El marrón de Red Bull con Ricciardo: el que gana y a quien no 'miman'

"Este deporte te puede arrancar el corazón, a veces es brutal". Tenía razón el bueno de Daniel Ricciardo. Cómo puede cambiar tu estado de ánimo de una semana a otra, de la mayor decepción a la felicidad absoluta. Porque Ricciardo no solo fue el gran triunfador del fin de semana del Gran Premio de China de Fórmula 1. El australiano consiguió completar una carrera y una actuación memorable cuando su futuro está en juego. Nunca una victoria pudo ser más brillante ni más oportuna.

Su contrato con Red Bull termina esta temporada. Por el contrario, a Max Verstappen se apresuraron a renovarle a finales de 2017. Quedó clara la apuesta del equipo austriaco. Sin embargo, Ricciardo demostró en Shanghái la gran diferencia de madurez con el holandés, sin quitarle un ápice de su enorme talento. Mientras Verstappen arrojaba una victoria por la borda con juvenil precipitación frente a Hamilton primero y luego Vettel, Ricciardo se mostró como un consumado y preciso cirujano al despacharse con sus rivales. Cara y cruz en el seno de Red Bull.

TE PUEDE INTERESAR

McLaren: o le das un 'pepino' a Alonso o puedes acabar como Williams

Javier Rubio

Su futuro pasa por el título

A pesar de la gran victoria, el futuro de Ricciardo se negocia estos días. Su jefe, Christian Horner, apuesta por la continuidad del hombre de la eterna sonrisa. “Creo que Daniel es feliz en este entorno. Si podemos proporcionarle un coche como el de hoy, ¿por qué querría irse a cualquier otro sitio?”. Pero las dudas nacen de que Ricciardo ya ha reiterado en muchas ocasiones que elegirá el equipo que más opciones de ganar el título le proporcione, aunque le encantaría que esa escudería fuera Red Bull, que en estos momentos tiene pocas opciones al título, a pesar de la última victoria, si lo comparamos con Ferrari o Mercedes. Los austriacos solo pueden esperar una carrera loca o algún fallo de los de delante, y eso no va a pasar siempre.

La próxima temporada también puede ser una incógnita para Red Bull y su continuidad con Renault o el paso a Honda. El australiano quiere esperar todo lo posible para tomar su decisión, asegurarse al máximo estar en un equipo que gane carreras y luchar de tú a tú con los mejores. Porque Ricciardo es un piloto cotizado, y la victoria en Shanghái ha reafirmado su ya elevado prestigio en la Fórmula 1. Nada mal ha venido también para recordar que Red Bull no debería volcarse con Verstappen, como parece desprenderse del favoritismo que a veces deja traslucir Helmut Marko hacia un piloto que en parte también es obra suya en la Fórmula 1. Como en su día lo fue Vettel.

TE PUEDE INTERESAR

GP China de Fórmula 1: Verstappen, víctima de su propio estilo, está atrapado

Víctor García

Red Bull solo tiene ojos para Max

Entonces el alemán campaba a sus anchas, dejando a Mark Webber en el ostracismo. El alemán se permitía incluso desobedecer órdenes de equipo, como el famoso 'Multi 21' de Malasia 2013. Un favoritismo hacia Verstappen ahora podría generar dudas en Ricciardo para renovar con la escudería austriaca, mas allá del nivel del monoplaza. Nadie puede dudar del gran talento del holandés, pero la excesiva protección del piloto podría representar un factor a tener en cuenta por Ricciardo.

Su exhibición no habrá pasado desapercibida para su escudería, pero tampoco para Ferrari y Mercedes, donde Bottas o Raikkonen no tienen su puesto asegurado. Por ello, Horner no ha dudado en alabar al australiano: “Está al máximo nivel y así ha sido durante los dos últimos años en realidad. Tiene el equilibrio perfecto entre experiencia y velocidad, es uno de los mejores adelantando y su juicio es impecable a la hora de determinar la distancia, parar el coche y controlarlo. Realmente siento que está en una fase de su carrera distinta a la de Max”. Veremos si Red Bull equilibra la balanza, sabe lidiar entre sus pilotos y no desperdicia a dos de los mayores talentos de la parrilla de la F1.