La confesión más fuerte de Alonso estalla en 'La Promesa': reacciones a su doble vida

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El personaje de Alonso está siendo todo un libro abierto durante los últimos episodios de La Promesa. El marqués de la serie de La 1 de Televisión Española ha estado contándole últimamente a Curro la historia que mantuvo con una misteriosa doncella del palacio, después de la muerte de su primera esposa y antes de casarse con Cruz. En el capítulo de este jueves, Curro no ha sido el único en escuchar más información sobre la que podría haber sido perfectamente Dolores, la madre del muchacho y de Jana.

En el episodio del pasado miércoles de la serie protagonizada por Ana Garcés, Arturo García Sancho y Eva Martín, entre otros, el marqués le confesó a Cruz que sus cuitas del pasado le habían hecho darse cuenta de lo afortunado que era de tenerla como esposa. Esto provocó las lágrimas de la marquesa, quien no pasaba por su mejor momento: celosa de su cada vez más estrecha relación con Curro, se había sentido como la mala de la película al escuchar lo bien que su marido hablaba de Carmen, su difunta esposa.

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En el episodio de hoy, otro fantasma del pasado ha regresado a La Promesa. Se trata de Jimena, que ha sorprendido a Manuel y Abel en plena conversación sobre el amor que el heredero del marquesado le procesa a Jana. El aviador le ha preguntado qué hacía allí, pero la muchacha parecía no escucharle, y ha indicado lo mucho que le había echado de menos y lo difícil que estaba siendo aquella situación para ambos.

"En tu casa me sentí como un auténtico prisionero", ha alegado Manuel. Jimena no ha tardado en observar que su bienvenida no era precisamente un festejo. Alonso ha acudido a la sala, y le ha dicho que, de saber que venía, le hubiesen recibido como Dios manda. "No me voy a quedar", ha anunciado la hija de los duques, quien ha comentado que solo pasaba a saludar y a anunciar que se encontraba mejor.

Cruz ha reaccionado alarmada ante la noticia de que Jimena se había marchado

El marqués ha invitado a la joven a quedarse a dormir, pero, tras varias miradas a Manuel, Jimena ha resuelto que prefería irse a casa de unos amigos de sus padres, y que volvería para hacerles una visita en condiciones. ¿Regresará pronto la hija de Mercedes? ¿Esperaba que Manuel se lanzase a sus brazos?

Cruz ha reaccionado alarmada ante la noticia de que Jimena había marchado en plena noche, cuando le podría haber pasado cualquier cosa. La marquesa se ha levantado de la mesa de la cena para hacer que la chica volviese, pero Manuel se lo ha impedido: "Nadie va a hacer nada, madre", ha gritado el hijo, diciendo debían respetar la decisión de la joven.

Alonso lo confiesa todo

En el invernadero, Jana y Curro finalmente han acordado cuándo el chico abordaría la siguiente conversación con Alonso, en la que la criada estaría escondida, escuchándola. Pese a los nervios del hermano por ser descubiertos, ambos han planeado que ella escucharía desde la biblioteca.

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Esa misma noche, Jana ha acudido a su puesto de control, y ha escuchado la íntima conversación entre el hijo y el padre biológico mientras jugaban al billar. "Tío, ¿usted en su vida se ha arrepentido de algo?", ha cuestionado Curro, sacando aquel romance imposible del que le habló a colación. "Yo daría cualquier cosa por volver a aquellos días", ha confesado Alonso.

El marqués ha relatado que quiso mucho a aquella mujer tan especial, y que nunca había sentido una conexión como con ella. "¿Ni con la tía Cruz?", ha preguntado Curro. "Que dios me perdone, pero ni siquiera con Carmen", ha confesado Alonso. Con semejante nivel de confianza, el joven ha hecho la pregunta más pertinente de todas: "¿Y cómo se llamaba?", a lo que su supuesto tío le ha contestado "Dolores".

Jana seguía al otro lado de la puerta, cuando Alonso ha proseguido diciendo que la mujer tuvo una niña rubia con una bonita sonrisa. La cercanía con la doncella propició que su amistad se convirtiese en un enamoramiento. "Y pasó lo inevitable", ha relatado el marqués, "no me siento orgulloso de haber sido infiel a la tía Cruz".

La tensión se palpaba a los dos lados de la sala. "Eso no fue lo único", ha añadido Alonso, lo que casi ha hecho infartar tanto a Jana como a Curro y los espectadores de La Promesa. "Se quedó embarazada", ha explicado el marqués, quien ha admitido que, por un tiempo, llevó una agotadora, y a la vez hermosa, doble vida. "Le pusimos de nombre Marcos", ha concedido el patriarca de los Luján, diciendo que tuvo que llevar a Dolores a vivir a una casa aparte.

Cuando Marcos, es decir, Curro, ha preguntado qué sucedió al final con Dolores, Alonso ha permanecido callado, con una expresión de tristeza. La conversación ha confirmado que el marqués conocía la existencia de su hijo bastardo. ¿Sabe Alonso que alguien mandó matar a su amante y a su familia paralela? ¿Cuándo le confesará Curro que es, en realidad, Marcos?