Gérmenes en los aviones, el peligro que sobrevive hasta una semana

Esta época del año es muy propicia para la proliferación de enfermedades. Cogemos frío o recibimos la inoportuna visita de algún virus o bacteria de otra persona y ya tenemos el indeseado resfriado o gripe.

Pronto llega el Puente de la Constitución y muchos de nosotros volaremos para disfrutar de unos días de descanso y son precisamente los aviones uno de los lugares más peligrosos para recibir el contagio de algún tipo de enfermedad. Una investigación ha demostrado que los gérmenes en los aviones pueden sobrevivir durante días, llegando incluso a alcanzar la semana.

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Un equipo de microbiólogos e ingenieros de la Universidad de Auburn en Alabama (Estados Unidos), citados por Today, descubrió que bacterias y virus pueden permanecer prolongadamente en apoyabrazos, persianas, mesas de bandejas, asas de inodoro y más elementos de un avión.

No solo gripe

El estudio mostró que el contacto con este tipo de objetos también conlleva un riesgo y puede conducir a una infección de Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (SARM) o a recibir la bacteria E. coli, que puede causar insuficiencia renal.

Según los datos del estudio, el SARM puede durar 168 horas (una semana) en el bolsillo de tela de un asiento (donde se depositan las instrucciones de emergencia de un avión) y el E. coli podía sobrevivir durante 96 horas (cuatro días) dentro del material del reposabrazos del avión.

Aunque desde las aerolíneas se sostiene que todas las superficies de sus aviones son desinfectadas por las noches y antes de cada vuelo, no están de más una serie de consejos para evitar una desagradable sorpresa vírica o bacteriana.

¿Qué puedes hacer?

Ten en cuenta las zonas más infectadas de gérmenes, como el reposacabezas y la mesa de la bandeja del respaldo son algunas de las partes más afectadas de un avión. Otros puntos "delicados" son el cinturón de seguridad, el botón de descarga del inodoro y la ventilación.

Lleva encima (y usa durante el viaje) un gel desinfectante de manos o toallitas antibacterianas. Si no, redobla tu higiene corporal, lavándote las manos con jabón regularmente, especialmente antes de comer. No te pongas las manos sin lavar en la boca ni te frotes los ojos con ellas.

Y un consejo final: respeta a los demás, no vueles si estás enfermo.