Sólo cuatro días después de comenzar el curso escolar, la tragedia ha llegado a Denver, en Estados Unidos. Un niño de 9 años se ha quitado la vida después de confesar a sus compañeros el primer día de colegio que era gay. Su madre, Leia Pierce, asegura que los cuatro días de su hijo han sido un infierno por culpa del bullying.
En declaraciones a KDVR, Pierce relata que su hijo James le confesó durante el verano su homosexualidad: “Íbamos en el coche y estaba muy asustado, pero pronto decidió que iba a contarlo en el colegio. Estaba orgulloso de ser gay”.
James comenzó cuarto cuso de primaria el pasado lunes 20 de agosto en el colegio público Joe Showmaker, en el estado de Colorado. Sólo cuatro días después decidió suicidarse y su madre asegura que fue por sufrir acoso escolar: “Me puedo imaginar todo lo que pasó en cuatro días. James contó a mi hija mayor que los niños le dijeron que se quitara la vida”.
El colegio pide atención para los niños
El día después de la muerte de James, las autoridades del colegio Joe Shoemaker enviaron una carta a las familias de los niños en la que califican lo sucedido como “una pérdida inesperada para la comunidad escolar”. La misiva asegura que el objetivo del colegio es acompañar a las familias “de la forma más apropiada posible al compartir esta noticia con los niños, con toda la ayuda que sea necesaria”.
Se suicida un niño de nueve años por homofobia
Un portavoz escolar, Will Jones, aseguraba a la BBC que los profesores “están creando espacios para que los estudiantes compartan cómo se sienten y para procesar sus emociones. Nuestra prioridad es encargarnos de los afectados, mantener a los estudiantes seguros y revisar los hechos que han rodeado a esta trágica muerte”.
La tristeza de Leia Pierce aumenta porque su hijo no le dijo nada, prefirió quitarse la vida. Le había pedido vestir con ropa más femenina, pero no tuvo tiempo de poder hacerlo. Mientras, la policía investiga lo sucedido como un caso de suicidio.
Sólo cuatro días después de comenzar el curso escolar, la tragedia ha llegado a Denver, en Estados Unidos. Un niño de 9 años se ha quitado la vida después de confesar a sus compañeros el primer día de colegio que era gay. Su madre, Leia Pierce, asegura que los cuatro días de su hijo han sido un infierno por culpa del bullying.
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