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El IVA pone al cine en alerta roja
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EN ENERO Y FEBRERO ACUDIERON UN 11% MENOS DE ESPECTADORES AL CINE QUE EL AÑO PASADO

El IVA pone al cine en alerta roja

La inquietante cuenta atrás del cine en España. 146,8 millones de espectadores (2001), 140,71 (2002), 137, 47 (2003), 143,93 (2004), 127,65 (2005), 121,65 (2006), 116,93 (2007),

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El IVA pone al cine en alerta roja

La inquietante cuenta atrás del cine en España. 146,8 millones de espectadores (2001), 140,71 (2002), 137, 47 (2003), 143,93 (2004), 127,65 (2005), 121,65 (2006), 116,93 (2007), 107,81 (2008), 109,99 (2009), 101,60 (2010), 98,34 (2011) y 90 (2012). Una caída libre acelerada por múltiples causas: la irrupción de internet, el P2P, las descargas, el cine en casa, los cambios de hábitos de los espectadores y la crisis económica. Y en 2013: éramos pocos y parió la abuela. La abuela sería el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y su criatura la subida del IVA cultural del 8% al 21%. La medida se aplica desde septiembre, pero los taquillazos de Lo imposible Tadeo Jones han retrasado sus efectos. Sin embargo, ya hay datos de taquilla de enero y febrero y muestran el peor panorama: un 11% menos de recaudación que el año pasado.  

En 2012, las entradas de cine en España subieron de 6,4 euros a 6,7, un alza considerable, aunque menor que la producida en 2009 con la irrupción del 3DEs ahora cuando empieza a notarse el ivazo en forma de subida de entradas y descenso de espectadores. Ir al cine en Madrid vale hoy 8,8 euros de lunes a viernes (sin contar el día del espectador) y más de 9 el fin de semana, según ha calculado este diario tras repasar los precios de la mitad de los cines de la capital. Dichas entradas valían 8,20 euros (entre semana) y 8,42 (sábados y festivos)  el pasado septiembre, según datos de la asociación de consumidores FACUA.

Los precios asustan a unos espectadores que, desde que estalló la recesión, se permiten menos alegrías. La recaudación del cine en España en los dos primeros meses del año es la historia de un pinchazo que ni los Oscar han podido evitar.

Un comienzo devastador

El arranque de 2013 está siendo “devastador”, en palabras de Josetxo Moreno, responsable de la distribuidora y exhibidora Golem, referencia del cine en versión original. “La subida del IVA ha sido la gota que ha colmado el vaso. Espectadores que antes iban a ver tres películas nos cuentan que ahora eligen sólo una”, explica a El Confidencial.

Muchas nominadas han hecho taquillazos en otros países, pero no aquíLas voces que alertaron el año pasado que el IVA ponía en peligro la diversidad cultural, no parecen desencaminadas. Si cierran más salas, los taquillazos de Hollywood pueden acabar acaparando los estrenos. En un mercado en recesión, el pez grande puede comerse al chico.

No obstante, Moreno, dueño de los cines Golem y distribuidor de la última cinta de Michael Haneke (Amor), cree que 2013 está siendo “malo para todos”, incluidos los blockbusters. “Diciembre, que tradicionalmente es un buen mes, ya salió cruzado. Pero lo de enero y febrero ha sido tremendo. Se ha difuminado hasta el efecto de los Oscar. Muchas nominadas han hecho taquillazos en otros países, pero no aquí”.

Su conclusión es que la subida del 21% de IVA y sus consecuencias (entradas más caras y descenso de espectadores), afecta tanto al cine pequeño como al grande. “Las familias que antes iban varias veces al cine en navidades, ahora han ido sólo una”, zanja.   

Carta al presidente del Gobierno

Hollywood, en efecto, no está precisamente contento con el ivazo de Montoro. El pasado diciembre, doce empresas punteras del audiovisual mundial, incluida la todopoderosa patronal de las grandes compañías de Hollywood (MPAA), enviaron una carta a Mariano Rajoy en la que cargaban contra el aumento del IVA y lo tachaban de contraproducente.

La industria se pregunta cuál es la lógica de una medida recaudatoria que puede menguar las arcas del EstadoLa misiva recordaba los casos de Portugal y Letonia que, tras subir su IVA cinematográfico del 6% al 13% y del 8% al 21%, respectivamente, vieron como sus mercados se contraían un 20%. “En ambos casos, los ingresos fiscales que obtuvo el Estado de la exhibición cinematográfica disminuyeron más de lo que creció tras la subida del IVA en las entradas de cine”, explicaba la carta firmada por la MPAA.

La industria española se pregunta, por tanto, cuál es la lógica de una medida recaudatoria que puede acabar menguando las arcas del Estado. Quizás se trate de un castigo político de Montoro al cine español, interpretan algunos. Las elucubraciones están ahí, los datos también: nuestros cines tienen a día de hoy el IVA más alto de los 17 países de la eurozona, donde la media es del 10,1%. En Francia y Alemania el IVA del cine es el 7%. Otra galaxia.

Algunos no han aplicado la subida

No obstante, no todos los cines han cargado el 21% sobre las entradas. Como explican desde la Federación de Cine de España (FECE), las salas han optado por tres estrategias diferentes: subir un 21%, subir menos y no variar los precios. Golem, por ejemplo, ha tratado de fidelizar a su audiencia con un carnet con el que cada película sale por 5,20 euros. La cadena Renoir, propiedad de Enrique González Macho, presidente de la Academia, también ha tratado de no subir los precios.

La lógica parecer ser la siguiente: si suben los precios, bajan los espectadores, y sin espectadores, no hay negocio posibleLa lógica parecer ser la siguiente: si suben los precios, bajan los espectadores, y sin espectadores, no hay negocio posible. Macho lo dejó claro en su discurso de los Goya: “Los resultados están siendo todavía más negativos que lo que se previó. El consumo cultural ha tenido un fortísimo descenso y, por tanto, una menor recaudación, acompañado de fuertes costes sociales: cierre de empresas y aumento del paro”.

González Macho sabe de lo que habla: la cadena Renoir ha tenido que cerrar salas en Madrid, Barcelona, Zaragoza, Cuenca, Palma de Mallorca y Bilbao en los últimos meses.

El cierre masivo de salas a causa del IVA era una de las conclusiones de un estudio de Pricewaterhouse encargado el año pasado por exhibidores y distribuidores. El informe aseguraba que los cines españoles recaudarían diez millones de euros menos anuales a causa del impuesto. Pricewaterhouse también concluía que el alza del IVA provocaría el cierre de 859 salas y el despido de 3.500 empleados. En unos meses sabremos si estas cifras eran o no realistas.   

La inquietante cuenta atrás del cine en España. 146,8 millones de espectadores (2001), 140,71 (2002), 137, 47 (2003), 143,93 (2004), 127,65 (2005), 121,65 (2006), 116,93 (2007), 107,81 (2008), 109,99 (2009), 101,60 (2010), 98,34 (2011) y 90 (2012). Una caída libre acelerada por múltiples causas: la irrupción de internet, el P2P, las descargas, el cine en casa, los cambios de hábitos de los espectadores y la crisis económica. Y en 2013: éramos pocos y parió la abuela. La abuela sería el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y su criatura la subida del IVA cultural del 8% al 21%. La medida se aplica desde septiembre, pero los taquillazos de Lo imposible Tadeo Jones han retrasado sus efectos. Sin embargo, ya hay datos de taquilla de enero y febrero y muestran el peor panorama: un 11% menos de recaudación que el año pasado.