El truco fácil y casero para limpiar tu microondas sin el más mínimo esfuerzo

Todo el mundo lo usa, y de hecho es muy útil si lo que te define precisamente es ser un desastre en la cocina. Desde que los microondas empezaron a llegar a los hogares, la rapidez a la hora de calentar cualquier plato está asegurada. En un par de minutos podrás devolver el calor y el gusto a platos que de ninguna manera podríamos comer fríos.

Ahora bien, es cierto que este electrodoméstico es uno de los puntos negros de suciedad en la cocina, sobre todo si le das bastante uso. La mayor parte de la suciedad que guarda en su interior no se ve a simple vista, pues solo queda la grasa y el vapor de agua de los alimentos pegados a sus paredes, lo cual generará posiblemente un desagradable hedor en el resto de la cocina a medida que pase el tiempo.

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El Confidencial

¿Cuál es el mejor método para limpiarlo? Como es obvio, tan solo te hace falta un trapo y algún tipo de jabón especializado, y aplicarlo como si fuera otro tipo de superficie de tu espacio de cocina, aunque el microondas al estar tan cerca de los alimentos y tan en contacto con ellos quizá necesite un poco más de esmero. Para que no pierdas el tiempo frotando sobre su techo y paredes, una usuaria de TikTok ha compartido un truco de lo más ingenioso y que convertirá la limpieza del microondas en pan comido.

En primer lugar, pon medio litro de agua en un recipiente y mézclalo con dos cucharadas de vinagre blanco (si es el que usas para limpiar otras superficies, mejor que mejor). Después, agrega al líquido una cucharada de bicarbonato. Remueve bien todos los ingredientes y mételo al microondas durante diez minutos. Aunque parece mucho tiempo, en realidad te permitirá dedicarte a la limpieza de otras partes del hogar mientras tanto y, como ya podrás imaginar, no tendrás que hacer apenas nada cuando suene la sirena de que ya ha terminado.

Un par de críticas

Luego, con mucho cuidado para no quemarnos, retiramos el recipiente del microondas y, seguidamente, pasamos un paño de microfibra sin agua ni nada por todas sus paredes. El plato giratorio también lo sacamos y lo enjuagamos con agua clara. Cuando ya esté seco, lo volvemos a poner en su sitio y listo. Sin duda, el método es sorprendente, pero no necesariamente muy rápido, ni mucho menos barato, como respondieron algunos usuarios. "La idea es buena, pero implica diez minutos de uso de la corriente eléctrica. Prefiero otro método", aseguró una. "Con un poco de zumo de limón en un vaso te da el mismo efecto y solo en menos de dos minutos", agregó otra.