Has hecho test con esta 'app', pero nunca pensaste que Goldman Sachs la compraría por 2.000 M

Una aplicación que permite hacer test de forma simultánea en distintos dispositivos. Quizás es algo que habría llamado la atención en el prólogo de este siglo, pero en pleno 2023 no parece que sea, precisamente, una tecnología puntera. Sin embargo, sí puede resultar un negocio clave para el futuro. O, al menos, así lo ve el brazo inversor de Goldman Sachs, uno de los mayores bancos del mundo. Ellos han sido los que han liderado una oferta —el fondo General Atlantic y Lego también son parte de la operación— para comprar la noruega Kahoot por la friolera de 2.000 millones de dólares.

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Como ocurrió con prácticamente cualquier otra plataforma digital, el negociado de Kahoot tuvo un boom durante los años de pandemia. "Con todo el mundo en casa, se empezaron a crear este tipo de aplicaciones, pero Kahoot marcó su récord histórico, porque ya estaba antes", explica Alberto de Torres, profesor de ESIC y economista. Eso fue lo que hizo que esta empresa, fundada en 2011, decidiera salir a bolsa en marzo de 2021, después de haber recaudado 500 millones en distintas rondas durante ese periodo. Sin embargo, lo hicieron en el peor momento. "Parecía que iba a ser la bomba, pero, cuando la pandemia acabó, la app también volvió la normalidad", apostilla.

Unos meses después, comenzaba la crisis de las tecnológicas provocada por la subida de los tipos de interés, algo que hundió sus cotizaciones, entre otras consecuencias. Por supuesto, la empresa noruega no fue una excepción. Si bien consiguió alcanzar un pico de 53 coronas noruegas (algo menos de cinco euros) por acción, esa cifra se redujo hasta las 15 coronas (1,3 euros al cambio) a principios de este año, aunque lo cierto es que, desde entonces, ha tenido un importante repunte, fruto de la oferta de compra capitaneada por Goldman Sachs.

De hecho, el precio que ofrecen es de 35 coronas por acción, una cifra similar a la que se ha aproximado su cotización desde el anuncio. Ahora bien, ¿por qué reflotar una compañía que, en principio, parece que está en horas bajas?

"Se han convertido en un estándar"

Lo primero que hay que destacar es que, excepto Goldman Sachs, el resto de actores principales en la adquisición son ya parte del accionariado de Kahoot. De hecho, General Atlantic es su mayor accionista y otro de los participantes destacados es el fondo Glitrafjord, propiedad del CEO de Kahoot, Eliert Hanoa. Otro de los nombres más sonados y que tenía participación en la empresa es Kirkbi Invest, el fondo de inversión del grupo Lego. "Los inversores se han sentido atraídos por las adquisiciones de empresas que cotizan en bolsa este año debido a la caída de las valoraciones", recordaba hace unos días Financial Times.

"Es la típica operación de salida de bolsa, porque lo que ha pasado estos meses es un bache para ellos, lo tengo claro. Estamos en la consolidación y madurez del edtech", dice por su parte Félix López Capel, director de SEK Lab, una aceleradora de startups de este sector. "La gamificación ha llegado para quedarse, porque está demostrado que enseñar de forma divertida y lúdica triunfa tanto en colegios y universidades como en el mundo corporativo", asegura.

Según la consultora Market Us Research, el volumen de negocio de las edtech fue de 129.000 millones de dólares en 2022, una cantidad que esperan que se triplique durante la próxima década, ya que cada vez hay más fondos que invierten en el sector. En España, uno de los casos más sonados en los últimos meses ha sido el de Innovamat, que levantó una ronda de 20 millones de euros y en la que participaron el estadounidense Reach Capital, pero también los españoles Kibo Ventures y Bonsai Partners. Por supuesto, no han sido los únicos que se han hecho un nombre en este nicho, ya que también merece la pena destacar casos como los de LingoKids, Smartick o Genially.

Sin embargo, ¿por qué Kahoot despierta tanto interés? "Se ha convertido en un estándar", responde López Capel, que considera que una de las claves del éxito es "haber conseguido el efecto viral, gracias a que es fácil de usar, que es algo clave para que triunfe un producto educativo que tienen que usar todo tipo de profesores y alumnos". Por ejemplo, no es necesario descargar ninguna app, ya que basta con entrar a la web e introducir un código para participar en uno de sus test.

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Según datos de la propia compañía, Kahoot asegura que hasta la fecha ha organizado "cientos de millones" de sesiones de aprendizaje en las que habrían participado 9.000 millones de usuarios, aunque no únicos, obviamente. En el segundo trimestre de este año, Kahoot ha ingresado 41 millones de dólares, con un ebitda de 11 millones.

Todo funciona bajo las reglas del modelo freemium; esto es, una versión básica gratuita y, si quieres unas funciones extra, tienes que pagar alguna de sus suscripciones. En total, cuentan con cerca de un millón de usuarios de pago. "Es un modelo que triunfa en educación. Lo usas, te engancha y, al final, te acabas pasando al pago, que es lo que me pasó a mí", continúa este especialista.

Sin embargo, hay otra parte del negocio que puede ser aún más clave para el futuro. "Para mí, la clave es en que detrás de la operación está Lego, que lo quiere para poder incluirlo en su vertical de educación. Están tratando de convertirse en una suite donde tengas acceso a varios productos y servicios", explica De Torres. De hecho, cabe recordar que ya habían lanzado proyectos con distintas franquicias, como Frozen, Cars o Marvel. "Es un negocio por explotar", apunta.

Solo hay que pensar en la reciente venta de Rovio, el estudio que creó Angry Birds, por 700 millones de dólares, donde el valor estaba más en el uso de la propiedad intelectual que en el propio juego. Es algo que ya han reconocido los propios compradores de Kahoot. "Han mantenido un impulso significativo a través de iniciativas estratégicas clave, incluida la ampliación de su oferta empresarial y su base global de suscriptores, al tiempo que han ampliado sus asociaciones de propiedad intelectual", destacaron en General Atlantic tras hacer la oferta.

"Kahoot parece sencillo, pero tiene plataforma muy robusta, con una buena tecnología detrás, y eso permite buenas integraciones", comenta De Torres sobre este punto, que cree que los acuerdos con otras tecnológicas van a ser clave para poder mantener el liderato. De hecho, hace unos días, Kahoot anunciaba un acuerdo con Microsoft para incluir distintas funciones desarrolladas mediante inteligencia artificial, como un generador de preguntas. "Las pequeñas y medianas tendrán que asociarse con otras para crecer, ser absorbidas por grandes... o cerrar", avisa.