no están David Villa ni Diego Ribas.

Ambos son los fichajes más relevantes de esta temporada, los hombres encargados de renovar las ilusiones de un proyecto que no para de crecer desde hace dos años. Pero los dos estuvieron de inicio en la debacle ante Osasuna cuatro días después de haber sido meros espectadores del gran triunfo en Milán, donde se había logrado la mayor inyección de autoestima en la reciente racha de altibajos que atraviesan los rojiblancos.

El brasileño, recién llegado, no acaba de efectuar con soltura la labor de liderazgo para la que ha venido. El asturiano, sin embargo, se distancia día a día del rendimiento de sus competidores por un puesto en el ataque. Y las dudas sobre su estado de forma se acrecientan a tan solo tres meses de la lista definitiva para el Mundial de Brasil.

Antes de ésta, queda una convocatoria, la que Vicente del Bosque dará a conocer el próximo viernes. Allí se ve seguro un Diego Costa a quien ni los irregulares resultados de su equipo han conseguido rebajarle ni un ápice su presencia y protagonismo en la actualidad futbolística. En El Sadar peleó y buscó el gol como siempre, trabajando sin descanso y con calidad física y técnica. Cada vez más descolgado de esa seguridad en sí mismo que derrochan los jugadores que marcan tendencia se pudo ver a Villa. Un jugador que se encuentra en el punto de mira desde su lesión en diciembre de 2011. El aguante que va demostrando tener del alto ritmo que impone su entrenador es un termómetro que ahora mismo comienza a dejarle en evidencia.

Desde el primer momento, los técnicos rojiblancos se lo avisaron a él y a todo el que le preguntara al respecto. Villa debía correr como uno más, trabajar como uno más. El diseño de su temporada personalizada ha venido dictando que sería un hombre importante en Liga, desapareciendo casi siempre en las alineaciones de entre semana. Así ha sido hasta que Raúl García le ha comido el terreno como goleador y a día de hoy el navarro forma parte del nuevo‘once ideal’ del Atlético (formado íntegramente, por cierto, por futbolistas que ya estaban en la plantilla que el Cholo se encontró al llegar), en detrimento del máximo goleador de la historia de la selección española.

Del Bosque, que tiene un trimestre por delante cargado de decisiones importantes a tomar en todas las líneas, medirá para ello rendimientos y la calidad de los minutos que jueguen todos aquellos que están en la carrera para ir al Mundial. La cercanía en el día a día con Costa, uno de los que cuentan con billete fijo a día de hoy, sirve de contraste evidente para demostrar cómo Villa se aleja paulatinamente de los que mejor forma presentan.

Apunta a suplente en el derbi

El pichichi de España tiene un crédito ganado con la experiencia y goles acumulados (suma 56 goles en 95 internacionalidades), aunque es cierto que partidos como el del domingo, que le va a abocar al banquillo en el importante derbi de este fin de semana, alimentan el debate sobre si estamos ante una mala racha pasajera de juego o si de verdad estamos presenciando en directo cómo se le acaba la gasolina a uno de los mejores futbolistas españoles. Con 32 años no debería ser así de rotundo. Pero mirando sus estadísticas, encontramos que no marca un gol decisivo para España desde antes de su lesión en la tibia. A partir de entonces, ha marcado en tres amistosos más un ‘hat-trick’ oficial en el extraño 10-0 a Tahití en la pasada Confederaciones.

Quien le evalúa día a día, el Cholo Simeone, no atiende a otros valores que a la calidad del trabajo diario y al momento de forma. Con esos parámetros estrictos, a día de hoy Villa estaría lejos de ir a su tercer Mundial. De momento, el viernes sabremos si Del Bosque sigue confiando en el Guaje para portar el ‘7’ de la Roja ante Italia en el amistoso del día 5 en el Calderón, precisamente. Si Villa acaba estando en la lista definitiva de mayo, seguramente será porque ha logrado revertir la situación deportiva por la que ahora atraviesa en la caseta rojiblanca. Seguro que el delantero nunca imaginó que podría llegar a estar tan en duda su vitola de titular cuando firmó el verano pasado.