Abril acelera la renovación en Indra: fulmina al CEO de Brasil y al jefe de inversores

Fernando Abril Martorell sigue su operación de lavado de cara en Indra. A los cambios en el comité de dirección y de responsabilidades geográficas anunciados el 30 de abril, en las últimas semanas se han sumado varias destituciones. La más importante es la de José Antonio Fernández Ignacio, el consejero delegado de Brasil, el país más importante para el grupo después de España y fuente de los principales problemas de la compañía.

Según ha confirmado el propio directivo a El Confidencial, su salida se produjo el pasado mes de abril. Jafi, como era conocido en la organización, ha declinado hacer ningún comentario sobre su salida, que ha sido motivada según otras fuentes porque le han hecho responsable de las fuertes provisiones que Indra ha tenido que hacer en Brasil por la mala ejecución de varios contratos relevantes.

Desde Indra han matizado que Fernández Ignacio ya no era el consejero delegado del país latinoamericano desde enero, cuando fue destinado a Turquía, Asia Central y la zona del Cáucaso. Un cambio de destino que, según fuentes oficiales, fue adoptado por el anterior presidente, Javier Monzón, al que a finales del citado mes relevó Abril Martorell. No obstante, fuentes internas matizan que, en cualquier caso, su destitución ha sido decidida por el nuevo primer ejecutivo al responsabilizarle de los problemas en Brasil.

El pasado año, Indra perdió 92 millones de euros tras realizar provisiones por 313 millones. Parte de este deterioro vino provocada por la depreciación de la filial brasileña y por la cancelación de contratos, retrasos de proyectos y reprogramación de actividades. El negocio no ha ido mucho mejor en el primer trimestre de 2015, periodo en el que el grupo registró números rojos de 16 millones por la mala evolución en el exterior.

El pasado año, Indra perdió 92 M€ tras realizar provisiones por 313 M€. Parte de este deterioro vino provocado por la depreciación de la filial brasileña

Según señaló Javier de Andrés, el consejero delegado, tras la presentación de los resultados, la principal causa de estas minusvalías fue Brasil, donde se van a tomar medidas drásticas para mejorar la rentabilidad. Entre otras, un ajuste de empleo en el conjunto de año que afectará a cerca de aproximadamente unos 600 trabajadores, casi un 10% de la plantilla en el país.

Un ex de las Malvinas

Además de este recorte de costes local, para remontar las cifras en el país la compañía ha nombrado a un nuevo responsable para la región y ha puesto en marcha un nuevo equipo de gestión y una nueva estrategia centrada en la ejecución y negociación con proveedores y clientes. La persona elegida es Jorge Arduh, un exmilitar argentino que luchó en la Guerra de las Malvinas y cuyo último destino había sido la dirección general de Indra en México.

No es el único cambio que ha habido en los cuarteles generales de la compañía. Recientemente también ha abandonado el grupo Jorge Morán, el responsable de relaciones con inversores desde 2008. Abril Martorell ha confiado esta importante labor de comunicación con los accionistas y los inversores institucionales a Ezequiel Nieto, un ex de Telefónica, de la que salió hace ocho meses.

El objetivo es presentarse ante los analistas el próximo 8 de julio con la compañía limpia y preparada para una nueva fase de crecimiento tras una última etapa con Monzón, en la que los márgenes se habían deteriorado hasta mínimos históricos. Antes tendrá que dar explicaciones ante los accionistas en la junta general, donde deberá exponer los motivos de la suspensión del dividendo y el ajuste de empleo que afectará a entre 2.000 y 3.500 personas.