La Comisión Europea registra la sede de Glovo en Barcelona por posibles irregularidades

Técnicos de la Comisión Europea registraron ayer por la tarde la sede de Glovo en Barcelona y de su matriz en Berlín, la alemana Delivery Hero. Se trata del segundo registro de este tipo relacionado con una investigación que la Comisión está llevando a cabo sobre supuestas prácticas anticompetitivas en el sector de entrega de comida a domicilio. La Comisión aseguró en un comunicado que los registros estaban relacionados con los realizados en julio del año pasado, pero no mencionó los nombres de las empresas ni de los países. Las agencias Reuters y AFP confirmaron luego que se trataba de Glovo y Delivery Hero.

En su comunicado, la Comisión aseguró que las inspecciones se realizaron tanto por técnicos del organismo como por miembros de los órganos de la autoridad de la competencia respectivos de cada país, en España de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Los registros son el resultado de la ampliación de la investigación que está llevando a cabo la Comisión desde el verano del año pasado.

"El alcance de la investigación, que inicialmente incluía presuntas asignaciones de mercado, se ha ampliado ahora para cubrir conductas adicionales en forma de presuntos acuerdos de no contratación y el intercambio de información comercialmente sensible. Las inspecciones no anunciadas son un paso preliminar hacia la investigación de prácticas anticompetitivas sospechosas. El hecho de que la Comisión realice tales inspecciones no significa que las empresas sean culpables de comportamiento anticompetitivo, ni prejuzga el resultado de la investigación en sí misma", ha asegurado la Comisión en un comunicado.

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Tanto Delivery Hero como Glovo confirmaron los registros de la UE. "Podemos confirmar que la Comisión Europea ha llevado a cabo una inspección en nuestras oficinas en Berlín y Barcelona", aseguró Delivery Hero en un comunicado. Delivery Hero y Glovo también confirmaron los registros del año pasado.

La firma alemana es dueña de Glovo desde diciembre de 2021, cuando adquirió el 100% de las acciones de la compañía, valorándola en ese momento en más de 2.300 millones de euros. Sin embargo, ha sido una de sus inversiones más ruinosas, ya que, tras la caída del sector, Glovo pasó a ser valorada en menos de 800 millones. Delivery Hero perdió en 2022 más de 620 millones de euros, en buena parte lastrada por su filial española.