Un boxeador camina más de dos kilómetros al día y adelgaza 40 kilos

Eddie Hall se coronó en el año 2017 como el hombre más fuerte del mundo. Sin embargo, ha experimentado en los últimos tiempos una transformación que le hace parece mucho más fornido. Con la esperanza de mejorar su calidad de vida, Hall ha decidido adelgazar y deshacerse de esos kilos de más.

Perder peso no es una tarea sencilla, ya que implica incluir cambios en nuestra alimentación. Aunque Eddie sí se ejercitaba habitualmente y hacía boxeo, ha decidido cambiar su dieta en la que se puede "comer de todo" por una más racionalizada.

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Ahora, el hombre cuida su nutrición meticulosamente y dedica sus horas a boxear. Aun así, estas no son las razones por las que Eddie Hall ha logrado adelgazar. Tal y como informa Men's Health, el deportista ha perdido 40 kilos gracias a una nueva 'adicción' que forma parte de su rutina.

Un nuevo Eddie Hall

Hall camina cada día y "el mayor cambio de mi vida ha sido añadir paseos e unos 2,5 kilómetros y levantarme todos los días por la mañana", según sus propias palabras. De hecho, el hombre combina varias actividades, ya que unas mañanas camina y otras aumenta la velocidad porque prefiere correr.

Esta rutina le ayuda a "despejar la mente, me prepara para el día y es una forma estupenda de hacer ejercicio, y creo sinceramente que por eso he perdido peso". Los paseos matutinos de Hall son una nueva muestra de que no es imprescindible acudir a un gimnasio para ejercitarse.

Cuidar de uno mismo

Recuerda que dar un paseo es una forma de cuidar de la salud y sacar tiempo para nosotros mismos. A diferencia de otras personas, Eddie prefiere no rodearse de dispositivos que monitoricen su rendimiento. Afirma que no necesita utilizar un reloj que mida los kilómetros que recorre, la velocidad o el número de pasos. En su lugar, el boxeador prefiere salir cada mañana y avanzar todo lo que sea posible. Algunas mañanas va más rápido, mientras que otras pasea con calma.

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"No uso ninguno de esos malditos Fitbits ni nada por el estilo", dice el propio Hall. Según él, estos dispositivos son "realmente estresantes". El hombre suele dejarse "llevar por la corriente". De este modo, "no me pongo ningún marcador, lo único que hago es moverme por estímulos".