El volcán de La Palma podría provocar una lluvia ácida cuando la lava llegue al mar: "Habrá explosiones"

La lava que está manando del volcán en erupción Cumbre Vieja, ubicado en la isla canaria de La Palma, podría llegar a la zona costera de la isla en la tarde de este lunes, según ha avanzado el presidente del Gobierno autonómico de Canarias, Ángel Víctor Torres, en una rueda de prensa celebrada tras la reunión del Plan de Prevención de Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca). "La colada de lava camina hacia el mar y es previsible que a la llegada de la noche, sobre las 20:00 horas de la tarde, pueda alcanzarlo", ha señalado Torres ante los medios, a la par que ha indicado que dadas las circunstancias esta tarde se desarrollará un nuevo comité para valorar todo lo relativo a la actividad eruptiva que está experimentando este volcán de La Palma.

"Es absolutamente imprescindible extremar todas las medidas de seguridad porque estamos ante una circunstancia tremendamente peligrosa", ha querido recalcar asimismo el presidente, en unas declaraciones en las que también ha señalado que la isla es "una zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil" a varios niveles, que han puesto en peligro tanto viviendas como cultivos, entre otros ámbitos. De acuerdo con la información que las administraciones han recibido de los organismos científicos que vigilan el comportamiento del volcán, se espera que la colada de lava entre en el mar en la costa de Tazacorte, posiblemente a través de Playa Nueva, en Los Guirres.

Bajo alerta por riesgo volcánico de nivel rojo, en la que se pide a la población que se aleje de los municipios de riesgo, el hecho de que el magma llegue al mar podría suponer un problema añadido a la situación de emergencia que se está registrando en la isla. Tal y como explica el catedrático de Geología de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), José Mangas, los ríos de lava sepultarán comunicaciones terrestres, eléctricas y telefónicas y crearán una lluvia ácida cuando lleguen al mar, por lo que a las viviendas y terrenos afectados se sumará la pérdida de infraestructuras.

Mangas ha detallado que, debido a las coladas de esta erupción de tipo estromboliano —caracterizada por pequeñas explosiones de materiales en estado pastoso que suceden en pocos minutos u horas, acompañadas por derrames de coladas de lava, y arrastran varios metros cúbicos de lava por segundo—, se crean diversas lenguas de lava de varios metros de ancho que van sepultando a su paso carreteras, viaductos o tendidos eléctricos y telefónicos, así como funden las tuberías de PVC de las conducciones de agua potable.

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"Es como una apisonadora, para volver a habilitar las carreteras se necesitarán explosiones, no se podrá con excavadoras", ha explicado acerca de este impacto en las infraestructuras el geólogo de la ULPGC. Cuando los ríos de lava que recorren la isla de La Palma lleguen al mar, lo que se prevé que ocurra en las próximas horas en forma de una enorme cascada que caerá por un acantilado de unos cien metros de altitud, entre otras posibilidades, se producirá un choque térmico muy notable, a tenor de los 1.100 grados que puede tener el material volcánico que entre en contacto con un agua que está a 23 grados.

La lava, que podría caer en una enorme cascada al mar, provocará un choque térmico muy notable

Ese contraste generará unas enormes nubes de vapor ácido, cuya formación se explica por la composición del agua de mar, que contiene 35 gramos de sales por kilo con cloro en su fórmula. "Habrá explosiones, es como si mezcláramos aceite hirviendo con agua. Se puede generar una lluvia ácida que cause a la población irritaciones de garganta y de nariz", sostiene asimismo Mangas al respecto de este tema. En cualquier caso, ha destacado también el geólogo, "será un espectáculo maravilloso" el que queda por presenciar de esta erupción histórica, que ha confiado en que produzca los menos daños materiales posibles.

Respecto a la repercusión de este fenómeno geológico en la atmósfera, Mangas ha informado de que la columna eruptiva va a expulsar a una distancia superior a los cinco kilómetros cenizas de menos de dos milímetros. El geólogo ha subrayado que los aviones transitan por la tropostera, es decir, a una altitud de entre 10 y 15 kilómetros, por lo que ha descartado que esta erupción afecte a la aviación comercial, aunque sí a la de pequeñas aeronaves, a las que ya se ha prohibido circular.

Lo que sí ha asegurado el catedrático de la ULPGC es que, si la erupción se prolonga en el tiempo, el sur de la isla de La Palma puede verse afectado por una capa importante de cenizas y por gases tóxicos que dañarán los cultivos, ya que esa es la dirección que está tomando el material que desprende.