El pistoletazo de salida de Fernando Alonso y Briatore para volver a todo trapo a la F1

Por la mañana, Flavio Briatore aplicaba la pinza por un lado en el cotidiano italiano Gazetta dello Sport. “Fernando está motivado. Un año sin Fórmula 1 le ha sentado bien. Se ha desintoxicado, y le veo más sereno y listo para volver”. Por la tarde, el propio Fernando Alonso aplicó la presión final para dejar claros sus objetivos. “A corto plazo, en los dos, tres o cuatro años siguientes, siento que estoy a un nivel físico y de motivación muy, muy grande. Quería centrarme en una categoría máxima del automovilismo, quizás en la vuelta a la Fórmula 1, al Mundial de Resistencia otra vez, o ya sea en el IndyCar. Tengo una idea en la cabeza, pero creo que el próximo reto que haga será al máximo nivel porque estoy al 100% para ello”, anunciaba el español en una entrevista con los alumnos de la Escuela Universitaria Real Madrid. Quien quiera escuchar (en los despachos) que escuche.

Alonso se ha postulado rotundamente. Briatore añadía el coro, y con ambos ha sonado el pistoletazo de salida para la vuelta, en lo que parece un juego a varias bandas para decidir su futuro ¿Renault, Toyota, McLaren en el IndyCar (por ejemplo)? El italiano ha movido tradicionalmente los hilos del español en la Fórmula 1. Tanto de sus palabras como las de Alonso cabe deducir dos premisas: la ambiciosa vuelta a uno de los tres campeonatos más importantes a nivel internacional, por un lado. Por otro, que cualquiera de los aspirantes a llevarse al huerto al español tiene rivales en otras marcas y campeonatos. Aunque la Fórmula 1 parece la opción prioritaria.

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"El piloto está listo ¿Y vosotros?"

En la entrevista a Briatore, el periódico italiano introducía el nombre de Renault ante la contundente afirmación de que el piloto está listo para la Fórmula 1. Por la tarde, el propio interesado ampliaba el tiro al WEC o al IndyCar, un certamen este último aparentemente descartado por diferentes razones. Pero sin duda el fabricante francés está interesado en el retorno de Alonso. También le necesita. ¿Sucede otro tanto, pero la inversa? ¿Le interesa el actual equipo Renault al piloto español?

Para empezar, la 'opción Renault' ya se convierte en baza negociadora frente a otros candidatos que quieran llevarse el agua de Alonso a su molino. Pero analizando su situación, el Renault de 2021 no se antoja una opción atractiva a corto plazo. Hasta hoy, no ha cumplido los objetivos trazados para el equipo francés desde su retorno en 2016. En 2020 incluso fue superado por un equipo cliente como McLaren. Algunas fuentes apuntan a una notable desmoralización y falta de confianza de la plantilla en el liderazgo de Cyril Abiteboul y Alain Prost. Es indudable que el equipo francés necesita un revulsivo para corregir el rumbo. La marcha de Daniel Ricciardo en 2021 es un síntoma más que ilustrativo.

Algunas fuentes apuntan a que Alonso habría solicitado una serie de nombres técnicos de alto nivel para reforzar al equipo francés, al margen de sus condiciones económicas personales. Supondría una importante inversión económica adicional para Renault, además de un sólido compromiso de futuro en un momento de incertidumbre para la industria automovilística y el propio fabricante, con el nuevo CEO Luca di Meo auditando ya las decisiones de la compañía. ¿Ha planteado Alonso a Renault unas condiciones a su juicio indispensables para esos “dos, tres o cuatro años” al más alto nivel que ahora proclama? ¿Estaría Renault dispuesto o puede acceder a sus demandas? Volviendo a Briatore, parece que su mensaje al fabricante francés es más que evidente: "El piloto está listo. ¿Vosotros?"

Nada como hacerse querer

Sobre el papel, Fernando Alonso y Flavio Briatore están jugando sus cartas. Porque como el fabricante francés, también Toyota se beneficiaría enormemente por la presencia del español. La temporada pasada el fabricante japonés obtuvo un espectacular retorno mediático a pesar de ser el único equipo oficial en las 24 Horas de Le Mans, y el WEC. El Dakar confirmó ese valor. Sin embargo, la presente temporada en el WEC ha supuesto un gran contraste. Sin Alonso, el certamen perdía repercusión, perjudicado además por la interrupción sufrida ante el coronavirus. Con el nacimiento de los Hypercars, la presencia del asturiano con Toyota aportaría un lucrativo aliciente mediático y deportivo que, de lograrse, podría extenderse más allá de un año. En 2022 llegará Peugeot, quizás Porsche, y alguno de los fabricantes que ya compiten en el IMSA americano. Respecto al IndyCar, sorprende que el español abra ahora la puerta a una participación completa, cuando antes rechazara semejante opción. Sirva o no como otra baza negociadora más, con Fernando Alonso, quién sabe.

¿Tiene una decisión concretada sobre su destino en 2021? ¿O juega en estos momentos diferentes bazas negociadoras a varias bandas? Hace pocas fechas, Alonso anunciaba que ya había sabía su futuro. Briatore y el interesado nos han confirmado la primera parte: volver a tope y al máximo nivel. ¿Dónde? “Este 2020 quería tomármelo más tranquilo y hacer solamente las 500 Millas de indianápolis que están previstas para el 23 de agosto, descansar bien, cargar pilas y volver a algo importante en 2021. Esa era la idea que tenía y esa es la idea que intentaré seguir ejecutando”. De momento, nada en la vida como hacerse querer.