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UFC Vegas 56 | Alexander Volkov noquea a Jairzinho Rozenstruik en el primer asalto
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PELEA DE PESOS PESADOS

UFC Vegas 56 | Alexander Volkov noquea a Jairzinho Rozenstruik en el primer asalto

El excampeón de peso pesado de Bellator y M-1 Global, Volkov, se enfrentaba al surinamés Rozenstruik en una cuestionada pelea principal en el evento UFC Vega 56.

Foto: Alexander Volkov contra Jairzinho Rozenstruik en UFC Vegas 56 (UFC Español).
Alexander Volkov contra Jairzinho Rozenstruik en UFC Vegas 56 (UFC Español).

Alexander Volkov es un luchador difícil de calibrar. El ruso ha parecido una amenaza real para el trono de los pesos pesados en más de una ocasión a lo largo de su carrera. Sin embargo, se ha quedado corto en peleas importantes, lo que le ha costado perder combates eliminatorios por el título y ser clasificado en los puestos más altos de la categoría. Esta noche ha vuelto a mirar a la parte más noble de la división tras noquear rotundamente a Jairzinho Rozenstruik en el primer asalto, después de venir de perder con claridad ante el prospecto inglés Tom Aspinall. Y es que si esperaba volver a la cima de la división, una victoria sobre Rozenstruik era absolutamente necesaria.

El excampeón de peso pesado de Bellator y M-1 Global, Volkov, se enfrentaba al surinamés Rozenstruik en la pelea principal de UFC Vega 56. Ambos luchadores venían de perder en sus últimas salidas, presentando los dos un récord mediocre de 2-2 en sus últimos cuatro combates. Por eso, hubo controversia al cuestionarse muchos que estelarizaran un evento ahora. A pesar de las críticas, el envite era importante para ambos, ya que el ganador se mantendría como aspirante al título de la división, mientras que el perdedor probablemente se vería relegado, al menos por el momento, a la condición de ‘gatekeeper’ - el luchador que hay que vencer para poder luchar luego con los mejores de la división-.

Volkov basa su juego en lanzar un alto volumen de golpeo para presionar a sus oponentes aunque no es un pegador potente para los estándares de los pesos pesados. En cambio, Rozenstruik, antiguo 'kickboxer', se preocupa por conseguir el KO y poco más, gracias al poder que atesora en las manos. Los dos peleadores comenzaron el pleito intercambiando en el centro del octágono aunque ejecutando pocas acciones. Volkov llevaba la iniciativa y conectaba mucho más con el juego de patadas que puso en liza. La pelea en principio se presuponía previamente que se iba a decidir o por un nocaut devastador de Rozenstruik o si se consumaba todo el tiempo del combate, por una decisión clara de Volkov. En un momento inicial del primer asalto el surinamés encontró un hueco en la distancia y aceleró las acciones, encontrando la réplica en Volkov. Al punto que se pusieron a intercambiar ferozmente, intuyéndose la rubricación de un KO de Rozenstruik en cualquier momento. Pero el ruso no sólo salió ileso, sino que se le vio muy reforzado en su confianza al saberse capaz de evadir el terrible peligro de la pegada del surinamés. Nada más terminarse el cruce de manos, fue a presionar a su rival. Como un tigre acecha a su presa, esperó cauteloso desde su mayor distancia el momento idóneo para atacar, apresándolo en la primera ofensiva con un tremendo directo de derecha que evidenció su daño al hacerle tambalear de forma aparatosa. Fue un golpe tan nocivo que solo le bastó finiquitarlo con repetidos crochés conectados a placer con ambas manos hasta que el árbitro detuvo el pleito en previsión de que sufriera un castigo excesivo.

La clave de su victoria ha sido permanecer en el exterior y utilizar su longitud para conectar con combinaciones precisas. A pesar del poder de Rozenstruik, Volkov se adueñó de la distancia con su golpeo más pulido y su envergadura. La ventaja de alcance le ha permitido mantener a distancia a Rozenstruik creando para ello ángulos incómodos de golpeo gracias a su altura. La experiencia en los últimos combates de Rozenstruik es estar largos periodos de tiempo totalmente neutralizado, ya sea por la lucha o por la defensa de su oponente, e intentar sólo ganar por un nocaut repentino con un contraataque perfecto. En los poco más de dos minutos que ha durado el combate sólo ha tenido una oportunidad para ponerlo en práctica. Y no aprovechó el envite.

El resto de finalizaciones de la velada

En la cartelera principal, Lucas Almeida finalizó a Michael Trizano con un croché de izquierdas que lo sentó en el piso, momento que aprovechó para desatar una lluvia de golpes en el suelo hasta que el árbitro paró la contienda.

Karine Silva sometió a Poliana Botelho con una estrangulación de arce en el primer asalto.

Ode' Osbourne noqueó a Zarrukh Adashev con una derecha de contra y un par de golpes finalizadores más en el suelo.

Alonzo Menifield terminó a Askar Mozharov en el primer asalto con codos ejecutados desde la posición de crucifijo hasta que el árbitro detuvo la pelea por clara indefensión del contrario.

En los preliminares, Karolina Kowalkiewicz finalizó a Felice Herrig con una mataleón en la segunda ronda.

Benoît Saint-Denis sometió a Niklas Stolze con una estrangulación por la espalda en el segundo asalto después de dominar todo el combate con su agarre en el piso.

Tony Gravely finalizó a Johnny Muñoz Jr. en el primer asalto con un golpe de encuentro con la derecha que lo postro en el suelo donde lo remató con algunos golpes más.

Y Erin Blanchfield sometió a JJ Aldrich con una estrangulación de guillotina ejecutada de pie.

Alexander Volkov es un luchador difícil de calibrar. El ruso ha parecido una amenaza real para el trono de los pesos pesados en más de una ocasión a lo largo de su carrera. Sin embargo, se ha quedado corto en peleas importantes, lo que le ha costado perder combates eliminatorios por el título y ser clasificado en los puestos más altos de la categoría. Esta noche ha vuelto a mirar a la parte más noble de la división tras noquear rotundamente a Jairzinho Rozenstruik en el primer asalto, después de venir de perder con claridad ante el prospecto inglés Tom Aspinall. Y es que si esperaba volver a la cima de la división, una victoria sobre Rozenstruik era absolutamente necesaria.

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