La SGAE celebra sus 125 años de vida: "Hoy es una entidad saneada y transparente"

España atravesaba a finales del siglo XIX una aguda crisis institucional. Alfonso XIII era menor de edad y su madre, la reina María Cristina, ejercía de regente. Cánovas del Castillo, presidente del Consejo de Ministros, había sido asesinado en 1897. Y en 1898 el país perdía sus últimas colonias. Pero, en medio de esa situación caótica, los teatros estaban llenos a reventar.

Escritores como Galdos, Arniches, los hermanos Álvarez Quintero, Benavente y autores de zarzuela como el maestro Chapí cosechaban triunfos colosales. Sin embargo, no existía una sociedad que defendiera los intereses comunes de compositores, dramaturgos y escritores. Los creadores estaban a merced de los empresarios teatrales, que atesoraban en sus manos un inmenso poder.

El comediógrafo Sinesio Delgado empezó entonces a pergeñar una idea: se le ocurrió la posibilidad de crear en España una Sociedad de Autores de España, a imagen y semejanza de la que ya existía en Francia, que supervisara que los creadores recibieran una remuneración justa por su trabajo. Se puso a trabajar en ese proyecto junto con Ruperto Chapí, un compositor tan reconocido que podía permitirse plantar cara a los empresarios teatrales. El 16 de junio de 1899 nacía la Sociedad de Autores de España con 11 socios. La primnera obra registrada en ella fue La espuma, una comedia de Sinesio Delgado estrenada en abril de 1899.

Hoy, 125 años después, la Sociedad General de Autores de España (SGAE) cuenta con 132.000 afiliados. “Pero nuestro objetivo sigue siendo el mismo: lograr que los creadores reciban una remuneración justa por su trabajo”, en palabras de Antonio Onetti, su presidente.

Para celebrar sus 125 años de vida, la SGAE llevará a cabo un amplio programa de actividades a lo largo de todo 2024. Arrancará con un concierto gratuito el día 15 de enero en el Palau de la Música de Barcelona en homenaje a esos once autores que en 1899 pusieron en marcha la Sociedad de Autores. Pero habrá otros muchos actos: desde un congreso internacional sobre Inteligencia Artificial que reunirá a algunos de los mayores expertos en la materia de todo el mundo hasta un festival de música urbana en Sevilla en el que participarán artistas muy relevantes. Y proyectos de calado social, como por ejemplo la puesta en marcha de escuelas creativas al estilo de La Barraca de García Lorca en siete barrios desfavorecidos de Barcelona, Bilbao, Madrid, Las Palmas, Santiago de Compostela, Sevilla y Valencia.

Entidad renovada

Pero, sobre todo, la SGAE llega a sus 125 años de existencia renovada, después de una etapa muy oscura que arrancó el 11 de julio de 2011, cuando la Guardia Civil entró en la sede de la SGAE y detuvo a su entonces presidente, Teddy Bautista, y a otros ocho directivos por una supuesta trama de corrupción. A partir de ahí, el ministerio de Cultura apercibió a la sociedad sobre la posibilidad de retirarle la licencia (lo que habría supuesto en la práctica su cierre) y la Confederación Internacional de Autores y Compositores (CISAC) la expulsó de manera temporal.

“En 2020 el ministerio de Cultura retiró el apercibimiento y en 2021 la CISAC nos readmitió, en ambos casos porque implementamos toda una serie de reformas que han transformado a la entidad y su funcionamiento”, afirma Antonio Onetti. “La SGAE hoy es una entidad saneada y transparente que está volviendo a sus mejores momentos de recaudación y reparto. En 2022 recuperamos el nivel de recaudación de 15 años atrás, con 350 millones de euros, y 2023 lo hemos cerrado con al menos 340 millones de recaudación”, sentenciaba Onetti, quien sin embargo aún tiene pendiente una demanda judicial. “Estoy deseando poder ir al juez y aclarar lo que sea menester. Tengo la conciencia muy limpia”.