Los líderes de la UE iniciarán ya las preparaciones para un Brexit sin acuerdo

En medio del caos desatado en Reino Unido por la moción de no confianza contra Theresa May, los líderes de la Unión Europea iniciarán las preparaciones para un Brexit sin un acuerdo de salida, según indica el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en su carta de invitación a los jefes de Estado y de Gobierno de la UE para la cumbre de este jueves y viernes.

Tusk comienza su misiva haciendo referencia a la "gravedad de la situación en el Reino Unido" y explica que los Veintisiete prevén escuchar el jueves la "evaluación" que hará May y después reunirse sin la todavía 'premier' para adoptar las conclusiones oportunas. "Dado que el tiempo se está agotando, también discutiremos el estado de las preparaciones para un escenario de falta de acuerdo", señala el presidente del Consejo, quien ayer se reunió con May después que esta decidiese retrasar la votación del Acuerdo de Retirada en Westminster ante el riesgo de sufrir una derrota devastadora.

Después, la primera ministra prometió ante la Cámara de los Comunes que buscaría "garantías adicionales" en Bruselas sobre el "backstop" irlandés, el punto más polémico del acuerdo. Para ello, emprendió una gira de urgencia por capitales europeas que ha resultado infructuosa: los Veintisiete han dejado claro que el acuerdo no se renegociará. Precisamente el Gobierno irlandés anunció ayer que está "acelerando" los planes de contingencia para hacer frente a un divorcio sin pacto.

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El ala dura 'tory' presenta una moción

May está al borde del precipicio. La 'premier' se enfrentará hoy a una moción de no confianza después de que los rebeldes del Partido Conservador hayan reunido las 48 cartas necesarias para iniciar el proceso, según ha anunciado el Comité 1922, que agrupa a los 'tories' en la Cámara de los Comunes.

El presidente de dicho comité, Graham Brady, ha recibido las 48 misivas necesarias para convocar la votación, que tendrá lugar esta tarde entre las 18:00 y 20:00. Al núcleo duro de los "brexiteers", que lleva tiempo buscando la sustitución de la primera ministra, se han unido diputados conservadores pro-UE porque consideran que May retrasó sine die la votación en Westminster solo para salvar su puesto.

En una declaración ante su residencia oficial londinense de Downing Street, la primera ministra ha afirmado que luchará "con todas mis fuerzas" para ganar la votación, para lo que necesita el respaldo de 158 diputados, el 50% de los parlamentarios conservadores en la Cámara Baja (317). Para la 'premier', elegir un nuevo líder conservador en este momento supone un "riesgo" para el futuro del Reino Unido porque un nuevo dirigente no tendrá tiempo para reabrir unas negociaciones con Bruselas, ahora que ha quedado patente que Westminster rechaza el Acuerdo de Retirada.

En su opinión, un nuevo líder tendría que retrasar la retirada del país de la UE -fijada para el 29 de marzo de 2019- o revocar el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que Londres invocó en marzo de 2017 y con el que se inició el proceso de ruptura.

May, que ayer emprendió en una gira de urgencia por capitales europeas para reabrir la negociación ante el bloqueo del Brexit en la Cámara de los Comunes, necesitará ahora el respaldo de esos 158 diputados. Si supera la moción, será 'intocable' durante 12 meses según las reglas del Partido Conservador.

Si la 'premier' no gana la votación, se iniciará una batalla por el liderazgo del partido en la que May no podrá participar. Otro posible escenario es que May supere la moción pero por un estrecho margen y decida dimitir. Dado que el Partido Conservador posee el mayor número de escaños en la Cámara de los Comunes, se espera que quien asuma su liderazgo ocupe el puesto de primer ministro.

Los 'tories' euroescépticos ya intentaron expulsar a May en noviembre, pero no consiguieron llegar al 15 % de las cartas necesarias. El "backstop" irlandés ha sido clave en esta rebelión: la polémica "salvaguarda" pensada para evitar una frontera física entre Irlanda e Irlanda del Norte ha generado un rechazo frontal entre los "brexiteers".

El "backstop" prevé que el Reino Unido permanezca en la unión aduanera y que Irlanda del Norte también esté alineada con ciertas normas del mercado único hasta que establezcan una nueva relación comercial entre ambas partes, negociada en el periodo de transición - entre el 29 de marzo de 2019 y finales de 2020-. Sin embargo, esta "garantía" puede ser indefinida si las partes no cierran el acuerdo al término del periodo de transición. Para los "brexiteers" supone seguir 'atados' a Bruselas.

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"Es lo último que necesita este país"

Tras conocerse que esta tarde se celebrará la moción, el ministro de Interior, Sajid Javid, ha afirmado que "lo último que el país necesita en este momento es una elección al liderazgo del Partido Conservador". Javid apoya a la primera ministra por considerar que "es la mejor persona para asegurar que nos marchamos de la Unión Europea el 29 de marzo".

Desde el bando rebelde, el presidente y el vicepresidente del euroescéptico e influyente Grupo de Investigación Europeo, Jacob Rees-Mogg y Steve Baker, afirmaron en una declaración conjunta que "no tolerarán" que la primera ministra haga caer al Gobierno, en clara referencia al interés de algunos partidos de la oposición por presentar una moción de censura contra el Ejecutivo.