El letal RB19 de Red Bull: "entre arrancar la cabeza a los rivales" y torearlos

"Tienen una ventaja de velocidad en línea recta con el DRS abierto que es alucinante", admitía Toto Wolff al terminar el pasado Gran Premio de Australia. Como se dice en el argot de las carreras, Max Verstappen había "arrancado la cabeza" al Mercedes de Lewis Hamilton con su adelantamiento, al que sacó después casi dos segundos en otras tantas vueltas.

Igual que dos semanas antes, en Yeda. "Nunca había visto un monoplaza tan rápido. Creo que cuando éramos rápidos (en el dominio de Mercedes), no lo éramos tanto. Es el coche más rápido que he visto en comparación con el resto". Desde la decimoquinta posición, Verstappen cuajó con Sergio Pérez el segundo doblete para Red Bull. "No sé cómo ni por qué, pero pasó a mi lado a una velocidad tan seria, que ni me molesté en bloquear porque era una gran diferencia", explicó.

Curiosamente, este Red Bull recuerda al Mercedes W04 en 2014, quizás el año de mayor superioridad del equipo alemán. Ante semejante dominio, cabe dudar de que sea neutralizado por sus rivales durante 2023, tarea que se antoja harto complicada. Resulta interesanter ecordar lo que por entonces sucedió y contaban desde Mercedes y extrapolarlo al presente de Red Bull.

"Están avergonzados de mostrar su potencial"

Max Verstappen cedió las dos primeras posiciones sin la menor resistencia a George Russell y Lewis Hamilton en la salida de Albert Park, en las antípodas de ese piloto que se defendía a muerte desde que llegó a la Fórmula 1. El neerlandés esperaba a zamparse a sus rivales tan pronto el DRS estuviera activo. "Demostró gran paciencia", reconocería Horner más tarde. Y tanto. Le llevó un poco más de la cuenta por los incidentes de Leclerc y Albon. Las imágenes desde el coche de Hamilton sorprendían por el enorme diferencial de velocidad entre el Mercedes y el RB19.

“Están casi avergonzados de mostrar todo su potencial porque cuanto más rápido parezcan globalmente, más intentará el deporte retenerlos de alguna manera. Siendo realistas, probablemente tengan una ventaja de siete décimas sobre el resto” reconocía George Russell al terminar la última carrera. "No sé cuál es la diferencia, de ritmo en este momento, pero Max no tiene motivos para presionar y Red Bull tampoco. Seguro que se están guardando (el ritmo real)", añadía.

No solo sucedió en Albert Park, ya antes Red Bull había sacado la patita con el RB19. En Yeda, Verstappen y Pérez se enzarzaron en un intenso duelo de vueltas rápidas por la victoria. Antes, el mexicano había casi veinte segundos en 18 vueltas a Fernando Alonso tras recuperarle el liderato perdido en la salida. En su particular toma y daca, ambos rodaron a más de un segundo por vuelta de sus rivales. Aunque las diferencias son menores los sábados (una media de tres décimas), el monoplaza austríaco muestra el domingo toda su potencia de fuego, con una ventaja de entre siete décimas y un segundo. Y quién sabe si más.

Encuentre las diferencias

Al terminar, Christian Horner contestó a las alusiones de Russell, quien había utilizado un término muy característico del argot 'carrerista': sandbagging, o cuando un equipo torea a sus rivales ocultando todo su potencial. "Es algo muy generoso por su parte, él conoce muy bien ese tipo de ventajas por parte de su equipo". Ciertamente, el arranque de Red Bull se asemeja al de Mercedes en 2014. Como luego se sabría, el equipo alemán sí que se camuflaba con el W04, el primer monoplaza con unidad de potencia híbrida. Nadie pudo oponer resistencia aquella temporada.

El Gran Premio de Australia abría 2014. Hamilton sacó dos décimas a Ricciardo el sábado. El domingo ganaba el Mercedes de Rosberg con 24 segundos de ventaja sobre el australiano. En Malasia, Hamilton aventajó en un segundo al Red Bull de Vettel. Doblete de los Mercedes en carrera, y 24 segundos al tercero. China, tercera cita: seis décimas el sábado a Red Bull y doblete el domingo con 23 segundos sobre el Ferrari de Alonso.

En 2023, abriendo en Baréin, Verstappen saca tres décimas en los clasificatorios a Leclerc, mientras que el doblete del domingo se lograba con...38 segundos sobre Alonso. En Yeda, Pérez superaba en dos decimas a Leclerc el sábado. Ganó con 20 segundos sobre Alonso, tercero. En Albert Park fueron dos décimas en los clasificatorios, aunque llegaron pegados tras el último coche de seguridad. Pero tras adelantar a Hamilton, Verstappen alcanzó los ocho segundos de ventaja fumándose un puro. ¿Aires del pasado…?

Así se torea a los rivales, y al resto

"Nuestro sueño es que estaríamos delante, pero la ventaja se reveló de verdad en Baréin, cuando los dos pilotos se enzarzaron en una batalla entre ellos y exprimieron al coche. Allí verdaderamente nos dimos cuenta de la ventaja que teníamos", explicaría años más tarde el por entonces jefe de diseño de Mercedes, John Owen. El equipo alemán tenía una bomba con aquel W04 que estrenaba la unidad de potencia híbrida. Pero había algo más. "El chaval que había en mí decía, Woah, dejémosles correr, porque era emocionante. Pero el ingeniero en mí decía "Mierda, es lo último que necesitamos", contaba Andy Cowell, el máximo responsable de motores de Mercedes.

"Pasábamos más tiempo trabajando en el nivel de rendimiento que debíamos mostrar en los entrenamientos. Queríamos asegurarnos la primera fila, y no queríamos que la diferencia fuera tan grande sobre la segunda". El equipo alemán decidió ocultar no solo su ventaja, sino sus verdaderas razones. "Estábamos muy contentos de que el motor se llevara los titulares, porque no teníamos que pilotar el coche muy rápido, ya que el chasis lo ve todo el mundo y se puede copiar, mientras que con la unidad de potencia nadie sabía por qué era tan potente, solo podían especular", explicaba John Owen, “así que dejar que los otros pensaran en el motor fue algo que hicimos deliberadamente”.

Efectivamente, quizás Horner acierte al recordar el pasado de Mercedes a Russell. Pero resulta inevitable la misma percepción de que Red Bull oculta su potencial último. Mercedes ganó 16 de las 19 carreras de 2014 ¿Podrá algún equipo recortar las diferencias brutales con las que Red Bull ha arrancado en 2023, en plena era de restricciones presupuestarias? La respuesta, a priori negativa, sin embargo da para otra historia.