"Son como bombas": Venecia reduce el número de personas en las góndolas

La ciudad de los canales es uno de los puntos más visitados del planeta y, por tanto, uno de los más afectados por el coronavirus. La pandemia provocó que millones de personas de todo el mundo tuvieran que confinarse en sus casas y destinos como Venecia quedaron totalmente desiertos de turistas. Ahora, las cosas vuelven poco a poco a la normalidad… pero con cambios.

Uno de ellos es el número de personas que puede subir a una góndola. Las atracciones más populares de Venecia podían llevar, hasta ahora, a seis pasajeros como máximo para disfrutar de un paseo entre canales. Sin embargo, las autoridades han reducido ese número a cinco por una razón de peso: las personas hemos engordado.

No se refiere solo al peso que muchos han ganado durante el confinamiento, sino a la tendencia al alta que se viene observando en la última década. Andrea Balbi, presidente de la Asociación de Góndolas de Venecia. Explica a la CNN que "en los últimos 10 años aproximadamente, los turistas pesan más, por lo que en lugar de hacer que se pesen en una báscula antes de subir a la góndola, estamos limitando el cupo de pasajeros".

Los barcos se inundan

No solo serán las góndolas destinadas a paseos turísticos las que reduzcan el número de pasajeros. También las conocidas como 'góndolas da parada', las que funcionan como taxis llevando a pasajeros por los canales de toda la ciudad, verán reducida su capacidad de los 14 clientes actuales a tan solo 12 en el futuro.

Algunos turistas que llegan desde determinados países son como subir bombas a bordo y el barco se hunde

En Venecia hay 433 gondoleros oficiales actualmente y 180 sustitutos. Raoul Roveratto es el presidente de este segundo grupo y no tiene pelos en la lengua: "Algunos turistas que llegan desde determinados países son como subir bombas a bordo; y cuando el bote está completamente cargado, el casco se hunde y entra agua. Seguir adelante con más de media tonelada de carne a bordo es peligroso".

Estas medidas entrarán en vigor en las próximas semanas y se espera que no afecten al turismo. Venecia se está recuperando muy poco a poco de la pandemia ya que la región del Véneto fue una de las más afectadas por el covid-19 desde que llegó a Italia. Muchos establecimientos han tenido que cerrar ante la imposibilidad de pagar alquileres millonarios durante los meses que permanecieron cerrados.