"Que bella la macchina rossa...". Carlos Sainz ya vive la magia de Ferrari, y en italiano

“Sorprendentemente he dormido bien, mis siete horas, y eso que he tenido que levantarme a las 6.30 para algunas reuniones muy tempranas antes de salir a pista”, explicaba Sainz al terminar su primera jornada, "pero inmediatamente he sentido que iba a ser una jornada especial, un día especial en mi carrera deportiva, con muchas emociones, y la verdad es que lo he podido disfrutar, aun con los nervios típicos de la mañana. Todo ha ido como planeaba, y eso seguro que lo recordaré siempre". Caía la noche en Fiorano, y Carlos Sainz reflexionaba al lado de la pista sobre un día que pocos pilotos pueden vivir.

A las 9.30, se abría el garaje, con Carlos Sainz instalado en su monoplaza, como el toro que se prepara para salir de toriles. Un minuto exacto más tarde, el español entraba al ruedo de Fiorano por primera vez con el Ferrari de 2018. 118 vueltas más tarde, Sainz devolvía a la fiera al box por última vez. Le espera otra segunda jornada el jueves.

En Fiorano los espectadores pueden seguir desde el exterior del vallado las evoluciones de los monoplazas rojos. Es tradición que siempre se arrimen los seguidores a poco que suene un motor, aunque en los últimos tiempos no se escuchen tanto las máquinas de la Fórmula 1. Algunos niños incluso animaban al piloto español, y una pancarta daba le daba la bienvenida. “¡Vamos Carlos ale ale!”.

Pero más destacada fue la presencia en el interior del garaje, que congregó a la plana mayor del Grupo Fiat y Ferrari. En las imágenes podía verse saludando al español a John Elkann, Presidente del Grupo Fiat y del recientemente creado Stellantis, quien quiso estar presente en el debut de su nuevo piloto. También seguía la sesión el responsable del equipo, Mattia Binotto. Y para no perderse tan singular momento en la carrera de un piloto, Carlos Sainz padre tampoco perdió el menor detalle en Fiorano. No todos los días un hijo rueda por primera vez como piloto oficial de Ferrari.

"¡Un día que nunca olvidaré!” reconocía Sainz junior. No era para menos. Incluso al final de la jornada lanzó un vídeo a las redes sociales, todo en italiano. "Hoy he tenido mi primera experiencia como piloto Ferrari, una jornada especial para mí, muy impreisonate, en Fiorano, una pista con tanta historia..." Y terminaba levantándo su teléfono móvil y señalando a su monoplaza. “Que bella, la machina rossa...".

"Uno de los momentos más especiales para mí hoy fue cuando llegué al circuito y vi el ¡Ferrari con mi número 55! Estaba ansioso por subirme al monoplaza, y esa primera vuelta de instalación fue emocionante. Luego nos pusimos manos a la obra, y estoy muy contento de cómo se desarrolló el día”. Sainz se encontró con su antiguo ingeniero en Toro Rosso, Marco Matassa, hoy director de la Ferrari Driver Academy, quien también tutela las pruebas llevadas a cabo durante esta semana con varios pilotos del programa, incluyendo a Mick Schumacher, que este año debutará en la Fórmula 1 a bordo de Haas.

El test tenía como objetivo la aclimatación de Sainz a su equipo y a los diferentes procedimientos, como las paradas en boxes, aunque sin cambio de neumáticos, y las salidas. “Las primeras impresiones al volante del Ferrari fueron positivas. Es el coche del 2018, mis impresiones son muy positivas. Seguro que el test me ayudará a echar una mano a adaptarme a la Scudería lo antes posible. No es el coche de 2021, hay que tenerlo en cuenta, con lo cual todas mis sensaciones cambiarán, seguro, pero por lo menos con este coche he podido probar el volante, algunas salidas, muchos procedimientos que tenemos que aprender los pilotos de Fórmula 1 con los 'settings'", explicaba Sainz,"también he podido hablar con mi ingeniero por la radio, y trabajar con mis mecánicos y los ingenieros".

Pudimos llevar a cabo por un programa extenso, y me pude familiarizar con todo: los ingenieros y mecánicos, el volante, y los procedimientos, que obviamente son un poco diferentes a los del coche que conduje la temporada pasada”. Sainz también mostró su satisfacción por poder compartir con Sainz senior el debut con Ferrari. "Que esté mi padre aquí hoy era importante para mí, es una persona con la que he crecido y he podido ir haciendo gracias a su ayuda y al apoyo que me ha dado desde que era pequeñito. Cuando ya firmamos el contrato, y sobre todo hace una semana cuando era la hora para sacar los vuelos para venir a Fiorano, entre los dos decidimos que tenía que venir aquí a verlo y a estar presente, así que gracias a John, a Mattía, a Laurent, que nos han dado el lujo depoder tener aquí a mi padre. Estoy muy feliz, no podría haber deseado un mejor comienzo ", remataba Sainz al final de la primera jornada, que será completada con la mañana del jueves. Charles Leclerc también estuvo presenta durante una parte de la sesión de su compañero de equipo que abandonó, según Ferrari, para preparar el asiento del nuevo SF21.

El madrileño no volverá a subirse a un monoplaza hasta mediados de marzo, ya en los test de pretemporada que tendrán lugar en el circuito de Bahrein este año. Será entonces cuando Sainz tome contacto con el SF71, al igual que Leclerc. Pero el monegasco cuenta con la experiencia de la pasada temporada, ya que el monoplaza italiano se basará en los mismos mimbres que el de 2020, aunque en Ferrari se muestran satisfechos con la evolución del nuevo motor, que ganará mayor potencia frente al del pasado año. Desde el punto de vista aerodinámico, el SF21 también sufrirá cambios importantes. En todo caso, para Sainz las primeras carreras de la temporada supondrán todo un desafío.