La diferencia entre lo que quieren españoles y franceses: más UE, más Ucrania y más migrantes

La barrera de los Pirineos no es meramente física. Pese a pertenecer a culturas muy cercanas y ser grandes aliados, españoles y franceses cuentan con diferentes opiniones y prioridades en algunos temas cruciales de la actualidad europea. España es, en líneas generales, más europeísta, y más abierta a la inmigración, además de estar más preocupada por el conflicto en Ucrania que su vecino del norte.

Son tres de las principales conclusiones del estudio 'Francia y España: miradas cruzadas y actitudes hacia la Unión Europea y la guerra en Ucrania', publicado este lunes por el Real Instituto Elcano y la Asociación Diálogo. Se trata de la tercera edición de esta encuesta sobre las opiniones públicas en los dos países, lo que permite trazar su evolución. Los resultados revelan, como es de esperar entre dos naciones tan cercanas, posturas muy similares en la mayoría de los ámbitos. Sin embargo, existen algunas áreas con diferencias considerables.

Una de las principales es la que corresponde a la inmigración y el refugio. En líneas generales, en España existen actitudes de mayor aceptación que en Francia al respecto. Más de dos terceras partes de los españoles encuestados, el 68%, está a favor de que su país permita la entrada a algunos o muchos inmigrantes económicos procedentes de África, frente al 44% de nuestros vecinos del norte. Un 25% de los franceses prefiere que su país no admita a “ninguno”, frente al 12% español. Cifras similares pueden apreciarse en el caso de los refugiados procedentes de Oriente Medio: 66% de los españoles apuestan por dejar que vengan algunos o muchos, frente a solo un 38% en Francia.

La acogida de refugiados ucranianos es mucho más popular en ambos países, pero también en este caso puede apreciarse una mayor predisposición de España. En concreto, un 87% de los españoles, frente a un 68% de los franceses, cree que su país debe permitir la entrada de algunos o muchos ucranianos.

Por otro lado, como ya habían detectado ediciones anteriores de la encuesta de Elcano y Diálogo, españoles y franceses tienen percepciones distintas de su identidad nacional. Del otro lado de los Pirineos se sienten, ante todo, de su país (6,7 en una escala de 10), después de su ciudad (6,4), de su región (6,3) y, muy atrás, de Europa (4,9). Los españoles, por el contrario, se sienten principalmente de su ciudad o región (7,4), en menor escala de su país (7,0) y finalmente europeos (6,6), pero esta identidad europea es mucho más intensa y próxima al resto que en el caso galo.

Esta mayor identificación española con Europa se traduce en un mayor aprecio a la UE. En todos los sondeos a nivel continental, España siempre aparece entre los países más europeístas. Esta no es una excepción: más de dos tercios de los encuestados en el país (un 67%) considera que la pertenencia a los Veintisiete es positiva, 25 puntos por encima de los franceses (42%). Del mismo modo, Francia es mucho más reacia que su vecino del sur a dar más poder a Bruselas. En conjunto, el 59% de los españoles está a favor de aumentar o mantener las competencias actuales de la UE, frente al 44% de los franceses.

Paralelamente, para los españoles, el principal objetivo de la UE debe ser la igualación de rentas y bienestar entre los diferentes Estados miembros, una meta que solo ocupa el tercer lugar en las preferencias de los franceses, quienes ven como prioridad máxima el que la Unión se convierta en una potencia económica capaz de competir con EEUU y China. Los ciudadanos de ambos países, además, tienen diferentes opiniones sobre cuál es el principal problema al que se enfrentan los Veintisiete en este momento. En España, más de la mitad de los encuestados (54%) señala la guerra en Ucrania, seguida por el precio de los combustibles (23%) y, muy alejado, el cambio climático (10%). Por el contrario, en Francia, la importancia dada al conflicto ucraniano (33%) es solo ligeramente superior a la del cambio climático (29%).

La mayor preocupación de los españoles por Ucrania se ve reflejada en otros apartados de la encuesta. Aunque una gran mayoría en ambos países apoya la implicación europea en esta guerra (76% en Francia y 85% en España), los españoles son más enfáticos en sus opiniones sobre lo que la UE debe hacer. Casi la mitad de los encuestados del país (47%) cree que Europa debería involucrarse aún más en la guerra, frente a un 33% de los franceses.

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Menos admiración y superioridad

Los resultados de esta encuesta, una vez más, reflejan que los españoles sienten admiración por Francia y que los franceses ven a España con cierta condescendencia y sentimiento de superioridad, aunque en un grado menor que en años anteriores. “Españoles y franceses están de acuerdo en que Francia es superior a España en la mayoría de los aspectos importantes: su sistema económico, su influencia internacional, su nivel científico y técnico y su calidad democrática. Pero no hay consenso sobre otros dos aspectos: la calidad de la producción cultural y la calidad de vida”, explica el estudio.

En estos dos últimos apartados, los españoles se sienten superiores a los franceses, y estos últimos se muestran divididos respecto a qué país tiene mejor calidad de vida. En general, la evolución de los datos muestra una tendencia hacia la igualación. “El proceso de transformación tan intenso que ha vivido España en los últimos años ha provocado una reducción del sentimiento de inferioridad de los españoles hacia Francia y del sentimiento de superioridad francés frente a España”, ha resumido Carmen González Enríquez, investigadora principal del Real Instituto Elcano y autora de la encuesta, durante la presentación del estudio.

Finalmente, franceses y españoles cuentan con diferentes percepciones propias como países. La mirada introspectiva francesa es más matizada y dividida que la española, con más elementos en los que las opiniones están fragmentadas. En el caso de España, a menudo existen consensos superiores al 70% sobre sus propias virtudes y defectos. Las mayores diferencias en las visiones de ambos países son en los calificativos “racional” (un 55% de los franceses consideran que su país lo es, frente a un 79% de los españoles que definen a su nación como “emocional”), “violento” (43% de los franceses, solo 18% de los españoles), “religioso” (31% de los franceses, 63% de los españoles) y “egoísta” (46% de los franceses, 27% de los españoles).