Mas sigue su hoja de ruta: exigirá a Rajoy el pacto fiscal en septiembre

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, sigue milimétricamente la hoja de ruta que desveló El Confidencial y anunció este jueves que quiere reunirse en setiembre con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para exigir el pacto fiscal, y le ha avisado de que no es un proyecto en exclusiva del ejecutivo catalán, sino un "clamor" de la sociedad catalana.

Según Mas, "habrá una petición clara por parte del Gobierno Catalán. En Madrid se tiene que entender que no es la petición de un gobierno, sino que es la petición de un país entero", ha sostenido en declaraciones a los periodistas tras expresar su pésame por la muerte del historiador y político Josep Maria Ainaud de Lasarte.

Mas ha advertido al Estado de que su ejecutivo pondrá "toda la carne en el asador" para reivindicar este proyecto, que ha recordado que tiene un amplio aval del Parlamento, aunque ha admitido que existe escepticismo entre la sociedad catalana sobre las posibilidades de éxito de esta demanda.

Como desveló este diario, Mas tiene un plan en caso de que Mariano Rajoy rechace negociar el pacto fiscal en septiembre. Esta estrategia incluye la convocatoria de un referéndum sobre el pacto, según explicaron fuentes políticas y económicas.

La Generalitat espera la negativa de Rajoy en rotundo a negociar un pacto fiscal para, tras la cita de septiembre, convocar una consulta a los ciudadnos, ya que la Generalitat no puede realizar referéndums sin el permiso del Gobierno central. ”Técnicamente, no es un referéndum. Lo que se haría sería una consulta sobre un tema que interesa a los ciudadanos y sobre el que se han posicionado a favor tanto una gran mayoría de ellos como las principales entidades catalanas, como patronales, sindicatos e instituciones económicas, culturales y cívicas”, aseguraba una fuente de la dirección de Convergència. Esa consulta podría ser convocada de forma inmediata, para octubre o noviembre.

Fuentes consultadas por este diario apuntan a que “para realizar el referéndum, es preciso cambiar la legislación”. En este sentido, CiU sí prevé llevar la nueva normativa al Parlamento después del verano y sacarla adelante muy probablemente con el apoyo de ERC (de hecho, fue una de las propuestas electorales estrella de los republicanos), ya que entre ambas sumarían mayoría absoluta. Con toda probabilidad, la normativa será recurrida para saber si tiene encaje constitucional, pero mientras tanto, trataría de eludir el permiso del Gobierno central, que es preceptivo en cualquier consulta “que tenga un impacto legislativo determinado”.

La intención del presidente catalán es que si el resultado el referéndum arrojase tal resultado, podría aprovechar la oportunidad para posteriormente convocar elecciones anticipadas a finales de este año o principios del 2012 para aumentar su mayoría en el Parlament y librarse de su dependencia del PP en la cámara catalana.