El pingüino emperador podría desaparecer en 2100 si fallamos con el cambio climático
Un estudio, aplicando modelos con diferentes aumentos de la temperatura en el planeta, no da resultados demasiado esperanzadores
El futuro del pingüino emperador no parece muy halagüeño. Según un estudio publicado en la revista científica 'Global Change Biology', podría extinguirse a finales de este siglo si el cambio climático continúa al ritmo actual.
La autora principal del estudio, Stephanie Jenouvrier, ecologista de aves marinas en la Institución Oceanográfica Woods Hole, lo tiene claro: "Si el clima global continúa calentándose al ritmo actual, esperamos que los pingüinos emperador en la Antártida experimenten una disminución del 86 por ciento hacia el año 2100".
La supervivencia de los pingüinos emperador depende en gran medida de lo que ocurre con el hielo marino, que los animales usan como sitios para la reproducción y para el cambio de plumaje, y el aumento paulatino de la temperatura global y el deshielo de los polos no es una buena noticia para ellos.
Como un canario en una mina
"Los pingüinos son una especie indicadora, un canario en una mina de carbón, nos están advirtiendo del efecto futuro del clima. El gran mensaje es que tenemos que escuchar a los pingüinos e implementar políticas para cumplir con el objetivo del acuerdo de París, y tenemos que hacerlo ahora", señala Jenouvrier.
Los pingüinos dependen mucho del clima y tienen complicado adaptarse y mudarse a otros hábitats
El acuerdo de París tiene como objetivo limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados, algo difícil de lograr, pero que puede ser la diferencia entre que desaparezcan un gran número de especies, incluidos los pingüinos, o que puedan sobrevivir.
El problema del pingüino emperador es que su futuro depende más de los esfuerzos climáticos internacionales que de su capacidad para adaptarse y mudarse a nuevos hogares, algo que, teniendo en cuenta su morfología y su hábitat, resulta muy complicado.
El hielo del ártico es vital para esta ave, ya que eligen para establecer sus colonias porciones de hielo con condiciones muy específicas: deben estar sujetas a la costa continental antártica, pero han de estar lo suficientemente cerca del mar abierto como para que puedan obtener comida.
Tres escenarios
En este estudio, los investigadores contemplaron tres situaciones hipotéticas diferentes con el fin de evaluar el deshielo y la posible supervivencia del pingüino emperador para final de siglo. En la primera, se calculó un aumento de la temperatura global de 1,5 grados (meta establecida por el Acuerdo de París); en la segunda se valoraba un incremento de 2 grados; y en la tercera, una subida de las temperaturas globales de 5 a 6 grados (en una situación en la que no se tomaran medidas para frenar el cambio climático.
"El gran mensaje es que tenemos que escuchar a los pingüinos y cumplir con el objetivo del acuerdo de París"
En el primer supuesto, los investigadores calcularon que únicamente se perdería un 5 % del hielo marino, lo que supondría una reducción del 19 % en el número de las colonias de pingüinos. Si la temperatura global se elevara en 2 grados, la pérdida de hielo marino casi se triplicaría y desaparecía más de un tercio de las colonias. Finalmente, si no se adoptan medidas contra el calentamiento global, la proyección es mucho más apocalíptica, con una desaparición completa de dichas colonias.
Las pérdidas previstas de los pingüinos son peores que cuando Jenouvrier y sus colegas las estimaron hace cinco años, en parte debido al uso de mejores modelos de cálculo climático.
Peter Fretwell, investigador del British Antarctic Survey que no participó en el estudio, ha indicado a New Scientist que todavía hay mucha incertidumbre en cuanto a cómo reaccionarán los pingüinos emperadores a medida que el mundo se caliente, pero su futuro es muy sombrío si las emisiones no se reducen rápidamente. "La diferencia entre un escenario en el que detenemos el calentamiento global y otro en el que no lo hacemos es cruda".
El futuro del pingüino emperador no parece muy halagüeño. Según un estudio publicado en la revista científica 'Global Change Biology', podría extinguirse a finales de este siglo si el cambio climático continúa al ritmo actual.