Llega Gaetan: sigue en tiempo real la evolución de la borrasca que acabará con la nieve

Filomena tiñó de blanco el interior peninsular y la ola de frío más larga en las últimas dos décadas ha mantenido la nieve —en muchos casos ya congelada— hasta 10 días después del temporal. La llegada de una nueva borrasca, denominada Gaetan, es un arma de doble filo: las lluvias derretirán el hielo acumulado en las calles, pero al mismo tiempo pueden añadir aún más caos a las ciudades más afectadas por las nevadas, donde hay riesgo de inundaciones si el alcantarillado no es capaz de evacuar tanta agua.

"Este miércoles ya podemos hablar de un cambio en el patrón atmosférico, provocado por el paso sucesivo de varias borrascas atlánticas que traerán consigo precipitaciones y vientos fuertes, así como mal estado de la mar", explica el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo. La primera ha sido bautizada como Christoph por el servicio meteorológico de Reino Unido, al afectar principalmente a las islas británicas, mientras que la que atravesará España recibe un nombre portugués, Gaetan, al pasar primero por el país vecino.

Durante la pasada madrugada todavía se han producido heladas fuertes y se han rondado los 10 grados bajo cero en puntos de la provincia de Teruel, mientras que en Galicia ya se han notado los primeros coletazos de Gaetan, con rachas de viento huracanadas de hasta 124 kilómetros por hora y precipitaciones abundantes. Tal y como puede observarse en el gráfico interactivo de la plataforma meteorológica Windy que se muestra bajo estas líneas, el frente asociado a Gaetan se irá trasladando este miércoles hacia el este, con precipitaciones que afectarán a buena parte de la Península. "Llovería, sobre todo, en el norte de Extremadura y sur de Castilla y León. También habrá precipitaciones abundantes en el sur de Andalucía. En todas estas zonas, las lluvias pueden ser fuertes y persistentes en estas zonas, es decir, superar los 15 o 20 litros por metro cuadrado en una hora", a juicio del experto.

Las precipitaciones serán más abundantes en el oeste de Galicia y del sistema Central, donde podrían ser localmente persistentes, así como en el entorno del Estrecho, donde podrían ir acompañadas de tormenta y ser localmente fuertes, pero perderán intensidad conforme progresan hacia el este. Así, las lluvias pondrán en aviso amarillo por riesgo a Cádiz, Huelva, Sevilla, A Coruña y Pontevedra. También serán probables nieblas matinales en la meseta Sur, depresiones del noreste peninsular y zonas de montaña del noroeste; y podrán ser más extensas y persistentes en la Mancha y en el interior de Cataluña. En Huesca y Lleida se han decretado avisos amarillos por niebla.

Las temperaturas máximas aumentarán en el tercio oeste peninsular y bajarán en la mitad oriental. Las mínimas aumentarán de forma notable en gran parte de la Península. Las heladas, en general débiles, se esperan sólo en áreas montañosas del norte y este peninsular, así como en zonas dispersas del este de la Meseta, las cuales serán más intensas en Pirineos. En cualquier caso, todavía Teruel, Zaragoza, Cuenca y Guadalajara seguirán con avisos amarillos por temperaturas mínimas. Por último, soplarán vientos del sur y suroeste en la Península y Baleares. Serán fuertes o con intervalos de fuerte en los litorales de Galicia, del Cantábrico occidental, de Andalucía, sudeste y Baleares, así como en áreas montañosas del norte y noroeste peninsular. Y en Canarias se esperan vientos flojos variables.

En aviso naranja (riesgo importante) por el viento estarán A Coruña, Lugo y Pontevedra, mientras que en aviso amarillo (riesgo) estarán: Cádiz, Huelva, Huesca, Asturias (naranja en la Cordillera y Picos de Europa), Cantabria (naranja Liébana y centro y valle de Villaverde), Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria, Zamora, Lleida, Ourense, Navarra (naranja la vertiente cantábrica de Navarra), Álava, La Rioja y Ceuta. El viento provocará mala mar en A Coruña y Pontevedra, donde se ha decretado el aviso naranja por oleaje, así como en Cádiz, Huelva, Asturias, Girona y Lugo, que estarán también en aviso, pero en su caso de nivel amarillo.

Balsas de agua en determinadas zonas

En aquellos territorios donde aún hay capas de nieve en el suelo (zona centro e interior peninsular), las precipitaciones que se esperan serán suaves, sin grandes acumulados de lluvias ni intensidades fuertes. De hecho, no se superarán los 20 o 30 litros por metro cuadrado en 72 horas. "No obstante, las lluvias que se produzcan junto con el viento, que soplará templado del sur y el suroeste, y el notable ascenso de las temperaturas, especialmente de las mínimas hará que se produzca una fusión progresiva de la capa de nieve acumulada", apunta Del Campo.

El portavoz de la Aemet advierte: "Esto se puede traducir en el aumento de caudal de determinados cauces y, probablemente, algunas balsas de agua en determinadas zonas". Por ejemplo, se incrementará de forma significativa el caudal de aquellos ríos cuyas cuencas mantienen grandes extensiones de nieve, en particular del Tajo, el Duero y el Ebro.

El mayor riesgo estará en Madrid, Navarra, Aragón y Castilla-La Mancha, donde la evacuación de agua puede ser un problema. Para evitar males mayores, el director de la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 ha pedido a las autoridades competentes que eliminen los elementos de riesgo en arbolado y cornisas. "También que lleven a cabo la labor de mantenimiento de imbornales y alcantarillado que permitan evacuar el agua", señala en un vídeo compartido en Twitter.