¿Cuál es la multa que más veces pone la DGT? Casi 3.000 sanciones en una semana

Acaba de amanecer y te diriges en tu coche hacia la oficina para afrontar un nuevo día de trabajo. En el trayecto, de poco menos de 20 minutos, recibes varias llamadas de teléfono así como numerosos mensajes de WhatsApp, todos ellos de contenido laboral. Quien más, quien menos sufre esta situación de manera habitual pero, a lo mejor, no llega a percatarse del riesgo que entraña. Y es que el uso del teléfono móvil es tan inherente a esta sociedad que, en ocasiones, no somos conscientes de la cantidad de uso que le damos. Incluso dentro del coche.

Hasta hace unos pocos años, la principal preocupación de la Dirección General de Tráfico con el objetivo de tratar de frenar la cantidad de accidentes en nuestras carreteras no era otra más que controlar el exceso de velocidad al volante y del consumo de alcohol y/o drogas. Sin embargo, esta situación ha cambiado diametralmente en los últimos años: a día de hoy, la principal causa de accidente en nuestras vías son las distracciones, fundamentalmente provocadas por el uso del teléfono mientras conducimos. Así, las diversas campañas de control de la DGT arrojan un resultado claro: el móvil es uno de nuestros grandes enemigos al volante.

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El Confidencial

Así se desprende de la última Campaña Especial de Vigilancia llevada a cabo por Tráfico entre el 14 y el 20 de septiembre. En toda España, estos puntos de control especiales han monitorizado un total de 355.763 vehículos, a los que se les interpueso un total de 5.755 denuncias por diversas infracciones de tráfico. Pero los datos son claros: 2.873 de estas multas, es decir, el 49,9 por ciento, se corresponden con el uso del teléfono móvil mientras conducimos. O, dicho de otra manera, la principal infracción que han denunciado las autoridades durante su última campaña de control está directamente relacionada con nuestro terminal.

De esta manera, la sanción más veces interpuesta por la DGT durante la última campaña de control de las carreteras ha sido la relacionada con el uso indebido del teléfono móvil, castigada con 200 euros y tres puntos del carnet de conducir. Así, solo por el uso del terminal móvil en nuestro vehículo Tráfico ha recaudado un total de 287.300 euros. De hecho, para tratar de evitar que esta práctica siga extendiéndose entre los conductores, la DGT ya ha anunciado que va a endurecer este castigo con la retirada de seis puntos del permiso de conducir y, posiblemente, con el incremento de la cuantía económica de la multa.

La DGT ha puesto especial hincapié en el control de esta actividad cada vez más habitual al volante. De hecho, solo tenemos que salir al asfalto para comprobar esta realidad: tardaremos menos de un minuto en localizar a un conductor que va utilizando el teléfono móvil mientras conduce. Ya no hablamos de ir manteniendo una conversación con el manos libres del coche o responder un mensaje cuando está el semáforo en rojo, sino que en movimiento podemos observar cómo muchos conductores tienen el teléfono en su mano e, incluso, cómo dejan de atender a la carretera para escribir en su terminal.

Esta situación ha provocado que la DGT haya instalado durante este verano más de 200 cámaras de alta definición por todo el territorio nacional, cuyo único objetivo es el control de esta mala praxis. De igual manera, ha puesto en circulación 15 furgonetas camufladas para detectar esta práctica. Según explicaba el propio Pere Navarro, director de la DGT, el puesto de conducción más alto de este tipo de vehículos permite detectar a aquellos conductores que interactúan con su móvil situado en las piernas o en el asiento de copiloto, un truco utilizado de manera habitual para evitar ser captado por las cámaras.

En muchas ocasiones, el conductor no es consciente del peligro que supone utilizar el teléfono móvil mientras se conduce. Según un estudio del RACC, el 94% de los encuestados reconocen utilizarlo mientras conduce, mientras el 43% asegura haber mandado un WhatsApp al volante. Según la Asociación Americana de Automovilismo (AAA Foundation for Traffic Safety), su uso multiplica hasta un 23% la posibilidad de tener un accidente: no en vano, el hecho de responder una llamada nos puede llevar a perder de vista la carretera hasta 266 metros, y mandar un WhatsApp, hasta 600 metros. El móvil es un peligro cada vez mayor al volante.