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Gana la lotería y solo piensa en cumplir el sueño de sus 7 nietos
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OBJETIVO: VIAJAR A DISNEY

Gana la lotería y solo piensa en cumplir el sueño de sus 7 nietos

Un abuelo se lleva un millón de dólares con un boleto de rasca y gana que había comprado para ver si la suerte le hacía el regalo de su vida

Foto: Fuente: iStock
Fuente: iStock

Cuando una persona participa en un juego de azar, ya sea puntualmente o de manera habitual, lo hace movido por algún objetivo. Hay quienes sueñan con hacerse millonarios para darse la gran vida y no volver a trabajar, los que solo piensan en coches y casas de lujo repartidas por el mundo o, entre otros, quienes quieren conocer todo el planeta viajando siempre que puedan.

Sin embargo, hay otras personas que juegan a la lotería movidos por objetivos menos ambiciosos. Hace algunos meses conocíamos la historia de Frankis Christurasa, un ciudadano canadiense que ganó 85.000 euros a la lotería y no se gastará ni un céntimo, ya que quiere invertir ese dinero en la educación de sus hijos en el futuro.

Foto: Ha sido hallada en su vivienda de Strabane (Foto: iStock)

O el de un sudafricano que ha querido permanecer en el anonimato que ganó el equivalente a 3,3 millones de euros. Su caso es especialmente significativo porque lo que realmente quería era ayudar a enterrar a su familia en un lugar digno, pero con tanto dinero en el bolsillo también ha decidido dar una buena cantidad a causas solidarias.

Cumplir un sueño

El caso de Juan McFaline es similar a los anteriores. Este hombre vive en el estado norteamericano de Massachusetts y participó en un juego del tipo rasca y gana llamado '5.000.000 100X Cashword'. Lo hacía movido por su amor por sus nietos, ya que tiene 7, y quería cumplir el sueño que siempre le habían contado los pequeños.

placeholder Juan McFaline, recibiendo su cheque (Lotería de Massachusetts)
Juan McFaline, recibiendo su cheque (Lotería de Massachusetts)

McFaline vive en Lowell, una ciudad de 110.000 habitantes, y compró su boleto como otro día cualquiera. Sin embargo, cuando rascó las distintas casillas, se dio cuenta de que había ganado 1 millón de dólares. Se puso más que nervioso, ya que por fin podría llevar a sus siete nietos al lugar del que tantas veces le habían hablado y él no había podido cumplir.

Ellos siempre habían contado a su abuelo que querían ir a conocer Disneylandia, pero la economía familiar no se lo podía permitir. Por eso Juan McFaline decidió jugar algún boleto a la lotería con la esperanza de que la suerte se le apareciera y pudiera cumplir ese bonito sueño de sus nietos. Ahora podrá hacerlo y, además, por todo lo alto.

Los nietos de Juan siempre le contaban las ganas que tenían de ir a Disneylandia

Tal y como publica Mass Live, el ganador ha elegido cobrar la suma en un solo plazo, por lo que, después de pagar impuestos, se ha llevado a casa 650.000 dólares, el equivalente a unos 550.000 euros. Una cantidad más que suficiente para darse un capricho y viajar a uno de los templos del entretenimiento para niños más visitados del mundo.

Todos ganan

La noticia ha pillado por sorpresa a Juan McFaline, que ha reconocido sentirse abrumado y feliz por poder cumplir el sueño de sus nietos. Pero no es el único que se ha llevado una sorpresa con su premio: la tienda donde compró el boleto de lotería también se llevará una comisión de 10.000 dólares, un 1% del total, por haber vendido ese billete.

Foto: El sorteo de Euromillones tiene premio 10 años después (iStock)

Aunque la probabilidad de ganar la lotería es realmente pequeña (por ejemplo, hay solo 1 posibilidad entre 14 millones de ganar el primer premio de la Primitiva), lo cierto es que cada día hay millones de personas que participan en miles de juegos distintos que se celebran en decenas de países de todo el mundo.

Aunque cada uno lo hace movido por sus propios deseos y necesidades, lo cierto es que todos comparten el mismo objetivo: convertirse en los acertantes de un sorteo y ganar un premio millonario. Si, después, utilizan ese dinero para dejar de trabajar, comer en restaurantes caros o comprarse coches deportivos y casas de lujo, ya es cosa de cada uno.

Cuando una persona participa en un juego de azar, ya sea puntualmente o de manera habitual, lo hace movido por algún objetivo. Hay quienes sueñan con hacerse millonarios para darse la gran vida y no volver a trabajar, los que solo piensan en coches y casas de lujo repartidas por el mundo o, entre otros, quienes quieren conocer todo el planeta viajando siempre que puedan.

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