Alicia Vikander, la nueva 'Tomb Raider': "lo que los jóvenes ven sexy ha cambiado mucho"

Cuando una Alicia Vikander de aproximadamente 13 años vio por primera vez 'Lara Croft: Tomb Raider' en su Goteburgo natal no podía imaginarse que tres lustros después estaría dando saltos por Sudáfrica, arco y flechas en mano, tomando el testigo de Angelina Jolie como encarnación de la 'heroína humana más exitosa de los videojuegos'. Las vueltas que da la vida. Entre medias, años y años de montajes musicales en la ópera de su ciudad, una decena de títulos de cine y televisión en la industria sueca, un salto grácil a superproducciones anglosajonas y un Oscar casi nada más poner un pie en Hollywood. Llegar y besar el santo, que dicen.

Que la cartelera española reciba casi a la vez 'Inmersión' de Wim Wenders, puro cine de autor europeo, y 'Tomb Raider', 'blockbuster' palomitero diseñado para reventar la caja registradora, y ambos con ella como protagonista, es la síntesis perfecta de una carrera heterogénea y con contrastes, la proporción correcta para mantener la etiqueta de 'actriz seria' sin morirse de hambre. Vikander podría ser la versión europea y refinada —no anda, se desliza— de Jennifer Lawrence. Por eso a priori sería difícil imaginársela trepando una pared montañosa en mitad de la jungla o partiéndole la boca al villano de turno con una patada voladora. Pero Vikander trepa, patea y rompe bocas como la estrella de acción en la que puede convertirse si a partir del 16 de marzo el público la acompaña.

A dos semanas del estreno, Vikander está sumergida en una campaña de promoción mundial con parada en Madrid. "Es un gusto trabajar con ella", celebran las responsables de comunicación de Warner. "Es súper puntual, muy profesional, no se toma un respiro, no pide descansos". Nada más entrar en una sala coqueta del Hotel Santo Mauro donde la esperan los periodistas, Vikander comenta lo mucho que le gustan los caramelitos de anís cortesía del alojamiento. Habla, a pesar de que el sueco es su lengua materna, con un acento 'british' encantadoramente estiloso. Y desde el principio se declara fan de Lara Croft, sobre todo de esta nueva versión de Lara Croft, más moderna, más urbana y mucho, mucho menos sexualizada.

"En su momento, cuando yo tenía nueve o diez años y vi el videojuego por primera vez, fue algo revolucionario. Es triste, pero es cierto. Yo no había visto ningún videojuego con una protagonista femenina. Y lo mismo con las películas de Angelina Jolie. Me acuerdo de verlas de pequeña y decir '¡Guau!'. Por fin veía a una mujer en un papel así en una película de acción", reconoce. "Pero creo que lo que la gente joven encuentra atractivo, inspirador e incluso sexy ha cambiado mucho desde entonces". "De hecho, me pasé por la sede de la compañía del videojuego en Silicon Valley hace cuatro días y fue muy interesante porque me explicaron toda la historia de Lara Croft y todas sus diferentes etapas. Pude ver las versiones más antiguas de los videojuegos y el 'reboot' de 2013 y aunque siempre ha mantenido la esencia que la ha convertido en un referente, también se ha ido transformando con el devenir de los tiempos".

Me alegra que este personaje transmita esa sensación de empoderamiento

"Por eso me alegra que este personaje transmita esa sensación de empoderamiento. Queríamos que Lara fuera una chica con la que los espectadores de 2018 puedan sentirse identificados", explica. "Ella es una chica de ahora. Vive al este de Londres, en Hackney [una especie de Móstoles londinense], y eta es una historia del tipo 'coming-of-age', de los orígenes del personaje. Y esto lo tuvimos muy en cuenta y lo discutimos mucho tanto el director como los productores como yo para dar ese nuevo enfoque". Lara Croft, el sueño erótico de muchos adolescentes del cambio de milenio ya no explota los pantalones ajustados sobre caderas rotundas, los pechos desproporcionados enfundados en neopreno brillante, la explosiva carnalidad de la saqueadora de tumbas —si nos ceñimos a la traducción del título de la saga— más combativa de Eidos Interactive.

"Me metí en esta película porque me sentía cómoda con el nuevo punto de vista que se daba del personaje", incide Vikander. "Me encanta que en este caso veamos a una chica normal que vive igual que muchos otros jóvenes de hoy en día. Incluso, el personaje siempre ha vivido en una mansión con todo el dinero del mundo, pero en este caso vemos a una chica joven que no acepta la herencia y prefiere vivir las vicisitudes de una vida real y eso le da unas raíces. Y, paso a paso, eso la ayuda a evolucionar".

No es la primera vez que Alicia Vikander participa en una película de acción. Lo hizo en 2016 en 'Jason Bourne', aunque en un papel secundario y bastante más burocrático. "En esa película los únicos músculos que ejercité fueron los de los dedos", se ríe mientras hace como que escribe en un teclado invisible. "Y, por supuesto, estuve en el rodaje y vi cómo se hacía una película así, pero estoy muy contenta de por fin poder participar en las secuencias de acción. Antes de 'Tomb Raider', nunca había rodado durante tantos días".

Porque el rodaje de este 'reboot' de 'Tomb Raider' ha durado más de cien días repartidos en ocho localizaciones distintas. "La verdad es que acepté hacer la película sobre todo porque me intrigaba mucho ver cómo era una película así por dentro. Ver cómo se hacen esas peleas perfectamente coreografiadas. Ver como las peleas más crudas y realistas están preparadas al detalle. Y la magia sucede cuando las haces parecer peleas de verdad"."Yo soy bastante chiquitita y ni siquiera podía levantar mi propio peso cuando empezamos", admite."Pero en la preparación tuve un entrenador, Magnus [Lygdback], y gané 5 kilos de músculo, que lamentablemente el músculo se pierde muy rápido. Tuve que comer mucho, que era algo que no sabía que tenía que hacer. Hice escalada, artes marciales mixtas, tiro con arco, natación, ciclismo… y me encantó. Además mi pasado como bailarina me ayudó muchísimo. La verdad es que muchas veces veía estas películas y me parecía que tenía que ser muy divertido. Y lo he disfrutado un montón".

He tenido que hacer escalada, artes marciales mixtas, tiro con arco, natación, ciclismo… y me ha encantado

Desde el lanzamiento del primer videojuego en 1996 hasta esta versión de la heroína a cargo del director noruego —todo queda entre escandinavos— Roar Uthaug se percibe todo lo que han cambiado los roles femeninos en estas dos últimas décadas. "Ahora hay más heroínas de acción. He visto 'Los juegos del hambre', 'Atómica', 'Wonder Woman' en los últimos años. Y en los últimos meses se han sacado a la luz algunos temas espinosos que había que tratar y que han servido para que estos cambios se estén produciendo incluso más rápido".

¿Y cómo se vive el #MeToo desde dentro de Hollywood? "Me parece tan interesante cómo se están produciendo estos cambios estructurales y sociales… es uno de los momentos más efervescentes que he vivido en los últimos tiempos. Creo que es genial ver tanta gente hambrienta de este tipo de historias que ponen el foco en gente que no solía ser el centro de las historias tradicionalmente. Obviamente me parece que debería haber más mujeres escribiendo guiones y dirigiendo películas. Es un hecho que vivimos todavía en un tiempo en el que todavía resulta llamativo y excepcional ver a una mujer hacer una película. Pero yo soy muy optimista en este sentido. Yo misma intento trabajar con mujeres guionistas y directoras; en esta película, por ejemplo, hay una guionista. Y quizás, algo que no se ha dicho mucho y que sí que podríamos achacar a esta película es que debería haber más mujeres en ella. Y yo soy la protagonista de esta película y es genial ver que ahora hay películas protagonizadas por mujeres, pero todavía siento que hay pocas mujeres en pantalla y que, lamentablemente, normalmente forman parte de un reparto eminentemente masculino".