Es noticia
Búnkeres nucleares soviéticos protegen el arma ucraniana que más daño hace a Rusia
  1. Tecnología
  2. Novaceno
Las famosas baterías Himars

Búnkeres nucleares soviéticos protegen el arma ucraniana que más daño hace a Rusia

Ucrania y el Pentágono afirman que Rusia no ha destruido ni una de las unidades de artillería de misiles Himars. Ahora, el Ministerio de Defensa ucraniano ha revelado una de las claves de este éxito

Foto: Un soldado ucraniano y una batería Himars dentro de un búnker nuclear construido en tiempos de la Unión Soviética. (Ministerio de Defensa de Ucrania)
Un soldado ucraniano y una batería Himars dentro de un búnker nuclear construido en tiempos de la Unión Soviética. (Ministerio de Defensa de Ucrania)

El Ministerio de Defensa de Ucrania ha revelado cómo protege a sus preciadas unidades de artillería Himars de los ataques rusos: antiguos búnkeres nucleares construidos en tiempos de la Unión Soviética. En el vídeo bajo estas líneas se puede ver una unidad Himars en el interior de una de estas instalaciones a prueba de bombas atómicas.

Foto: El dron supersónico WZ-8 en la última feria aeroespacial china.

Obviamente, el vídeo es parte del esfuerzo del Gobierno de Kiev para contrarrestar la desinformación del Ministerio de Defensa ruso, que afirma haber destruido a todas las unidades Himars proporcionadas por los EEUU aunque estas sigan destruyendo posiciones rusas todos los días.

En el vídeo, el soldado con el apodo de Capitán Himars llama a los soldados rusos a seguir enviando la posición de centros de control y almacenes de armas desde sus teléfonos móviles, algo que supuestamente ya han hecho reclutas rusos en varias ocasiones para sabotear a su propio Ejército y no tener que luchar. El soldado ucraniano afirma que se halla en un búnker nuclear soviético que protege a los Himars de cualquier bombardeo cuando no están en una misión.

Los Himars siguen sembrando el caos

Como ya dijimos en su día, el Sistema de Cohetes de Artillería de Alta Movilidad —Himars, en sus siglas en inglés— ha sido la piedra angular del éxito del Ejército de Kiev que paró los pies a Putin. El Himars es un camión compacto con un lanzador capaz de utilizar diferentes tipos de misiles guiados por GPS para alcanzar objetivos a una distancia de hasta 80 kilómetros. Son extremadamente potentes. Pueden destruir edificios con una tormenta de fuego explosiva en cuestión de segundos. Y, lo más importante, son extremadamente rápidos de configurar y utilizar, capaces de estar listos para atacar en solo unos minutos, disparar misiles en un instante para, inmediatamente después, cerrar rápidamente el kiosco para abandonar su posición, evitando ser objetivo del contraataque de un enemigo que, cuando puede reaccionar, se encuentra con que no hay nada a lo que atacar.

placeholder Una batería Himars entrando en un búnker soviético. (Ministerio de Defensa de Ucrania)
Una batería Himars entrando en un búnker soviético. (Ministerio de Defensa de Ucrania)

Como me contó por videoconferencia el teniente coronel del Cuerpo de Marines de los Estados Unidos Jon O'Gorman —profesor militar de la Escuela de Guerra Naval de los Estados Unidos—, la razón es bastante sencilla: "El Himars es artillería para tontos". O’Gorman —que también es oficial de artillería de campaña por su especialidad ocupacional militar— utilizó los Himars en Irak y Siria, donde fue jefe de apoyo de fuego durante la operación Inherent Resolve que terminó con ISIS. También supervisó unidades Himars en Afganistán, destruyendo posiciones talibanas en varios lugares.

placeholder Lanzamiento de batería Himars.
Lanzamiento de batería Himars.

Estados Unidos comenzó a enviar unidades Himars a Ucrania en junio de 2022. A finales de julio, el ejército ucraniano había desplegado 16 unidades. Solo unos días después, el 3 de agosto, empezaron a aparecer múltiples informes que describían centros de mando y depósitos logísticos rusos totalmente destruidos por esta nueva capacidad ucraniana. Su ejército estaba causando estragos en todas las líneas rusas, cortando su capacidad de reabastecimiento. A finales de mes, estaba claro que las armas eran fundamentales para cambiar el rumbo de la guerra. Son tan eficaces y letales, de hecho, que el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, ordenó su destrucción como prioridad número uno.

El timo del tocomocho desde la Segunda Guerra Mundial

Aparte de los búnkeres nucleares que usan los ucranianos para guardar los Himars para su mantenimiento y protección, el Ejército de Kiev utiliza también la misma estrategia que los aliados usaron contra los nazis en la Segunda Guerra Mundial. La operación Fortaleza es el mejor ejemplo de esta táctica que, combinada con otras operaciones de inteligencia, fue tan efectiva que engañó a Hitler y sus espías igual que los Himars de madera están engañando a las fuerzas de Putin.

placeholder Soldados ingleses levantando un tanque Sherman inflable en Inglaterra.
Soldados ingleses levantando un tanque Sherman inflable en Inglaterra.

La estratagema aliada fue la mayor operación de desinformación de la historia. Por el norte, mantuvo al ejército nazi en Noruega hasta el final de la guerra por decisión del propio Führer. Pero aún más importante fue la parte sur del engaño, diseñada para hacerles creer que los aliados atacarían por la zona de Calais y que Normandía era solo una distracción. Para realizar este engaño, americanos e ingleses crearon un ejército de goma y madera al que llamaron el Primer Grupo de los Ejércitos de EEUU al mando del ya entonces legendario General Patton. Construyeron cientos de aviones de lona, tanques inflables y lanchas de desembarco de madera, que posicionaron en la zona ideal para invadir Calais.

placeholder Los aliados siguieron usando tanques falsos para confundir a los nazis mientras avanzaban en Europa. En esta imagen se pueden ver tanques inflables cerca del río Rin. Para hacerlo extremadamente realista, los aliados hacían las huellas con excavadoras.
Los aliados siguieron usando tanques falsos para confundir a los nazis mientras avanzaban en Europa. En esta imagen se pueden ver tanques inflables cerca del río Rin. Para hacerlo extremadamente realista, los aliados hacían las huellas con excavadoras.

Combinado con varias operaciones de contrainteligencia y cables de radio, el engaño fue tan efectivo que los nazis se lo tragaron por completo, creyendo que el ataque principal se produciría en Calais incluso días después del famoso desembarco de Normandía. Los aliados siguieron usando estos señuelos meses más tarde, ya sobre suelo continental, para engañar a los aviones de reconocimiento de la Luftwaffe.

Cuentos rusos

El resultado de la versión ucraniana de este timo del tocomocho es que Rusia ha destruido varios Himars, sí, pero hechos de madera, como explicó en su día John Hudson —corresponsal del Washington Post en Kiev— en una exclusiva. Por eso los misiles siguen martilleando las posiciones rusas.

placeholder Himars lanzando misiles.
Himars lanzando misiles.

De hecho, los rusos están tan confundidos por estos señuelos que dicen haber destruido más baterías de las que disponen los ucranianos: Los ucranianos tienen operativas 18 unidades de esta letal “artillería para tontos”, según informan el Pentágono y el Gobierno ucraniano. Los rusos afirman haber destruido 27 unidades, pero Ucrania nunca ha tenido más de 18 unidades en su poder. EEUU afirmó en su día que iba a enviar 38 unidades, pero, hasta ahora, solo han llegado 18.

Según fuentes del Pentágono, todos los Himars siguen activos mientras Rusia malgasta costosos misiles —hasta 10 misiles crucero 3M-54 Kalibr según sus cuentas, cada uno con un precio de casi un millón de dólares— en la destrucción de estos señuelos.

El Ministerio de Defensa de Ucrania ha revelado cómo protege a sus preciadas unidades de artillería Himars de los ataques rusos: antiguos búnkeres nucleares construidos en tiempos de la Unión Soviética. En el vídeo bajo estas líneas se puede ver una unidad Himars en el interior de una de estas instalaciones a prueba de bombas atómicas.

Ucrania Defensa Tecnología Militar
El redactor recomienda