Cuando Carlos Sainz logra poner su Renault donde no le corresponde en Monza

"De las mejores clasificaciones del año, no me lo esperaba". Carlos Sainz firmó un brillante e inesperado séptimo puesto en la clasificación del Gran Premio de Italia de Fórmula 1. Un resultado muy por encima de las expectativas de Renault para este fin de semana. Por lo visto en Spa y en circuitos de similares características, el monoplaza francés no se iba a encontrar cómodo en este trazado. Pero este sábado, día de su cumpleaños, se regaló una pequeña proeza.

"Más de lo que hemos hecho hoy no se podía pedir, es uno de esos días en los que te vas a dormir sabiendo que has sacado todo lo que había del coche; por lo tanto te vas muy contento a la cama", comentaba tras la sesión. "Una de las mejores por la dificultad que conllevaba, estar en un circuito que no nos favorece, por venir de un fin de semana difícil de Spa, cambiar bastantes cosas de la configuración con una dirección muy diferente a la que fui en Spa.... Parece que me he reencontrado un poco mejor en el coche y eso, al final, cuando uno va cómodo, salen las vueltas rápidas".

Las expectativas de Q3 no eran muy optimistas en Renault después de unos entrenamientos libres con muchos problemas. El sábado, el equipo francés incluso tuvo que reemplazar el ala trasera debido a los problemas en el DRS de Hulkenberg en los Libres 3. Por esta razón, el madrileño confesaba no sentirse cómodo con el monoplaza. Pero con una gran vuelta en el Q1 que le dió el paso al siguiente bloque cogió confianza y siguió mejorando.

Hulkenberg se sacrificó por él

El cambio le permitió a Sainz encontrarse más cómodo con el coche. “Me he encontrado con un coche que me daba bastante confianza al principio de la clasificación, he hecho una vuelta muy buena en Q1 y a partir de ahí he cogido muy buen ritmo y poco a poco he ido bajando para un séptimo que antes de la clasificación y del fin de semana no me lo hubiese esperado”, reconoció.

La sanción de Nico Hulkenberg por el accidente con Fernando Alonso le vino de perlas a Sainz. Al alemán le cambiaron varios elementos de su unidad de potencia y tendrá que salir el último. Renault optó por sacrificarlo en la Q2, decisión que fue clave. Sin duda, el rebufo que le dio Hulkenberg ayudó a Sainz a pasar a la Q3. el equipo también estuvo despierto y eficaz para sacar al español en ambos intentos por detrás de los Ferrari y ganar así unos kilómetros adicionales en las rectas.

"Va a ser difícil en carrera"

A pesar del brillante resultado, Renault considera que su monoplaza aún es inferior a los de sus rivales más directos, Haas y Force India. "Vamos a necesitar que nos tiren, que tiren de nosotros un poco en las rectas porque, si no, va a ser complicado. Llevamos un ala que produce mucha carga aerodinámica, pero que también nos hace ir muy lentos en las rectas. Hoy hemos tenido que jugar un poco con rebufos y mañana, en carrera, si nos quedamos sin rebufos va a ser difícil".

Sainz quiere dejar buena imagen y ayudar al máximo a los de Enstone antes de marcharse a McLaren. Por ello, el objetivo en Monza es perder la menor cantidad de puntos posibles frente a sus rivales de la cuarta posición del campeonato, Haas y Force India a quienes sacan seis puntos en el Mundial de Constructores. Por ello, el resultado en clasificación puede ser clave en una carrera que va a ser muy complicada para la escudería francesa.