Por qué Groenlandia asusta a Dinamarca más que el terrorismo o la delincuencia
Un vasto territorio helado, que es posesión danesa desde 1814, se ha convertido en la principal preocupación de los habitantes escandinavos en los últimos meses
Dinamarca se acaba de encontrar con un inesperado problema: Groenlandia. El país danés puede presumir de ser un país tranquilo, sin demasiados problemas, en el que la principal preocupación de sus habitantes contra la seguridad nacional no era otro más que el terrorismo, como ocurre en buena parte de los países europeos. Sin embargo, desde hace unos meses, Groenlandia se ha convertido en su principal preocupación, especialmente por culpa de Donald Trump.
Durante el pasado mes de agosto, el presidente de Estados Unidos afirmó públicamente su intención de comprar Groenlandia, algo ante lo que evidentemente el país danés cerró filas, negando cualquier posibilidad de que esta situación se lleve a cabo. Sin embargo, la insistencia de Trump en hacerse con este vasto territorio del Ártico, que pertenece a Dinamarca desde 1814, ha provocado que se genere cierta preocupación al respecto, por encima del terrorismo o de los delitos a través de Internet.
Han sido los Servicios Daneses de Inteligencia de Defensa los que han vinculado directamente este cambio en los temores de los daneses con las palabras de Trump. Pero, ¿por qué está tan interesado en Groenlandia? Varias son las razones que explicarían por qué el presidente norteamericano quiere hacerse con este territorio, todas ellas relacionadas con cuestiones geopolíticas y con el posicionamiento de liderazgo en los nuevos mercados.
En primer lugar, la 'excusa' perfecta para que Trump anunciara su interés en Groenlandia tiene que ver con la existencia de una base norteamericana en la zona. Durante la Guerra Fría, EEUU construyó en Thule un importante campamento aéreo que, a día de hoy, continúa utilizando. No en vano, se trata del punto septentrional más importante del país norteamericano, con el que conseguir monitorizar posibles ataques que puedan venir desde esa zona.
Pero, además, el deshielo ha provocado que el Círculo Polar Ártico sea cada vez más navegable, por lo que tener en su dominio esta zona permitiría a EEUU tener un control estratégico de la zona. Y por si la ubicación no fuera suficientemente importante, la importancia de Groenlandia también está en su interior: no en vano, cuenta con numerosas tierras raras fundamentales para el desarrollo de tecnologías y de nuevos combustibles, como confirma 'BBC'.
Las tierras raras son un grupo de 17 elementos de la tabla periódica que poseen propiedades fundamentales para la industria tecnológica y que se utilizan en productos tan cotidianos como los teléfonos móviles, los electrodomésticos, los ordenadores, vehículos e, incluso, en dispositivos médicos. Todos ellos destacan, especialmente, por sus capacidades magnéticas, por lo que se convierten en indispensables para que sobrevivamos en la era tecnológica.
Así, en Groenlandia se han encontrado tierras raras con uranio radioactivo y torio -combustibles nucleares-, ilmenita -el mineral con el que se produce el titanio-, oro, platino, zinc y molibdeno, además de otros importantes depósitos de zafiros, rubíes, níquel, cobre o plata, entre otros. El control territorial y de estas materias primas puede hacer que EEUU esté varios escalones por encima de China o Rusia. Por eso, los daneses temen que las palabras de Trump no sean más que el primer aviso.
Dinamarca se acaba de encontrar con un inesperado problema: Groenlandia. El país danés puede presumir de ser un país tranquilo, sin demasiados problemas, en el que la principal preocupación de sus habitantes contra la seguridad nacional no era otro más que el terrorismo, como ocurre en buena parte de los países europeos. Sin embargo, desde hace unos meses, Groenlandia se ha convertido en su principal preocupación, especialmente por culpa de Donald Trump.