Indignación en el PP por el aumento del poder socialista en los órganos reguladores

Marejada en el PP por el control que siguen ejerciendo los hombres de Rubalcaba en los órganos reguladores nueve meses después de la llegada al poder de Mariano Rajoy. La gota que ha colmado el vaso es el nombramiento de Fernando Restoy como presidente del FROB y, sobre todo, que éste se haya rodeado en el órgano que va a pilotar la reforma financiera de un equipo de pasado socialista, como adelantó el sábado El Confidencial. Este mar de fondo se suma a los continuos enfrentamientos entre los ministros 'técnicos' y los 'políticos', esta vez a cuenta del sustituto -o mejor dicho, sustituta-, de Julio Segura al frente de la CNMV.

 

Restoy, subgobernador del Banco de España -cuyo cargo le otorga la presidencia del fondo de rescate bancario- forma parte de un grupo de expertos económicos que, según distintas fuentes, asesoran en la sombra del jefe de la oposición. Dentro de ese equipo se encuentran también Emilio Ontiveros,  fundador de Analistas Financieros Internacionales; Julio Rodriguez, conocido experto bancario de izquierdas; Pedro Saura, experto fiscal de de la Universidad de Murcia; Antonio Hurtado, un funcionario de toda la vida; y Javier Vallés, ex jefe de la Oficina Económica con Zapatero y marido de la rechazada para subgobernadora del Banco de España, Soledad Núñez.

Obviamente, esta circunstancia no sienta nada bien en las filas populares, puesto que el FROB tendrá unos enormes poderes en la reestructuración del sistema financiero, incluyendo la decisión de nacionalizar o liquidar entidades, o la de destituir a su consejo de administración aunque sólo atraviesen dificultades temporales. Pero lo que ha hecho llevarse las manos a la cabeza a más de uno son los fichajes de  Alfonso Cárcamo, hasta ahora secretario del consejo de la CNMV nombrado a propuesta de los socialistas, y a Montserrat Martínez, antigua jefa de gabinete de Carlos Arenillas, el polémico ex vicepresidente del supervisor bursátil que se dejaba invitar a cenas con vinos a razón de 600 euros la botella.

La toma de control del FROB por la órbita de Rubalcaba se suma al poder del que todavía disfrutan los socialistas en otros supervisores. Así, en la CNMV -donde Restoy también ocupa un asiento- seguirán siendo mayoría los consejeros nombrados por el PSOE a pesar de la sustitución de Segura. Esta situación se prolongará hasta mediados de 2014, cuando salga del regulador bursátil Luis Pedroche. 

La misma situación se da en los reguladores no financieros (Comisiones de Energía, Telecomunicaciones, Competencia, etc.). La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría pretendió solucionar este problema de un plumazo con la creación del supervisor único, llamado Comisión Nacional de Mercados y Competencia, que agruparía a todos ellos. Pero Bruselas ha frenado la iniciativa porque teme que sea una maniobra para incrementar el control político sobre estos órganos y para reducir así su independencia. Lo cual prolonga el dominio del PSOE.

El caso más evidente es el de la Comisión Nacional de Competencia, que sigue regida por Joaquín García, hombre muy cercano a Rubalcaba. Esto explica las duras condiciones impuestas por este organismo a la fusión de Antena 3 y La Sexta -hay que recordar la afinidad del jefe de la oposición con el Grupo Prisa-, que tuvieron que ser suavizadas por el Consejo de Ministros para que la operación pudiera salir adelante.

La pugna por la CNMV

Con esta contestación al Gobierno desde su propio partido, asistimos estos días a la enésima pugna entre el sector 'técnico' del Ejecutivo (encabezado por Luis de Guindos y José Manuel Soria) y el 'político' (liderado por Cristóbal Montoro). Esta vez a cuenta de la presidencia de la CNMV, que el aparato 'popular' desea que caiga en manos de Elvira Rodríguez, ex ministra de Medio Ambiente con José María Aznar pero que con Rajoy le ha tocado sólo la presidencia de la Comisión de Economía del Congreso. Por el contrario, De Guindos apuesta por Belén Romana, la prestigiosa ex directora general del Tesoro que sonó con fuerza para presidir el nuevo Mecanismo Europeo de Estabilidad.

Otros candidatos que suenan para relevar a Segura al frente del supervisor bursátil, pero con menos posibilidades, son Antonio Sáenz de Vicuña -pero el Ejecutivo prefiere que siga en Francfort al frente de los servicios jurídicos del BCE- y José María Roldán, director general de regulación en el Banco de España.

Esta pugna se suma a otras recientes a cuenta de la 'tasa Tobin', el impuesto a las eléctricas o quién venderá los activos del 'banco malo', como ayer informaba El Confidencial. En el primer caso, Montoro -valedor del nuevo impuesto- lo sacará adelante, pero tendrá que pactarlo con Bruselas como exigía De Guindos. En el caso eléctrico la victoria del titular de Hacienda es más clara al imponer un impuesto igual para todos y no uno específico a las renovables. En el tercer caso, Montoro tiene enfrente a todo el sector financiero e inmobiliario, que considera mucho mejor que vendan los ladrillos de la banca profesionales y no funcionarios.