Menor ratio, distancia y claridad: lo que se necesita para la 'vuelta al cole', según la OCU

La crisis del coronavirus parecía haber remitido pero esta segunda oleada ha llegado con fuerza y, en algunos sectores, sin mucha preparación. Tras dos semanas vertiginosas de contagios, Madrid vuelve a ser un importante foco de casos y esto podría poner en peligro (aún más) una etapa a la que apenas le faltan unas semanas para llegar y para la que todavía no existe ningún plan definido: la vuelta a los colegios. En Estados Unidos consideran que si hay más de 25 casos nuevos diarios por cada 100.000 habitantes es imposible abrir una escuela con seguridad, e incluso Fernando Simón ha advertido de que si es necesario, las aulas se cerrarán en septiembre.

En cualquiera de los casos existen graves problemas: por un lado, que no se reabran los colegios supone un duro golpe económico a las familias, que tendrán que gestionar sus recursos para compaginar el trabajo (o el teletrabajo) con el cuidado de los menores o su cuidado por parte de terceros, pero por otro, la apertura sin una garantía absoluta de que existan medidas de seguridad podría ser un grave problema sanitario —y también legal, desde el punto de vista de los padres que no quieran llevar a sus hijos a las escuelas por miedo al covid-19—. Ante esta situación, varios sindicatos ya han anunciado una huelga en Madrid en protesta por la falta de planes claros de actuación frente al coronavirus.

En este contexto, desde OCU-Consumidores en Acción han pedido a las autoridades que se centren en tres aspectos clave para garantizar el retorno a los colegios: por un lado, la limitación de la presencia en las aulas; por otro, la capacidad para mantener la distancia y todas las medidas de seguridad y, por último, que las autoridades educativas aclaren cuanto antes cuáles son los protocolos de seguridad previstos, para que los centros puedan tomar medidas antes del comienzo del curso.

Según una encuesta elaborada por la OCU sobre educación primaria, el 81% de los centros supera la ratio de 20 alumnos por clase, el aforo máximo recomendado por las autoridades sanitarias para reducir los contagios por coronavirus. "Lo prioritario es garantizar la seguridad, y una medida básica para prevenir el contagio es precisamente controlar el aforo: las autoridades sanitarias hablan de grupos de 15 a 20 alumnos por clase… pero una reciente encuesta de OCU a familias de alumnos de primaria revela que el aforo medio de las clases supera los 23 alumnos", señalan desde este organismo. Únicamente el 19% de los alumnos de primaria están en grupos de 20 o menos, el resto está en grupos de más de 20 y más de la mitad en grupos de más de 25 niños.

Asimismo, desde la OCU subrayan en las medidas básicas de higiene y prevención que se deben seguir dentro de las aulas, en base a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades, que son las siguientes:

• Uso de mascarillas por parte del personal y alumnos que, por edad y nivel educativo, puedan hacerlo
• Lavado frecuente de manos con agua y jabón y uso de desinfectantes
• Distancia mínima de un metro entre pupitres
• Ventilación de las aulas y de las zonas comunes
• Limpieza en las aulas y demás espacios dentro de las instalaciones, así como su regular desinfección
• Limpieza y desinfección constante de objetos a los que los alumnos tienen acceso: pomos, manillares, barras de las puertas, interruptores de la luz, grifos...
• Uso habitual de termómetros para controlar la temperatura

Claridad ante los protocolos de seguridad

Desde OCU, además, han insistido a las autoridades educativas que aclaren "cuanto antes" cuáles son los protocolos de seguridad previstos para los centros escolares, de modo que éstos puedan "tomar las medidas oportunas antes del comienzo del curso", para el que falta menos de un mes. OCU insiste en que deben saber con antelación "si es necesario hacer turnos, habilitar nuevos espacios, reforzar el equipo docente...". El Ayuntamiento de Barcelona, por ejemplo, ha elaborado una lista de locales que pueden servir como espacios en caso de que fuera necesario prevenir contagios: centros culturales, comunitarios y cívicos próximos a las escuelas de la provincia y que el consistorio ha anunciado que podrá a disposición de Educación si la Generalitat lo requiere.

Por otro lado, en caso de que la situación forzara a mantener las clases 'online', "es preciso tomar medidas para evitar problemas como los sucedidos durante el curso pasado", lamenta la OCU. En este sentido, recuerda que la finalización del curso 2019-2020 puso de manifiesto numreosas "deficiencias" que, para solventar, necesitan de un "esfuerzo" con el objetivo de "reforzar la formación tecnológica de profesores y alumnos", así como la garantía de que existen "medios materiales y apoyo necesario para que todos los niños y jóvenes tengan igualdad de oportunidades".