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¿Por qué se dice que el intestino es el segundo cerebro?
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¿Por qué se dice que el intestino es el segundo cerebro?

Existe una conexión entre nuestros estados emocionales y nuestra digestión. Por eso, ante cuadros de estrés, nervios o ansiedad, es frecuente tener molestias y alteraciones intestinales

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Las funciones de nuestro aparato digestivo van más allá de digerir los alimentos y de optimizar sus nutrientes. En los últimos años, se ha abierto un campo de investigación que aborda la relación existente entre las emociones y nuestra digestión, y que estudia el modo en que podemos somatizar nuestros estados de ánimo a través del sistema digestivo.

Para entenderlo, hay que recordar, explica el doctor Juan Arenas, responsable del servicio de Aparato Digestivo de Policlínica Gipuzkoa, que en el intestino se ubica un ecosistema que actúa como principal barrera frente a numerosas infecciones y patógenos externos que pueden hacer peligrar nuestra salud. Es la microbiota intestinal, que “colabora en la activación del sistema inmunológico para proteger el organismo de infecciones, mantener controlada la respuesta inflamatoria, y producir sustancias que impactan de manera positiva en el cerebro —como la serotonina—, aportando estabilidad emocional”.

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Hay, pues, una conexión directa entre el cerebro y el aparato digestivo, lo que explicaría, apunta el doctor Fran Zozaya, de la Unidad del Aparato Digestivo y Endoscopia Digestiva de Policlínica Gipuzkoa, "que estados anímicos como la ansiedad, el nerviosismo o el estrés, así como los cambios de hábito en el sueño o en nuestras rutinas, puedan afectar a nivel digestivo, provocando síntomas como alteraciones en el ritmo intestinal (diarrea o estreñimiento), hinchazón o molestias abdominales".

El intestino es el único órgano del cuerpo que tiene la capacidad de funcionar de manera independiente y, a su vez, mantener una conexión directa con el cerebro, enviando información de manera bidireccional: “El aparato digestivo recoge información sobre el estado del organismo y luego la envía al cerebro para que la vincule con las emociones, como el estado de ánimo, el estrés o los nervios. De ahí que se le considere el segundo cerebro”, continúa el experto.

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Un ejemplo que nos puede acercar a este concepto, explica el especialista: “¿Quién no ha tenido peores episodios a la hora de ir al baño o diversos problemas intestinales en los días de más estrés o ansiedad, en los días en los que nuestro estado de ánimo está peor? Está comprobado que, ante la llegada de un evento muy importante para nosotros y que nos genera inquietud, pueden aparecer, o agravarse, determinados síntomas gastrointestinales”.

Además, el doctor Arenas subraya que cada vez se ven más en consulta problemas digestivos relacionados con el estrés: “Esto podría explicarse por la inervación del sistema digestivo: recibe muchas terminaciones nerviosas que están conectadas al cerebro y, por tanto, ante situaciones de estrés, el intestino también se pone alerta”.

El poder de la endoscopia

Por otra parte, llegado el momento de diagnosticar problemas digestivos, los especialistas señalan que se han ido dando grandes pasos en el terreno de las endoscopias con la incorporación de nuevas técnicas menos invasivas y seguras para los pacientes, y en gran parte gracias a la ayuda de la inteligencia artificial (IA).

“La endoscopia es la herramienta más fiable para detectar nuestro aparato digestivo —explica el doctor Arenas—. Con ellas, hoy en día no solo se pueden diagnosticar patologías digestivas, sino que también podemos extirpar pólipos o lesiones que no deberían estar ahí, tratar hemorragias, dilatar zonas estrechas enfermas, o bien tomar biopsias de órganos intraabdominales. Gracias a ellas podemos llegar a sitios que de otra forma no podríamos”.

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El especialista apunta que las endoscopias sirven para examinar por dentro el aparato digestivo, y cuando se habla de estas exploraciones en el tubo digestivo superior (esófago, estómago, duodeno) se hace referencia a las gastroscopias; mientras que si se estudia el tubo digestivo inferior, a estas endoscopias se las denomina colonoscopias, sobre las que resalta que la mayor novedad ha tenido lugar gracias a la IA, con la que hoy en día es más fácil detectar, por ejemplo, "pólipos que pueden indicar una situación previa al cáncer digestivo".

En última instancia, y a la hora de prevenir problemas digestivos, el experto de Policlínica Gipuzkoa mantiene que un estilo de vida saludable es primordial, no solo manteniendo una dieta sana y equilibrada, basada en la pauta mediterránea, sino también mediante la práctica regular de ejercicio o evitando el sobrepeso. “Todo esto hará que nuestro sistema digestivo y nuestra microbiota intestinal estén en orden y mejoren”.

*El Confidencial, en colaboración con Quirónsalud, presenta una serie de artículos con información práctica, consejos y recomendaciones para practicar deporte que mejore nuestra salud y bienestar. Si tienes alguna duda sobre esta temática o quieres más información, puedes contactar con la Policlínica Gipuzkoa​.

Las funciones de nuestro aparato digestivo van más allá de digerir los alimentos y de optimizar sus nutrientes. En los últimos años, se ha abierto un campo de investigación que aborda la relación existente entre las emociones y nuestra digestión, y que estudia el modo en que podemos somatizar nuestros estados de ánimo a través del sistema digestivo.

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