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Mitsotakis vuelve a ser reelegido en unas elecciones en las que vuelve a subir el voto a la extrema derecha
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Revalida su victoria

Mitsotakis vuelve a ser reelegido en unas elecciones en las que vuelve a subir el voto a la extrema derecha

El porcentaje mínimo para la mayoría absoluta es del 38%, después de que en estos comicios se introdujera una prima de hasta 50 escaños para el ganador

Foto: Kyriakos Mitsotakis al llegar a la sede del partido esta tarde. (Reuters/Louiza Vradi)
Kyriakos Mitsotakis al llegar a la sede del partido esta tarde. (Reuters/Louiza Vradi)

Los resultados han sido claros. Nueva Democracia volverá a gobernar Grecia durante los próximos cuatro años tras obtener el 40,5% de los votos y 158 escaños. En segundo lugar, Syriza, con el 17,8% de los votos y 47 diputados. El Pasok-Kinal de Nikos Androulakis vuelve a subir en estas elecciones (11,8% y 32 escaños) y apunta a reconquistar el papel de principal partido en la oposición. Los socialdemócratas han conseguido desbancar a Syriza como segunda fuerza más votada en algunas zonas del país. Tras ellos y con un 7,6% de los votos, el Partido Comunista, que se hace con 20 parlamentarios.

El partido de extrema derecha Spartiates (Espartanos) también ha entrado en el parlamento con un 4,7% de los votos y 13 diputados. Su fundador, Vassilis Stigas, agradeció a Ilias Kasidiaris su apoyo. Kasidiaris, antiguo miembro de Amanecer Dorado, se encuentra actualmente en prisión por pertenencia a una organización criminal. Junto con los también ultraderechistas Solución Griega (4,5% y 12 escaños) y Niki (3,75% y 10 parlamentarios), la extrema derecha supera el 10% del voto popular. Y, por último, el partido de Zoe Konstantopoulou, antigua diputada de Syriza, con un 3,15% y ocho parlamentarios.

Foto: Kyriakos Mitsotakis. (EFE/YANNIS KOLESIDIS)

Kyriakos Mitsotakis volvía a partir como favorito en todas las encuestas preelectorales. Pero esta vez la atención se concentraba en vaticinar por cuántos puntos de diferencia aventajaría Nueva Democracia al partido de Alexis Tsipras. El primer ministro del partido conservador ha cumplido con las expectativas y ha superado de forma contundente al principal partido de la oposición. Syriza, partido al que Alexis Tsipras llevó a la primera línea de la política griega durante la crisis económica, lucha ahora por su supervivencia política con un renovado Pasok, que quiere volver a convertirse en uno de los dos actores principales en la escena política del país.

Nueva Democracia gobernará en solitario gracias a la prima de hasta los 50 escaños de bonificación al partido ganador que había sido eliminada en los pasados comicios por una ley electoral aprobada por el Gobierno de Alexis Tsipras en la que se aplicaba una representación proporcional. En las elecciones de hoy, volvieron a introducirse el sistema mixto de representación proporcional y la prima de escaños que se había venido aplicando en Grecia desde 1974.

La estabilidad económica de Mitsotakis pesa mucho en Grecia. Los griegos han renovado su confianza en el primer ministro. El ejecutivo conservador puede otorgarse el mérito de haber conseguido mejorar la situación económica del país y la caída de la deuda pública. Bajo su mandato Grecia no solo salió de la supervisión internacional a la que estaba sometida, sino que ha logrado que el crecimiento de su economía supere a la media europea, atrayendo a importantes inversiones extranjeras.

Los griegos han optado claramente por la estabilidad y han apoyado al Ejecutivo de centroderecha por sus éxitos macroeconómicos. Subsidios para la calefacción, el transporte, subidas de pensiones y del salario mínimo han mostrado a Mitsotakis como una figura de confianza y estabilidad. Yiannis Tsirbas, profesor de Sociología de la Universidad Kapodistria de Atenas, cree que los griegos han depositado un voto económico. Según afirmaba en un artículo publicado en ABC News, Mitsotakis ha conseguido llegar a los votantes de centro “tras muchos años de construir un perfil de político moderado y eficaz”.

Foto: Kyriakos Mitsotakis. (Reuters/Louiza Vradi)

Pero los problemas cotidianos siguen ahí y el pueblo griego ha ofrecido su total confianza al Gobierno de Mitsotakis, que se enfrenta a un reto que hasta ahora no ha conseguido: paliar la escalada de precios que han ido sufriendo los alimentos básicos.

A Mitsotakis tampoco le han afectado los reveses y escándalos que han surgido durante la última etapa de su legislatura. Ni las escuchas telefónicas a políticos y periodistas por parte de los servicios secretos griegos ni el accidente ferroviario de Tempe el pasado mes de febrero, que se saldó con la muerte de 57 personas, muchas de ellas estudiantes universitarios, han afectado su popularidad ni pudieron eclipsar su victoria del 21 de mayo.

Foto: Fotografía: EFE/EPA/ Angelos Tzortzinis.

El triunfo de hoy se ha producido a la sombra del naufragio del pasado 14 de junio que tuvo lugar a 47 millas náuticas de Pilos, una localidad en el oeste del Peloponeso y en el que cientos de personas perdieron la vida tras hundirse un barco pesquero sobrecargado con 750 inmigrantes procedentes de Egipto, Siria, Pakistán y Palestina. Lo sucedido ha suscitado muchas críticas internacionales sobre cómo las autoridades griegas gestionaron los hechos.

Pero el naufragio, uno de los peores sucedidos frente a las costas griegas en los últimos años, no le ha pasado factura electoral a Mitsotakis. La guarda costera griega ha recibido duras críticas por su gestión de los hechos por esperar hasta el último momento para intervenir en la tragedia del mar Jónico. La versión oficial es que el pesquero rechazó su ayuda.

La inmigración ha sido uno de los temas centrales de la política del partido conservador. Mitsotakis prometió proteger las fronteras y reducir las solicitudes de asilo en Grecia.

Foto: Mitin del Pasok en Atenas. (EFE/Alexander Beltes)

El pasado viernes, Spilios Kriketos, candidato a diputado por ND, fue expulsado del partido por sus declaraciones racistas en las que afirmaba que Grecia "no puede tolerar más migrantes", afirmando que la mayoría de estos se dedican a robar.

"Opiniones como las expresadas por Spilios Kriketos no tienen cabida en nuestro partido… Las declaraciones de odio y racismo están fuera del marco de valores de ND", afirmaba el comunicado oficial del partido tras su expulsión.

Las costas de Grecia son una ruta habitual para los inmigrantes que intentan llegar a Europa desde Turquía. El Gobierno de Mitsotakis ha apostado durante su última legislatura por una política firme contra la inmigración y ha blindado con un polémico muro su frontera terrestre con Turquía, ampliando e invirtiendo en moderna tecnología para la vigilancia de la zona. Mitsotakis ha sido criticado por la gestión de su Gobierno en las fronteras y acusado por ONG durante los últimos años de devoluciones ilegales en caliente. Atenas siempre lo ha negado.

Los resultados han sido claros. Nueva Democracia volverá a gobernar Grecia durante los próximos cuatro años tras obtener el 40,5% de los votos y 158 escaños. En segundo lugar, Syriza, con el 17,8% de los votos y 47 diputados. El Pasok-Kinal de Nikos Androulakis vuelve a subir en estas elecciones (11,8% y 32 escaños) y apunta a reconquistar el papel de principal partido en la oposición. Los socialdemócratas han conseguido desbancar a Syriza como segunda fuerza más votada en algunas zonas del país. Tras ellos y con un 7,6% de los votos, el Partido Comunista, que se hace con 20 parlamentarios.

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