El cementerio de las cámaras olvidadas de Telemadrid: un botín de más de un millón

Apiladas una tras otra en un almacén de Telemadrid, acumulando polvo, duermen todos los equipos de grabación que en su día fueron utilizados por la televisión pública madrileña para tomar el pulso de la calle en sus informativos. En total, 34 cámaras ENG y otros dos equipos en HD que llevan tres años y medio sin uso de ningún tipo y olvidados en su particular cementerio. Una imagen que resume la depauperada situación de Telemadrid desde que, en 2013, despidió a 861 trabajadores en un ERE declarado después como no ajustado a derecho, y subcontrató toda la emisión de la señal a la filial de Telefónica Broadcast Services, que aporta sus propias cámaras y una unidad móvil propia para desarrollar todo el servicio.

La suerte de las cámaras es la misma que atraviesan los cuatro platós que existen en las instalaciones de la cadena, en la Ciudad de la Imagen de Pozuelo de Alarcón. Solo uno se mantiene en funcionamiento para la realización de los 'Telenoticias' mientras que otros tres espacios permanecen cerrados y vacíos. Uno de ellos, de 400 metros cuadrados y en HD, no se utiliza desde las elecciones locales y autonómicas del año pasado, cuando fue habilitado para acoger el debate entre los diferentes candidatos a la alcaldía de Madrid y a la Comunidad. Otro de ellos, de 800 metros cuadrados, y a falta de producción interna que llevar a cabo dentro de la casa, ha servido también como estudio para que el director de cineÁlex de la Iglesia rodase 'Mi gran noche'. El último, también cerrado, es un plató virtual con croma en el que antiguamente se grababan espacios como 'Cyberclub'.

El pasado lunes, los nuevos consejeros electos de Telemadrid, que tomarán posesión de su cargo en julio, visitaron las instalaciones y pudieron ver de primera mano cuál es la situación de la cadena en cuyo órgano de gobierno se sentarán en breve. Desde el comité de empresa se les insistió “en la imperiosa necesidad de recuperar la actividad en Radio Televisión Madrid impulsando la producción propia interna” en esta nueva etapa que ahora se abre, según ha explicado la representación de los trabajadores en un comunicado. “La millonaria inversión pública en equipos técnicos de nuestra empresa debe ser utilizada para recuperar una radio televisión pública al servicio de los madrileños”, añaden.

Cuantificar el botín económico desaprovechado es difícil si se tiene en cuenta que, ademas de lo ya descrito, también permanecen sin uso tres unidades móviles (una de grandes dimensiones, con capacidad para 14 cámaras, se utilizaba en la cobertura de eventos deportivos), tres equipos de enlaces para retransmisiones, una unidad HD, cuatro controles de realización y siete salas de posproducción.

Solo en las 34 cámaras, estimando el valor de cada equipo ENG en unos 38.000 euros, permanecen inmovilizados casi 1,3 millones de euros. Casi 100.000 euros más si se tienen en cuenta las dos cámaras en HD por un valor estimado de unos 48.000 euros cada una.

La filial de Telefónica cubre toda la emisión de Telemadrid desde enero de 2013, desde el momento en el que se ejecutó el ERE de la cadena. Entonces se hizo sin concurso y mediante un contrato de 1,2 millones de euros. En julio de 2014, se le adjudicó de nuevo la gestión de la señal mediante un concurso en el que concurrieron también Mediapro ySecuoya. El importe total fue de 7.397.658 euros (4.743.960 en servicios fijos y 2.653.698 en servicios variables). El contrato tiene una duración de un año y puede ser prorrogado por anualidades, de mutuo acuerdo por las partes, hasta un máximo de cuatro años. En mayo del año pasado se volvió a renovar por un importe de unos ocho millones de euros.

Tras ser declarado no ajustado a derecho, Telemadrid tuvo que mejorar las indemnizaciones y readmitir a 55 trabajadores. La mayoría de ellos percibe su salario pero no tiene funciones concretas dentro de la cadena. De hecho, solo seis han vuelto a la redacción de informativos y otros pocos a labores administrativas. Por otro lado, según explicó el pasado lunes en la asamblea regional el director general del ente, Ángel Martín Vizcaíno, todavía quedan siete casos del ERE pendientes en los tribunales.