Ramos personifica el último pulso entre los servicios médicos del Madrid y la plantilla

“La alianza entre Sanitas y el Real Madrid permite al club disponer de un acceso directo a los mejores especialistas médicos y los equipos tecnológicos más avanzados, lo que ha ayudado a dar un salto cualitativo en la atención médica a los deportistas del Real Madrid”. Esta es la premisa que no siempre es utilizada por los protagonistas en el conjunto blanco. Desde que en 2008 Ramón Calderón hiciese oficial su alianza con la compañía de asistencia sanitaria, diferentes episodios han puesto en duda la idoneidad de externalizar unos servicios médicos. El último, el actual pulso entre el doctor Jesús Olmo y la plantilla madridista.

“Es un acuerdo muy importante para el Real Madrid porque la salud de nuestros jugadores es una prioridad. Nos unimos con un líder en la gestión de los recursos médicos y hospitalarios para formalizar un acuerdo buscando que la salud de los jugadores sea la mejor posible”, aseguró Calderón en julio de 2008, cuando fue presentado el acuerdo –con fecha de caducidad para 2015-. Por aquel entonces, Alfonso del Corral supuestamente debía ser una de las bases en las que se debía consolidar un proyecto que aportaba un millón de euros anuales a las arcas del equipo merengue, pero se quedó poco más o menos como un personal decorativo.

A los trabajadores del club, entonces, se les dio una bata con el ‘parche’ de Sanitas dejando de pertenecer al Real Madrid para pasar a manos de la mencionada empresa. A los ‘curritos’ no les hizo gracia la historia, pero la rentabilidad económica en todas las áreas comenzó a ser una realidad importante para el equipo blanco. Y llegaron importantes lesiones como las de la rodilla derecha de Van Nistelrooy (operación), el tobillo derecho de Cristiano Ronaldo, el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha de Pepe (operación)… todas tratadas fuera de Sanitas ejerciendo su derecho médico de elegir dónde querían operarse y tratarse. Uno de los primeros casos también fue el de Arjen Robben, quien acudió a Eslovaquia para ponerse en manos del nutricionista Tschen La Ling, que calificó a los nuevos médicos del Real Madrid de “curanderos” e “incompetentes”.

“El sobresaliente estado físico” de Kaká

Luego vino el incomprensible caso de Kaká, quien antes de la presentación fue “sometido a un completo examen médico, físico y radiológico, además de un estudio específico biomecánico, en el Hospital Sanitas La Moraleja, que no dejaron de ensalzar el sobresaliente estado físico del astro brasileño”, señalaba el parte médico y, poco después, el brasileño admitió que arrastraba “una pubalgia desde hace ocho meses, jugaba partidos, me resentía, volvía a mejorar…”. ¿? Las piezas del puzle no encajaban.

En torno a 2009 la situación extrañaba porque anteriormente, salvo en contadas excepciones –como la de Woodgate-, las soluciones a una dolencia por parte de un futbolista se había tratado por los propios especialistas del Real Madrid. Ahora se ve prácticamente como una época romántica tras los casos mencionados y los que vendrían posteriormente con Higuaín, Essien (se fue a ver a los médicos del Chelsea), Marcelo, Varane, Di María, Khedira… Ahora es Sergio Ramos quien mejor personifica la desconfianza existente en los servicios médicos externos que lidera Jesús Olmo (impuesto por el club, no por Sanitas), ya que el de Camas está preparando su recuperación con Pedro Chueca, exfisioterapeuta del Madrid durante dos décadas. El sevillano, en este caso, ha forzado en este inicio de año más de lo que había aconsejado el doctor Olmo… Hubo una reunión entre plantilla y José Ángel Sánchez para solventar las diferencias entre plantilla y conjunto médico, aún sin solución.

¿Hasta qué punto la externalización de los servicios médicos tiene que ver con esta búsqueda de doctores ‘forasteros’ por parte de los futbolistas? ¿Por qué ese cambio de tendencia justo desde 2008? En un mundo global y con las posibilidades actuales para viajar y contactar con el mejor especialista del mundo, ¿hasta dónde debería llegar el servicio médico de un club? ¿Es sólo cuestión de confianza?

Hace un año, Cristiano Ronaldo lanzó un dardo envenenado que, sin ser explicado hacia quién iba, salpicaba a los servicios médicos del Madrid. “Algunas personas no querían que jugara pero yo tenía confianza. He jugado y he demostrado que estoy bien. Yo decido. Siempre tengo la última palabra. No soy tonto y conozco mi cuerpo. No voy a arriesgar en un partido”. En este caso, el problema, no es de autoridad, sino de la “confianza que un médico debe ejercer sobre el paciente para que éste le haga caso. Si el paciente no encuentra dicha confianza en su entorno, se irá a buscarla a otro sitio. Porque un tobillo o una rodilla son los mismos aquí que en Asia, América o Europa. Y, en España, hay centenares de operaciones diarias de este tipo. Más que en otros países con menos tradición futbolística”, aclara un antiguo empleado médico del club.

Actualmente, la enfermería del Madrid es un punto importante para Carlo Ancelotti sabiendo que en ella están los titulares Modric, Ramos y James, además de Coentrao (Pepe que acaba de salir).